Autor: Editora

  • Estos son los mejores lugares para trabajar para las mujeres en México

    Estos son los mejores lugares para trabajar para las mujeres en México

    La pandemia de Covid-19 desencadenó el mayor cambio en la fuerza laboral desde la Segunda Guerra Mundial, considera la firma Great Place to Work México.

    Debido al confinamiento por el coronavirus, sectores como el comercio minorista, la hospitalidad, el entretenimiento, el turismo e incluso la manufactura, lugares de trabajo con una alta representación de mujeres, inesperadamente frenaron sus operaciones, indicó la consultora en su más reciente encuesta sobre sitios de trabajo para el género femenino.

    En cambio, añadió, otros sectores como la tecnología, logística y transporte y el cuidado de la salud vivieron una repentina demanda de personal.

    Con la consideración de esta serie de cambios que afectaron principalmente a las mujeres en su trabajo y vida personal, la empresa elaboró su ranking Los Mejores Lugares para Trabajar en México para Mujeres 2021.

    “Las organizaciones de este ranking han demostrado un gran avance en lo referente a prácticas que promueven la equidad de género y la inclusión en cualquier posición, área o responsabilidad dentro de sus estructuras”, dijo Alma Rosa García Puig, CEO de Great Place to Work México.

    “Estas organizaciones afrontan de manera directa y responsable, al evidenciar los estereotipos del liderazgo, señalar los sesgos inconscientes y reconocer que las mujeres continúan trabajando en dobles o hasta triples jornadas” añadió.

    Estas son las empresas que encabezan el ranking de los mejores lugares para trabajar para las mujeres, dividido por el tamaño de cada una de ellos según el número de colaboradores.

    Grandes empresas

     

    De más de 5,000 colaboradores

    1. DHL Express México
    2. Grupo IPS
    3. Infonavit
    4. Gentera
    5. Servicios Corporativos Scotia
    6. AT&T
    7. Paquetexpress
    8. Tiendas Neto
    9. Alsuper
    10. Cotemar

     

    De 500 a 5,000 colaboradores

    1. Dell Technologies
    2. Diestra Hoteles
    3. Cisco
    4. SAP
    5. Interprotección
    6. Grupo Ruba
    7. Ragasa
    8. IEnova
    9. AstraZeneca
    10. Baxter México

     

     

    Empresas medianas

     

    De 50 a 500 colaboradores, compañías nacionales

    1. Financiera Trinitas
    2. Grupo Prom
    3. Universidad Humanitas
    4. Desarrollo y Operación de Infraestructura Hospitalaria de Ixtapaluca
    5. Molymex
    6. Henco Global
    7. EPA Digital
    8. Encora México
    9. Agacel
    10. Terminal de LNG de Altamira

    De 50 a 500 colaboradores, compañías multinacionales

    1. BASF Mexicana Sitio Puebla
    2. DLL Group
    3. Novo Nordisk México
    4. Polaris Sales México
    5. Tequila Sauza
    6. GEP
    7. Galderma México
    8. NTT
    9. JTI México
    10. Mercado Libre

    Toda la información e imágenes son de FORBES.
    Link original: https://www.forbes.com.mx/mejores-lugares-para-trabajar-para-las-mujeres-en-mexico/

  • ¿Qué les espera a las mujeres que no han podido salir de Afganistán?

    ¿Qué les espera a las mujeres que no han podido salir de Afganistán?

    En los últimos meses, Naheed Esar se ha pasado los días asentándose en su nueva vida como estudiante de doctorado en la ciudad universitaria de Fayetteville, Arkansas (Estados Unidos). Por la noche, cuando su familia en Afganistán se está despertando, les llama. «Nos intentamos calmar mutuamente», dice; «pero siempre empiezo con: ¿estáis vivos? ¿Dónde está mengano, dónde está fulano?». No duerme mucho.

    Durante 20 años, las mujeres en Afganistán han ido al colegio, iniciado carreras profesionales y luchado para conseguir cierta igualdad social con los hombres. Se han convertido en artistas, activistas, representantes políticas o actrices. Ahora, Esar y millones de mujeres están aguantando la respiración ante la repentina reconquista del poder por parte de los talibanes. Miles de mujeres están huyendo del país o escondiéndose para ver que les depara el incierto futuro.

    Los últimos seis años, Esar, de 33, ha trabajado para el gobierno afgano, empezó como experta de genero en el palacio presidencial y terminó siendo viceministra de Exteriores. Ya para entonces, las amenazas eran constantes: Esar viajaba con cinco guardaespaldas en un vehículo blindado y los perros de los artificieros olfateaban su casa una vez a la semana en búsqueda de bombas. Tras el acuerdo de paz firmado entre EE. UU y los talibanes en 2020, las perspectivas para ella -y para millones de afganas con ambiciones personales- de continuar con su vida eran cada vez más sombrías.

    Esar empezó a preparar su marcha. «Me dí cuenta de que si me quedaba, no podría abandonar Afganistán con vida», afirma.

    Barreras anti-explosiones

    Las calles de Kabul están llenas de barricadas de hormigón anti-explosiones, una señal de la precaria seguridad que había incluso antes de que la capital cayera en manos de los talibanes. FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    Cuando los talibanes controlaban el país entre 1996 y 2001, prácticamente se prohibió la educación de las mujeres, crímenes como el adulterio se castigaban con la lapidación o azotamiento y era obligatorio que las mujeres fueran acompañadas por un hombre al salir de casa. Tras la invasión liderada por EE. UU. que expulsó a los talibanes del poder, conseguir la escolarización de mujeres y niñas fue uno de los objetivos principales. Hoy, la mitad de las afganas de entre 15 y 24 años saben leer, un ratio de alfabetización femenina que dobla las cifras de 2000. Y, aunque su inclusión en el mercado laboral sigue siendo menor que en la mayoría de los países del mundo, un creciente número de afganas han formado parte del gobierno, han sido funcionarias y han trabajado en los medios de comunicación. Más de un cuarto del Parlamento está reservado para mujeres en un país de 39 millones, un porcentaje mayor que en Estados Unidos.

    Cuando cayó Kabul a mediados de agosto, el aeropuerto se convirtió en la meta para aquellos que intentaban huir del gobierno talibán y sus represalias. Más de 120.000 civiles han salido del país por esa vía desde que cayó el país, pero días antes del final de la presencia estadounidense todavía había 250.000 afganos que podían pedir visados para EE. UU que seguían en el país. Miles de personas más que creen que podrían ser objetivo de las represalias de los talibanes esperaban ayuda para salir antes de la retirada de las tropas de EE. UU el 31 de agosto. De ellas muchas no pudieron salir, aunque el presidente de EE. UU., Joseph Biden, calificó la operación de un éxito.

    Entre los que esperaban una última vía de escape había mujeres periodistas, parlamentarias, artistas, miembros de la comunidad LGTBI , traductores del ejército estadounidense y muchos otros que temen por su vida bajo el régimen talibán. Las grandes organizaciones humanitarias y esfuerzos privados han recibido mucho apoyo, pero han conseguido un éxito logístico limitado.

    Acedemia Mawoud

    Hombres y mujeres se apretujan en un aula de la Acedemia Mawoud de Kabul el 20 de marzo de 2021. Más de dos años antes un terrorista suicida detonó una bomba en una clase de álgebra y mató a más de 40 estudiantes, la mayoría de ellos hazaras, una etnia minoritaria. FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    A través del laberinto de burocracia militar del aeropuerto, un puñado de evacuados afganos ha conseguido subir a aviones y salir del país. Una docena de adolescentes pertenecientes al equipo de Robótica de Mujeres Afganas aterrizó en Doha en un vuelo especial organizado por el Gobierno catarí. Una de las primeras alcaldesas del país, Zarifa Ghafari, pudo salir a escondidas y llegar a salvo hasta Alemania después de decirle a prensa que estaba esperando a que la mataran. Estudiantes del único internado femenino del país llegaron a Ruanda después de que su fundadora quemara todos los registros escolares. (La fundadora Shabana Basij-Rasikh fue una Emerging Explorer de National Geographic en 2014)

    Naheed Esar dejó Afganistán el 17 de diciembre de 2020, en dirección a Pakistán, donde tenía una entrevista para pedir un visado que la permitiera hacer un doctorado en antropología en la Universidad de Arkansas.

    Mientras esperaba, los talibanes se hacían con más y más partes del país. Cuando llegó la visa de Esar a mediados de julio, su padre la insistió en que se fuera directamente de Pakistán a EE. UU. «¿Y si el aeropuerto de Kabul se colapsa?», le preguntó. Esar, no se podía imaginar que eso pudiera llegar a pasar. Aterrizó en Arkansas a finales de julio y ha cambiado las cosas que tenía en Kabul por ropa de segunda mano y mobiliario donado por profesores de la Universidad.

    Yendo a la autoescuela

    Mina Rezai acude a sus clases de conducir en Kabul el 15 de febrero de 2021. Aunque las mujeres conductoras seguían siendo una minoría en Kabul, había habido un aumento del numero de mujeres que aprobaban el examen de conducir en los últimos años. Fuera de Kabul, las conductoras seguían siendo tabú.

    FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    Cuando cayó Kabul, la promoción afgana de las becas Fulbright de 2021 ya tenía sus visados, dice Esar. Con los que tiene contacto han conseguido llegar a Estados Unidos. No los ha conocido en persona, pero hablan por WhatsApp y les anima a salir de las redes sociales, centrarse en sus estudios y aprovechar la oportunidad.

    Había soñado en un día poder abrir un centro de investigación puramente afgano. Ahora no sabe si podrá volver a su país alguna vez.

    Esar viene de una larga estirpe de mujeres luchadoras. Su abuela lucho en la guerrilla contra los soviéticos en los años 80 y después fue la responsable del gobierno municipal local. Bajo el régimen talibán, su madre puso en marcha un colegio ilegal para 60 niñas. Esar, que entonces tenía siete años, se autoproclamaba directora. Pero ahora parece que su familia ha perdido la esperanza. Su abuela ha fallecido y, según dice, su madre ya no quiere volver luchar. Sus padres hablan de irse, algo que antes nunca se habían planteado. Las posibilidades de poder escapar son menores cada día.

    Aryana Saeed

    El 18 de febrero de 2021, la cantante Aryana Saeed espera a que su maquillador personal le arregle el pelo mientras su prometido Hasib Sayed le hace fotos para sus redes sociales antes de grabar un episodio del «Afgan Star», un concurso de talentos de la televisión. Las amenazas contra el programa la obligaron a ella y a otras participantes a buscar pisos francos durante la producción. Saeed y Sayed huyeron de Afganistán el 17 de agosto.

    FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    Salir con vida

    Sin un plan claro ni amplio para que los evacuados pudieran llegar a aeropuerto de Kabul, la responsabilidad de ayudar a los afganos escapar ha recaído sobre aquellos con fuertes lazos y conexiones con el país.

    Shannon Galpin no ha tocado la cama en 11 días. Algunas veces se tumba vestida en su sofá de Edimburgo (Escocia) y cae en un duermevela, lista para saltar si suena el teléfono con noticias sobre las evacuaciones. Hace casi una década, en Afganistán, Galpin ayudó a poner en marcha el Equipo Ciclista Femenino Afgano. Se pasó los años siguientes apoyando a las afganas que querían llegar a ser deportistas.

    En 2020, había equipos femeninos en siete provincias y cinco carreras ciclistas femeninas por todo el país, al igual que competiciones de BMX y de ciclismo de montaña. El deporte, como la cultura y el arte, pueden ser una forma de rebelión, dice Galpin, que es estadounidense. «Es universal que la bici está ligada a los derechos de las mujeres», continúa; «es un vehículo de libertad y movilidad. Eso es la base de tu independencia e igualdad».

    Rada Akbar

    La artista Rada Akbar tuvo que cancelar su exposición de arte Abarzanan, o Supermujeres, en la que homenajeaba a mujeres afganas pioneras debido a temores por la seguridad. En su lugar, emitió por internet un vídeo para recordar a las víctimas de ataques terroristas. «Para mí, es un insulto y una falta de respeto cuando la gente no ve [a las afganas] como si hubiéramos empezado a existir en 2001», dice; «el mundo necesita conocer la historia de las mujeres en Afganistán». Tras la caída de Kabul, Akbar pudo escapar a París.

    FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    El 15 de agosto, el presidente afgano, Ashraf Ghani, huyó del país y los talibanes tomaron el palacio presidencial, algunas figuras de la comunidad global de escaladores, ciclistas y otros deportes de aventuras empezaron a hacer una base de datos para la evacuación. La lista de 400 deportistas y entrenadores afganos incluye el equipo nacional femenino de escalada, el club de esquí de Bamiyan, corredoras de maratón, corredoras de ciclismo de montaña, un grupo de parkour, equipos femeninos de baloncesto y fútbol. Galpin y sus colegas enseguida reunieron y compartieron rutas seguras hasta el aeropuerto, teléfonos de empresas de seguridad privadas y contactos para vuelos privados.

    En cualquiera de estos días, Galpin coordina la evacuación mediante 20 hilos de mensajes diferentes. Su bandeja de entrada está llena de grabaciones de lloros desesperados, informes de patrullas talibanes yendo puerta por puerta y, a veces, mensajes hostiles que ella entiende como frustración pura y dura. «Ahora, 11 días después, ¿cómo puedes decirles: ‘Lo siento, tienes que esperar’?», se pregunta; «es descorazonador. Lo que estamos haciendo en comparación con el miedo que están viviendo nunca va a ser suficiente».

    Galpin empezó a recaudar fondos para ayudar con los costes. Un taxi para ir al aeropuerto que antes costaba menos de 10 euros, ahora cuesta casi 4000 euros y lo tiene que hacer una empresa privada de seguridad. Galpin apeló a la comunidad ciclista que había apoyado a los equipos afganos en años anteriores y consiguió reunir más de 30.000 euros.

    Departamento de Refugiados y Repatriaciones

    El 1 de marzo de 2021 en Kandahar, la mujeres hacían cola para registrarse en una oficina del Departamento de Refugiados y Repatriaciones. En aquel entonces, la mayoría de la gente que llegaban eran desplazados de los distritos de Arghandab y Panjwai, en los que el avance talibán llevaba siendo imparable durante meses. FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    La recolecta de Galpin es una de muchas. El fundador de una cuenta de Instagram que hace memes lanzó GoFundMe para pagar vuelos privados de evacuación y recaudó casi 4,3 millones de euros en 24 horas. Una semana más tarde, ya eran casi 6 millones de euros.

    Pero el dinero era solo uno de los factores necesarios para sortear el caos y la fecha límite de la salida de las tropas estadounidenses. Se estima que el precio de un asiento en un avión de evacuación cuesta unos 1000 euros, pero algunos vuelos han despegado con menos de un cuarto de sus pasajeros debido a las trabas logísticas que impedían que los pasajeros embarcaran. Al principio, los talibanes permitían acceder al aeropuerto, pero durante la última semana cerraron la carretera de acceso y se paraba a los coches en controles policiales. El 27 de agosto, dos atentados bomba, reivindicados por el Estado Islámico, en las inmediaciones del aeropuerto dejaron casi 200 muertos y más de 200 heridos.

    Esta caótica situación y los constantes cambios regulatorios, obligó a que la evacuación se hiciera con cuentagotas. Por ahora, Galpin cree que unas 50 personas de su lista de 400 han podido salir, pero no lo sabrá con seguridad hasta unos días después de la retirada final del ejército de EE. UU. «Esto no acaba el 31», avisa; «en ese momento tenemos que ocuparnos de los que se quedan atrás».

    Una ciclista, que estaba en la zanja de desagüe que cruza la puerta de entrada del aeropuerto de Kabul donde los afganos se han concentrado, gritaba a los soldados que controlaban la entrada que estaba en la lista de embarque. «Dije que era un vuelo ugandés, el soldado británico se río», escribió a Galpin. Tras horas de llamadas de teléfono, la mujer pudo subir a al avión. Estaba prácticamente vacío.

    Camino a clase

    Estudiantes de la provincia de Daikundi van hacia el campus de la única universidad pública de la región, que se situaba en lo alto de una montaña en las afueras de la ciudad de Nili. Los estudiantes que no podían permitirse coger una furgoneta o una moto andaban una o dos horas diarias para llegar al centro. FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    Un futuro incierto

    Por ahora solo podemos intuir que será del Afganistán talibán.

    Lo líderes del grupo ultrarreligioso han puesto en marcha sus aparatos de relaciones públicas para intentar mostrar una cara más amable, pero ya hay soldados talibanes que se niegan a permitir que las mujeres, estudiantes y profesoras, entren en la universidad de Herat, una ciudad en el oeste de Afganistán y se han cerrado las escuelas femeninas en otras provincias desde que llegaron los talibanes. A las mujeres que han ido a comprar solas a los mercados de Mazar-i-Sharif les han dicho que vuelvan acompañadas de un protector masculino. Se ha despedido a las presentadoras de televisión. La realidad del día a día no es nada tranquilizadora.

    Durante dos décadas, el acceso de las mujeres a la educación en las plazas fuertes de los talibanes ha variado mucho. En algunos distritos, las mujeres podían viajar y asistir a las universidades gubernamentales. En otros, no hay ni siquiera escuelas de educación primaria para las niñas. En la mayoría, la educación se restringía cuando las niñas llegaban a la pubertad.

    «El Emirato Islámico está comprometido con los derechos de las mujeres en los márgenes de la Sharía», afirmó Zabihullah Mujahid, un portavoz talibán, en una rueda de prensa el 17 de agosto; «nuestras hermanas, nuestros hombres tienen los mismos derechos; podrán ejercer esos derechos… Van a trabajar con nosotros, codo con codo con nosotros».

    Para Rada Akbar, estar promesas parecen vacías, cuando no oscuramente irónicas. Akbar, fotógrafa, pintora y activista de Kabul ha sido abiertamente crítica con los talibanes. Este año, apareció en una lista de objetivos de asesinato. «Los talibanes han estado apuntando a mujeres como yo y mis amigas los últimos 20 años», dice. «La gente tiene que ser muy crédula si cree que han cambiado. ¿Dos décadas de matanzas y destrucción y de la noche a la mañana han cambiado? No. Son iguales».

    Kohna Deh

    Mujeres y niñas se reúnen a las afueras del pueblo de Kohna Deh, en el distito de Nili, para lavar ropa, mantas y otros tejidos el día antes del Nowruz, en una tradición conocida como Khana Tekaani o agitar la casa.

    FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    «La ironía es que cuando tomaron Kabul anunciaron una amnistía y dijeron: ‘Perdonamos a todos los afganos’. ¿Qué significa que nos perdonáis? Nos habéis matado. Habéis matado a nuestras amigas y compañeras. ¿Me perdonáis porqué? ¿Por ser una artista? ¿Nos perdonáis por perder la vida?».

    Hace tres meses, la familia de Akbar se reunió para comer y hablaron sobre irse. Su madre se opuso frontalmente, la familia se había ido a Pakistán en 1996 cuando los talibanes llegaron al poder. No volvería a ser una refugiada. Aun así, Akbar estaba preocupada y empezó a mandar sus pinturas y discos duros a sus amigos en el extranjero.

    El taller de yoga de Momtaz

    Miembros del taller de yoga de Momtaz hacen un picnic y practican yoga en el Palacio Chihilsottun de Kabul. El fundador del taller empezó en una oficina de una empresa de informática y por el han pasado más de 500 estudiantes.

    FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    El 15 de agosto, Akbar recibió una llamada angustiosa de una amiga fotógrafa de Kabul. «¡Rada!», Le gritó; «¡Están viniendo! ¡Están viniendo!». Akbar soltó su almuerzo a medio comer y condujo hasta la Embajada de Francia dejando tras de sí una gran parte de una década de trabajo. Tras unos días en la delegación francesa, fue trasladada al aeropuerto en un convoy de 15 furgonetas y vehículos blindados. Hubiera querido que lo hubieran hecho de noche para no ver su ciudad tomada por los soldados talibanes. Ahora, está en cuarentena en un hotel de París con cientos de compatriotas esperando a saber dónde irán. Su familia está dispersa por Alemania, EE. UU, Francia y Turquía.

    Dentro de poco habrá miles de refugiados afganos por todo el mundo y muchos más que se han quedado atrás sin vías de escape. «Cuando los estadounidenses expulsaron a los talibanes, se hizo un esfuerzo por ayudar de verdad a estas mujeres. Y, tras 20 años, se han conseguido tantas cosas en educación y vida personal», dice Melanne Verveer, que dirige el Instituto de la Mujer, la Paz y la Seguridad de Georgetown (EE. UU). «La idea de que todo eso se borre es algo que realmente está teniendo un impacto en la gente que se pregunta: ‘¿Dios mio, qué les va a pasar ahora?».

    Aun así, según los datos del instituto, Afganistán seguía siendo el segundo peor país en el que ser una mujer debido a la inestabilidad y la violencia de género.

    Las travesía montañosa durante el Nowruz

    Miles de personas celebrando el festival de primavera de Nowruz viajan horas o días a una aldea remota de Afganistán llamada Nalij. El pueblo ha organizado una celebración durante casi un siglo. Durante el régimen talibán, la festividad se prohibió debido a sus tradiciones paganas.

    FOTOGRAFÍA DE KIANA HAYERTI

    Las mujeres ganaron un poder político significativo en los últimos casi 20 años, pero ahora su futuro es incierto. Algunas líderes políticas dijeron que la vuelta al régimen talibán era inaceptable, pero otras apuntaban a que esperaban que hubiera espacio para las voces femeninas y valores islámicos.

    «Todavía no sabemos bien qué quieren los talibanes que perdamos y qué quieren que sacrifiquemos», decía Shinkai Karokhail, una parlamentaria y activista de los derechos de las mujeres, en un artículo de National Geographic de 2020; «No estamos en contra de la paz, no estamos en contra de que vuelvan los talibanes [a la política de] Afganistán si con eso se termina la guerra».

    Durante la presidencia de Barack Obama, Verveer fue la primera embajadora de Estados Unidos para Problemas Globales de las Mujeres. Durante un viaja a Afganistán, se reunió con un grupo de mujeres periodistas. Una de ellas le entregó un ramo de flores de plástico y le recordó un dicho: «Una flor no traerá la primavera, pero muchas sí». Hizo un gesto hacía las periodistas en la sala en referencia a que la primavera había llegado.

    Este recuerdo acecha a Verveer, que ahora se ha lanzado a una campaña llamada Protege a las Afganas, que ha ayudado a evacuar mujeres jueces, periodistas y activistas de los derechos humanos. «No puedo evitar pensar que el invierno se ha convertido en un invierno terrible».

    Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.

    Toda la información e imágenes son de NATIONAL GEOGRAPHIC.
    Link original: https://www.nationalgeographic.es/historia/2021/09/que-les-espera-a-las-mujeres-que-no-han-podido-salir-de-afganistan

  • Cae drásticamente el número de mujeres periodistas en Kabul: Reporteros Sin Fronteras

    Cae drásticamente el número de mujeres periodistas en Kabul: Reporteros Sin Fronteras

    El número de periodistas mujeres activas en Kabul pasó de 700 antes de que los talibanes tomaran la capital afgana, el 15 de agosto, a menos de 100, informó este miércoles la ONG Reporteros Sin Fronteras (RSF).

    RSF apunta a «los incidentes que involucran a periodistas afganas desde la llegada de los talibanes al poder y las órdenes a respetar la ley islámica (sharia)» para explicar tal merma de mujeres en los medios de comunicación.

    «En Kabul, los directores de los medios de comunicación privados constataron rápidamente que las periodistas eran acosadas», indicó la organización de defensa de la libertad de prensa, citando en especial el caso de Nahid Bashardost, quien trabajando para una agencia de prensa independiente, Pajhwok, fue «golpeada por los talibanes» cuando realizaba un reportaje en las cercanías del aeropuerto de Kabul, el 25 de agosto.

    Otras mujeres informaron que «guardias talibanes apostados ante sus oficinas de redacción les impidieron salir para realizar reportajes«, añade RSF.

    En las 48 horas posteriores a la toma de Kabul por parte de los talibanes, las periodistas de cadenas privadas de televisión osaron volver a su trabajo, pero «esa ilusión no duró», pese a las garantías de los talibanes en cuanto a que respetarían la libertad de prensa y que las mujeres periodistas pudieran trabajar, lamenta la oenegé.

    De acuerdo a una investigación conjunta realizada por RSF y el Centro para las Mujeres Periodistas Afganas (CPAWJ), en 2020, los 108 medios de comunicación que había entonces en Kabul empleaban a 1,080 mujeres, de las cuales 700 periodistas.

    «Sobre las 510 mujeres que trabajaban para ocho de los principales medios y grupos de prensa, solamente 76 (incluidas 39 periodistas) siguen en sus funciones al día de hoy. Esto es suficiente como para afirmar sobre una virtual desaparición de mujeres periodistas en la capital» afgana, infiere RSF.

    Fuera de Kabul, se constata el mismo escenario: «en las provincias donde la mayoría de los medios privados cesaron sus actividades a medida que avanzaban las tropas talibanas, la mayoría de las mujeres periodistas se han visto obligadas a marcharse y cesar sus actividades profesionales», de acuerdo a la misma fuente.

    Según la Unesco, en 2020, Afganistán contaba con 1,741 mujeres trabajando en los medios, de las cuales 1,139 periodistas. Pero entre septiembre de ese año y febrero de 2021, casi una mujer periodista de cada cinco abandonó la profesión «a causa de la violencia sufrida y las amenazas permanentes».

    Toda la información e imágenes son de EL ECONOMISTA.
    Link original: https://www.eleconomista.com.mx/internacionales/Cae-drasticamente-el-numero-de-mujeres-periodistas-en-Kabul-Reporteros-Sin-Fronteras-20210901-0050.html

  • Reapertura de las escuelas facilitará la reinserción laboral de las mujeres: expertos

    Reapertura de las escuelas facilitará la reinserción laboral de las mujeres: expertos

    EL CIERRE prolongado de las escuelas ha tenido un efecto en la reinserción de las mujeres a la vida laboral. Así lo advierte Lorena Guillé-Laris, directora de Fundación Femsa, quien subraya que la pandemia ha abierto distintas brechas sociales.

    “Los que regresaron a trabajar fueron los hombres. Las mujeres se han mantenido en casa con todas las demás tareas domésticas, entre ellas, el cuidado de los niños, y a eso le sumamos la educación sin ser expertas, porque nosotras somos mamás, pero no somos maestras y no tenemos estas habilidades y competencias desarrolladas. Hay que impulsar que las mujeres vuelvan a reintegrarse a la vida económica del país”, dice Guillé-Laris.

    En entrevista con Newsweek México, advierte que es normal que buena parte de los padres de familia sientan temor por el regreso presencial a las escuelas. Sin embargo, se trata de una medida que busca “el bien mayor para la mayoría de la gente”.

    “Hay también que impulsar políticas y facilidades para que las madres regresen a trabajar y el hecho de que los niños no puedan regresar a la escuela afecta a esa integración plena de las mujeres en la economía”, agrega.

    De acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la pandemia provocó que la región retrocediera una década en la participación de la mujer en el mercado laboral. En la última medición de ese organismo internacional, la tasa de participación laboral de las mujeres se situó en 46 por ciento, en 2020, frente al 52 por ciento registrado en 2019, en tanto que la tasa de desocupación de las mujeres se calcula en 22.2 por ciento.

    Desde el sector privado, Guillé-Laris ha trabajado en programas de desarrollo de las infancias, por ello advierte de la importancia de contribuir a que los niños regresen a entornos que les permitan realizar conexiones neuronales que deben consolidarse en los primeros años de vida.

    “En esta brecha que hay de desigualdad, pues, no todo el mundo se conecta igual desde su casa y la experiencia educativa tampoco es tan atractiva ni tan efectiva. Hay que poner la mirada en la infraestructura tecnológica que requieren los niños y en la calidad de los contenidos para que en la vida digital puedan seguir aprendiendo es sumamente importante”, explica.

    Guillé-Laris dice que con la reapertura de las escuelas debe habilitarse tanto “el hardware como en el software”, en referencia a que es necesario acondicionar los espacios físicos, pero también habrá que dotar al personal docente de herramientas para acompañar a los niños en el fortalecimiento de habilidades socioemocionales que se vulneraron por los meses de confinamiento y por la eventual pérdida de cuidadores a causa del covid-19.

    Entre las medidas recomendadas para la reapertura de las escuelas se cuenta la ventilación adecuada de los salones, el uso de cubrebocas y el lavado constante de manos. Las escuelas privadas también han implementado otras como la instalación de medidores de CO2 y las aplicación de pruebas rápidas de covid-19.

    Respecto al personal docente, Guillé-Laris adelanta que Fundación FEMSA impulsa la capacitación en línea de casi mil docentes con un seminario que se impartirá a través de una plataforma del Tec de Monterrey. Mientras que en colaboración con Proyecto DEI también llegarán a 5 mil agentes educativos para ofrecer talleres en manejo del duelo y crisis.

    Toda la información e imágenes son de NEWSWEEK ESPAÑOL.
    Link original: https://newsweekespanol.com/2021/08/reapertura-escuelas-facilitara-laboral-mujeres/

  • Cinco maneras en que el cambio climático amenaza a las mujeres y las niñas

    Cinco maneras en que el cambio climático amenaza a las mujeres y las niñas

    La emergencia climática no está en preparación, ya está aquí. Si bien toda la humanidad está sujeta a los efectos del calentamiento global, los grupos marginados como las mujeres y las niñas son vulnerables a adversidades particulares*.

    En un año en que se ha producido una avalancha mundial de catastróficas olas de calor, incendios forestales, inundaciones y sequías, el último informe de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, publicado la semana pasada, dispara una alarma imposible de ignorar: se nos acaba el tiempo para mantener el aumento de la temperatura media mundial en los 1,5 grados centígrados.

    El informe, que cuenta con 234 autores de 66 países, quienes citan 14.000 referencias, presagia eventos climáticos extremos más frecuentes y graves cuyo origen guarda relación con el comportamiento humano.

    Nadie escapa de las consecuencias angustiosas y desgarradoras del cambio climático. Según el Fondo de Población de las Naciones Unidas, el número de personas que necesitarán asistencia humanitaria se duplicará en 2030 debido a ello. (De acuerdo con la Oficina de Coordinación Humanitaria de las Naciones Unidas, unos 235 millones de personas necesitan ese tipo de ayuda este año.)

    No se trata de una competencia sobre quién sufre más cuando la naturaleza responde violentamente a los abusos perpetrados por la humanidad, pero los grupos vulnerables y marginados, como las mujeres, que constituyen la mayoría de las personas pobres del mundo y cuyos medios de vida dependen en gran medida de los recursos naturales, entre otros factores de riesgo, están expuestas a calamidades particulares.

    Según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollolas mujeres, las niñas y los niños tienen 14 veces más probabilidades que los hombres de morir en un desastre climático.

    A continuación, señalamos cinco formas más en que el cambio climático aflige a las mujeres y las niñas.

    Cientos de miles de mujeres en edad reproductiva se ven impedidas de acceder a la planificación familiar debido a las sequías, las inundaciones y otros extremos climáticos que además ponen en peligro el acceso a los alimentos y los medios de vida.

    Captura de pantella de un video del Programa Mundial de Alimentos.
    Cientos de miles de mujeres en edad reproductiva se ven impedidas de acceder a la planificación familiar debido a las sequías, las inundaciones y otros extremos climáticos que además ponen en peligro el acceso a los alimentos y los medios de vida.

    1. Más violencia de género.

    Las mujeres y las niñas, que tienen la responsabilidad primordial de recoger agua y leña para combustible, tienen que caminar más en búsqueda de recursos escasos. Cuando las poblaciones son desplazadas debido al cambio climático (pensemos en las sequía en Somalia y en Angola), las mujeres y las niñas enfrentan un mayor riesgo de violencia basada en el género en los campamentos de refugiados o desplazados internos. Las mujeres constituyen el 80 % de las personas desplazadas a causa del cambio climático. Una vez más, al buscar recursos para administrar sus hogares, caminan por territorios desconocidos, lo cual aumenta su vulnerabilidad.

    El Fondo de Población descubrió que la trata sexual se disparó después de que ciclones y tifones azotaran la región de Asia y el Pacífico, y que la violencia de pareja aumentó durante la sequía en África oriental, las tormentas tropicales en América Latina y otros fenómenos meteorológicos extremos similares en la región de los Estados árabes.

    Igualmente, según una entrada del blog del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, las tasas de violencia doméstica, abuso sexual y mutilación genital femenina crecieron durante largos períodos de sequía en Uganda. La violencia contra las mujeres aumentó en Pakistán tras las inundaciones y en Bangladesh después de los ciclones. Los países desarrollados no son inmunes.

    2. Aumento del matrimonio infantil

    Los extremos climáticos destruyen los medios de subsistencia y exacerban la pobreza. Esto puede incentivar a las familias a casar a sus hijas jóvenes para que haya una boca menos que alimentar, a cambio de un precio de la novia o porque creen que están mejorando las oportunidades futuras de una hija. Cualquiera que sea la motivación, en países afectados por desastres climáticos como Malawi, la India, Filipinas, Indonesia, la República Democrática Popular Lao y Mozambique, entre otros, se han observado aumentos en los índices de matrimonio precoz.

    3. Aumento de la mortalidad neonatal

    Las investigaciones indican que “un aumento de 1 grado Celsius durante la semana anterior al parto se asocia con un aumento del del 6 % en el riesgo durante la estación cálida (mayo-septiembre), lo que se traduce en aproximadamente cuatro mortinatos adicionales por cada 10.000 nacimientos”. Se justifica realizar una investigación más exhaustiva, pero las pruebas apuntan a una conexión entre el calor extremo y los resultados negativos relacionados con los partos.

    4. Empeoramiento de otras amenazas a la salud materno infantil

    A modo de ejemplo, las enfermedades transmitidas por vectores, como la malaria y la fiebre del dengue, se han relacionado con abortos espontáneos, nacimientos prematuros y anemia. El aumento de las temperaturas está prolongando las temporadas de actividad de los mosquitos, que propagan estas enfermedades, y los entornos húmedos fomentan su reproducción. El cambio climático también puede aumentar la propagación de enfermedades transmitidas por vectores, como el virus del Zika, que en las embarazadas puede causar graves defectos congénitos como la microcefalia (cabeza reducida debido a una anomalía cerebral).

    Las investigaciones indican que “un aumento de 1 grado Celsius durante la semana anterior al parto se asocia con un aumento del del 6 % en el riesgo durante la estación cálida (mayo-septiembre), lo que se traduce en aproximadamente cuatro mortinatos adicionales por cada 10.000 nacimientos.

    UNFPA Kenya
    Las investigaciones indican que “un aumento de 1 grado Celsius durante la semana anterior al parto se asocia con un aumento del del 6 % en el riesgo durante la estación cálida (mayo-septiembre), lo que se traduce en aproximadamente cuatro mortinatos adicionales por cada 10.000 nacimientos.

    5. Interrupción de la salud sexual y reproductiva

    Como ha demostrado claramente la pandemia de COVID-19, las emergencias desvían los recursos de atención sanitaria hacia la lucha contra la amenaza más reciente y los alejan de servicios que se consideran menos esenciales. Las emergencias debidas al cambio climático se harán más frecuentes, lo que significa que los servicios de salud y derechos sexuales y reproductivos podrían estar entre los primeros en reducirse.

    Sin embargo, incluso si se mantienen los servicios en materia de salud y derechos sexuales y reproductivos, las mujeres y niñas desplazadas a menudo pierden el acceso a estos, lo que puede dar lugar a embarazos no planificados e infecciones de transmisión sexual. También pueden perder el acceso de otras maneras, como cuando en 2019 el ciclón Idai golpeó Malawi.

    “Muchas partes del distrito de Mangochi quedaron sumergidas bajo el agua”, relató Treazer Masauli, Asistente Superior de Vigilancia Sanitaria del hospital del distrito de Mangochi. “Tuvimos que utilizar un helicóptero para llegar a zonas a las que no se podía acceder por carretera para proporcionar servicios de salud sexual y reproductiva, como condones, como método de planificación familiar y para la prevención del VIH y las ITS, así como educación entre pares y servicios relacionados con el VIH”.

    Más de 20.000 mujeres en edad reproductiva en Mozambique corrieron el riesgo de un embarazo no planificado cuando perdieron acceso a la anticoncepción a raíz del ciclón Eloise en enero. Del mismo modo, después que los huracanes Eta e Iota azotaran Honduras en 2020, se estima que 180.000 mujeres en edad reproductiva se vieron impedidas de acceder a la planificación familiar.

    La pérdida de cosechas debido al cambio climático también puede afectar la salud sexual y reproductiva. Un estudio determinó que después de impactos tales como la falta de alimentos, las mujeres de Tanzania que trabajaban en la agricultura pasaron a tener relaciones sexuales transaccionales para sobrevivir, lo que dio lugar a mayores tasas de infección por el VIH.

    El mundo debe reconocer que la salud y los derechos sexuales y reproductivos son una cuestión climática, y que las mujeres deben formar parte de la formulación de políticas climáticas. Cuando se integra a las mujeres en esa tarea, el planeta mejora debido a huellas de carbono más bajas y mayores áreas de tierras protegidas. Y cuando el planeta mejora, todas y todos estamos mejor, asegura el Fondo de Población.

    *Este artículo fue originalmente en el sitio web del Fondo de Población de las Naciones Unidas y ha sido mínimamente editado para su publicación en Noticias ONU.

    Toda la información e imágenes son de NOTICIAS ONU.
    Link original: https://news.un.org/es/story/2021/08/1495972

  • Suscribe INE convenio para prevenir y denunciar la violencia política contra las mujeres en razón de género

    Suscribe INE convenio para prevenir y denunciar la violencia política contra las mujeres en razón de género

    • Quien ejerce violencia política en razón de género no puede llegar a una candidatura: Consejera Carla Humphrey
    • Aumenta violencia conforme crece la participación política de las mujeres: Lorenzo Córdova Vianello

    Con el objetivo de promover la cultura de la denuncia en materia de violencia política contra las mujeres en razón de género, el Instituto Nacional Electoral (INE) unió esfuerzos con la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y asociaciones, así como autoridades electorales del país a través de la firma de un convenio de colaboración.

    El Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, señaló que “la atención y erradicación de la violencia política contra las mujeres, no es un tema de reciente preocupación, discusión o atención, pero es un tema que debe ser atendido”.

    “Paradójicamente, en la medida en que se ha incrementado las oportunidades para maximizar la participación política de las mujeres, también se ha venido incrementando la violencia política en contra de ellas”.

    Al respecto, Córdova Vianello destacó que este convenio “contribuirá a que sigamos dando pasos hacia adelante en un tema en el que, si bien se han registrado ya importantes avances, todavía requiere del compromiso de las instituciones y de la sociedad para alcanzar el derecho de una vida libre de violencia para las mujeres que es condición indispensable para la existencia de una auténtica y plena democracia”.

    Al presentar el convenio para prevenir y promover la cultura de la denuncia en materia de violencia política contra las mujeres en razón de género, la Consejera Carla Humphrey advirtió que este tipo de violencia es “uno de los principales lastres que impide el ejercicio pleno de los derechos políticos y electorales”.

    Uno de los más grandes desafíos del proceso electoral en curso, consideró, se relaciona con la efectividad de la reforma electoral en materia de violencia política en razón de género. “Su implementación a gran escala evidenciará su idoneidad para erradicarla”, estimó.

    El convenio que hoy se firma, agregó, establece como finalidad que las guías contenidas en la reforma de 2020 en materia de violencia política contra las mujeres se repliquen y se difundan en el ámbito local.

    “No podemos permitir que quien cometa actos de violencia política de género llegue a ser candidato o candidata a ningún cargo de elección popular, ni mucho menos que ocupe este cargo, pues ello permite perpetrar la impunidad”, concluyó.

    Reconocen firma del convenio para prevenir violencia política contra las mujeres

    El Titular de la UIF, Santiago Nieto, resaltó que este convenio representa una ventaja en materia electoral.

    Añadió que la violencia en contra de las mujeres puede ser simbólica, por no reconocer las ideas que plantea una mujer o, incluso, manifestarse en casos de oposición permanente a todas las ideas que provienen de mujeres. Las resistencias institucionales incluso pueden ser internas.

    Además de la UIF, el convenio de colaboración fue firmado por la Asociación Mexicana de Fiscales Electorales (AMFE), la Asociación de Tribunales Electorales de la República Mexicana A.C. (ATERM), la Asociación de Instituciones Electorales de las Entidades Federativas (AIEEF) y la Asociación Mexicana de Consejeras Estatales Electorales (AMCEE).

    El Presidente de la Asociación de Tribunales Electorales de la República Mexicana, César Lorenzo Wong, coincidió con la Consejera Humphrey al mencionar que “aquellos sujetos o instituciones a los cuales se les demuestre que cometieron actos de violencia en contra de la mujer por su condición de ser mujer, deben ser sancionados, ya sea de manera administrativa, electoral o penal”.

    El Presidente de la Asociación Mexicana de Fiscales Electorales, Gilberto Pablo De Hoyos consideró como un reto para todas las instituciones presentes, en especial para las fiscalías electorales, “el brindar la confianza y, sobre todo, la certeza jurídica y seguridad a las mujeres para que denuncien”.

    El Presidente de la Asociación de Instituciones Electorales de las Entidades Federativas, Oswaldo Chacón, dijo que “los 32 OPL del país celebramos la firma de este convenio que va a permitir un eficaz intercambio de información entre las distintas instituciones competentes y nos sumamos de manera muy responsable a esta iniciativa, refrendando todo nuestro compromiso para sumar esfuerzos en esta lucha.”

    Finalmente, la Presidenta de la Asociación Mexicana de Consejeras Estatales Electorales, María del Mar Trejo, expuso que “esta colaboración nos lleva a poder establecer esas bases y mecanismos operativos para coordinar la ejecución de diversos programas, estrategias, actividades de investigación, capacitación y difusión, para que podamos realmente materializar esta prevención de las conductas ilícitas y promover la cultura de la denuncia.”

    En la firma de convenio también estuvo presente el Secretario Ejecutivo del INE, Edmundo Jacobo Molina.

    Toda la información e imágenes son de CENTRAL ELECTORAL.
    Link original: https://centralelectoral.ine.mx/2021/08/31/suscribe-ine-convenio-para-prevenir-y-denunciar-la-violencia-politica-contra-las-mujeres-en-razon-de-genero/

  • La ONU pidió que se incluyan a mujeres en el nuevo gobierno talibán

    La ONU pidió que se incluyan a mujeres en el nuevo gobierno talibán

    La directora ejecutiva de ONU Mujeres, Pramila Patten, ha llamado este martes a los dirigentes talibán a que incluyan a las mujeres en el próximo gobierno de Afganistán, lo que “será la prueba de fuego” para los insurgentes.

    Así lo ha demandado en un comunicado en el que ha afirmado “tomar nota” de “los compromisos públicos asumidos por el portavoz de los talibán de defender los derechos de las mujeres en el marco del Islam, incluido el derecho de las mujeres a trabajar, a cursar estudios superiores y a tener un papel activo en la sociedad, así como el derecho de las niñas a asistir a la escuela”.

    “El desarrollo pleno y completo de Afganistán y la causa de la paz requieren la participación igualitaria y significativa de las mujeres en todos los ámbitos, incluida la vida pública y política”, ha incidido al respecto, para demandar la presencia de las mujeres en el nuevo gobierno que formarán los talibán y que se espera que anuncien próximamente.

     (AP foto/Rahmat Gul)(AP foto/Rahmat Gul)

    Patten ha aseverado que los dirigentes talibán deben tomar “medidas audaces” para incluir plenamente a las mujeres en la toma de decisiones “a todos los niveles, tanto a nivel nacional como internacional, para que puedan seguir aportando su contribución a los objetivos de igualdad, desarrollo y paz”.

    Así, ha recordado que la ley suprema de Afganistán, su Constitución aprobada en 2004, incluye disposiciones claras sobre la igualdad de derechos de todos los ciudadanos, incluida la participación de las mujeres en la vida política del país.

    También ha rememorado que Afganistán ratificó la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) y adoptó, en 2015, un Plan de Acción Nacional sobre la Mujer, la Paz y la Seguridad para garantizar la plena aplicación de la resolución 1325 del Consejo de Seguridad. “Estos compromisos son vinculantes y deben cumplirse de inmediato”, ha apostillado.

    REUTERS/Alexander CornwellREUTERS/Alexander Cornwell

    “Pido a los dirigentes talibán que reafirmen su compromiso de cumplir las disposiciones constitucionales y los tratados internacionales que garantizan la igualdad a todos los ciudadanos; que garanticen la participación plena y equitativa de las mujeres en los procesos políticos, la protección de las mujeres frente a las amenazas y los ataques basados en el género y que reafirmen el objetivo de lograr una amplia representación en la vida pública”, ha reiterado.

    De este modo, ONU Mujeres ha defendido los “avances considerables” por los que han luchado las activistas de los derechos de las mujeres afganas, unos logros “conseguidos con tanto esfuerzo, no pueden revertirse ni retroceder”.

    “La inclusión de las mujeres en la arquitectura de la gobernanza será la prueba de fuego para los nuevos dirigentes políticos de Afganistán”, ha concluido la agencia de Naciones Unidas.

    (con información de EP)

    Toda la información e imágenes son de INFOBAE.
    Link original: https://www.infobae.com/america/mundo/2021/09/01/la-onu-pidio-que-se-incluyan-a-mujeres-en-el-nuevo-gobierno-taliban/

  • Violencia contra mujeres aumentó 24% durante la pandemia: CDHCDMX

    Violencia contra mujeres aumentó 24% durante la pandemia: CDHCDMX

    La violencia hacia las mujeres se incrementó 24 por ciento en el país durante la emergencia sanitaria por Covid-19, siendo niñas y adolescentes las víctimas en 81.6 por ciento de los casos, alertó la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, Nashieli Ramírez Hernández.

    Destacó que se tiene un aumento en la violencia hacia las mujeres en general, pero quienes enfrentan mayor riesgo son aquellas que viven en áreas urbanas, en una proporción del 69 por ciento, y jóvenes de entre los 25 y 34 años de edad.

    “Sesenta y seis de cada 100 mujeres de más de 15 años han sufrido al menos un incidente de violencia de cualquier tipo a lo largo de su vida y el 44 por ciento de ellas ha sufrido violación por parte de la pareja actual o de la última a lo largo de su relación”, argumentó.

    En el “Congreso Internacional Derechos Humanos de las Mujeres” precisó que a la fecha se han declarado 25 alertas de violencia de género en el país y hay avances en términos de igualdad, pero en la parte legal aún no se ve reflejada la situación de violencia que sufren.

    Los avances normativos en materia de derechos de las mujeres, no han sido iguales en todos los estados de la República, por lo que todavía existe desigualdad en el acceso a la justicia y en los programas gubernamentales, afirmó.

    De acuerdo con datos de la Plataforma México rumbo a la Igualdad del Instituto Nacional de las Mujeres y ONU-Mujeres, el 28 por ciento de las entidades no han alineado su marco normativo a los estándares que establece la Constitución federal.

    Así como a las Convenciones Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer y sobre la Eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer.

    En cuanto a los programas de igualdad sólo 59 por ciento de los estados han logrado un avance adecuado en igualdad entre mujeres y hombres, pero 78 por ciento de las entidades aún no permite ubicar los recursos a programas para marchar en ese sentido.

    Hoy, puntualizó, el gran reto es “no retroceder en los derechos de niñas, adolescentes y mujeres”, ante una “perpetuación de la violencia”, a partir de los procesos de impunidad y la repetición de ciertas prácticas y patrones culturales.

    Toda la información e imágenes son de LA JORNADA.
    Link original: https://www.jornada.com.mx/notas/2021/08/31/capital/violencia-contra-las-mujeres-aumento-24-durante-la-pandemia/

  • Día histórico en Yucatán: asumen 14 mujeres como diputadas

    Día histórico en Yucatán: asumen 14 mujeres como diputadas

    Este martes rindieron protesta los 25 diputados electos que conforman la entrante LXIII Legislatura, integrada por siete fuerzas políticas: PAN, Morena, PRI, Movimiento Ciudadano, PVEM, PRD y Nueva Alianza y, sin precedente histórico, con 14 mujeres ocupando curules, mientras que los hombres tendrán 11 escaños.

    El PRI, por primera ocasión en su historia legislativa estatal, tendrá una representación mínima de tres legisladores de representación plurinominal. En las elecciones del pasado 6 de junio, de los 15 distritos electorales de mayoría en juego, el partido tricolor no ganó ninguno.

    La plenaria inició con la elección de la Mesa Directiva que fungirá el Primer Periodo Ordinario del Primer Año de Ejercicio Constitucional de la nueva Legislatura, con la presentación de una propuesta a cargo del coordinador de la fracción del PAN, Víctor Hugo Lozano Poveda.

    Dicho cuerpo colegiado quedó integrado por la diputada del PAN, Ingrid Santos Díaz, como presidenta; del PRI, Fabiola Loeza Novelo, vicepresidenta; del PAN, Raúl Romero Chel, y de Morena, Rafael Echazarreta Torres, como secretarios. Asimismo, como secretarios suplentes fueron escogidos del blanquiazul, Luis Fernández Vidal, y de Morena, Ruby Be Chan.

    La legisladora Santos Díaz rindió compromiso constitucional como presidenta de la Mesa Directiva, en representación del mismo cuerpo colegiado y recibió la documentación con el inventario de los bienes y documentos del estado actual del Congreso del Estado, por parte de la Comisión de Instalación y de Entrega-Recepción, la cual clausuró sus trabajos.

    La Mesa Directiva entró en funciones de inmediato y su presidenta realizó la toma de compromiso constitucional a las y los nuevos diputados para declarar constituida la LXIII Legislatura del Congreso estatal, que estarán en funciones del 1 de septiembre de 2021 al 31 de agosto de 2024.

    La fracción parlamentaria del PAN es mayoría con 14 diputados, de los cuales ocho son mujeres; la bancada de Morena está representada por 4 legisladores, tres de ellos, mujeres; la fracción parlamentaria del PRI sólo dispondrá de tres diputados (dos féminas, entre ellos).

    Las representaciones legislativas de Movimiento Ciudadano (MC), del PVEM; de Nueva Alianza, y del PRD, tendrán a un diputado. Una mujer ocupará la curul por el MC.

    Toda la información e imágenes son de LA JORNADA.
    Link original: https://www.jornada.com.mx/notas/2021/08/31/estados/hecho-historico-en-yucatan-asumen-14-mujeres-como-diputadas/

  • Miopía de Género, cuando la estadística educativa “desaparece” a las mujeres

    Miopía de Género, cuando la estadística educativa “desaparece” a las mujeres

    Si no es posible conocer el trayecto educativo de las mujeres desde que ingresan al sistema educativo nacional hasta que concluyen o lo abandonan, seguiremos proponiendo políticas educativas generalistas, que no atienden las diferencias culturales y sociales entre hombres y mujeres.

    ¿Sabe cuántas mujeres reprueban al año? ¿Reprueban una asignatura o el curso completo? ¿Son de primaria, secundaria o bachillerato? ¿Cuántas abandonan la escuela? ¿A qué edad? ¿Son hablantes de una lengua indígena? ¿Tienen una discapacidad? ¿Cuántas terminan el preescolar, la primaria, la secundaria o el bachillerato? ¿Cuántas dejan la escuela por estar embarazadas? ¿Cuántas reciben una beca para seguir estudiando? ¿Cuántas optan por el bachillerato técnico o la educación dual? ¿Cuántas no logran ingresar a la universidad?

    Si bien no sabremos cuántos estudiantes regresarán a la escuela este ciclo escolar 2021-2022, la estadística de la SEP indica que en el ciclo escolar pasado había 2 millones 422 mil 22 hombres matriculados y 2 millones 562 mil 983 mujeres estudiantes en alguna de las modalidades de educación media superior.

    Del total que son 4 millones 985 mil 005, la SEP informa que había 373 mil 133 “repetidores”, el 7.4 por ciento. ¿Cuántos son hombres y cuántas mujeres? Los datos públicos no lo informan. Pero las investigaciones educativas e incluso diversas encuestas sobre deserción escolar señalan que la repetición escolar es un factor de riesgo para el abandono escolar.

    Datos como estos son los que buscamos desde hace un año que lanzamos la Campaña Yo También Me Quedo en la Escuela en la Red de Mujeres Unidas por la Educación (MUxED). En la campaña abordamos diversos temas como educación y trabajo, la reprobación escolar, el embarazo, los beneficios de la educación para la salud, la violencia digital, educación dual, el derecho a la educación, entre otros y uno de los temas más desafiantes a los que nos enfrentamos fue “encontrar” a las niñas, adolescentes y jóvenes mujeres en las estadísticas educativas.

    La mayoría de los datos públicos y/o disponibles tanto en las investigaciones educativas, encuestas y estudios relacionados con la educación tienen lo que llamo “miopía de género” que no es otra cosa que mirar a las mujeres agrupadas en el mismo paquete que los hombres.

    Son escasas las investigaciones con perspectiva de género que reconocen, analizan y explican las diferencias de aprendizaje en el salón de clases, las expectativas sociales y culturales.  Hay tan pocos datos desagregados por sexo para el abandono escolar, el trabajo de las y los jóvenes, o las diferencias socioemocionales entre hombres y mujeres que pareciera que les pasan las mismas cosas a lo largo de su trayectoria educativa.

    En la estadística educativa de la SEP, tanto la serie histórica, como los informes “Principales Cifras” y, desde el ciclo escolar 2008-2009, el Sistema Interactivo de Consulta de la Estadística Educativa 1, no es posible rastrear el trayecto educativo de las mujeres desde educación inicial hasta educación superior. ¿Dónde se pierden en el camino? ¿Qué les pasa? ¿Qué se les dificulta?

    La estadística de la SEP solo distingue por nivel educativo tanto a los hombres como a las mujeres que asisten a cada grado escolar desde la educación inicial hasta el bachillerato; pero nada más.

    Los datos disponibles sobre el impacto que tuvo el Covid-19 en la educación los arrojó la Encuesta para la Medición del Impacto COVID-19 en la Educación (ECOVID-ED) 2020 del INEGI.2.

    Si bien la información pública de la encuesta proporciona la distribución porcentual entre hombres y mujeres por nivel de escolaridad, al separar por sexo a la población inscrita en el ciclo escolar 2019-2020, no la desagrega por edad. Cuando informa sobre el porcentaje de personas inscritas por nivel educativo, no es posible saber el dato por sexo. Luego señala que el 65.7 por ciento de la población de 3 a 29 años usó el teléfono celular para realizar sus actividades escolares, pero sin diferenciar entre hombres y mujeres, más que por nivel educativo. Al presentar así los datos se asume que tanto hombres como mujeres tienen las mismas posibilidades de contar con un celular para seguir estudiando y que lo hacen en las mismas condiciones.

    Lo mismo pasa con otros indicadores: 35.9 por ciento de las y los estudiantes de media superior, no concluyeron el ciclo escolar por “razones Covid-19”, pero no es posible saber cuántos son hombres y cuántas son mujeres. Y si bien identifica por sexo el número de estudiantes que se inscribieron al ciclo escolar 2020-2021, no los desagrega por edad; y cuando sí agrupa por edad las causas por las que no se inscribieron, no las desagrega por sexo.

    Recientemente (noviembre 2020) la Comisión Nacional de la Mejora Continua (MejorEdu) publicó los Indicadores Nacionales de la Mejora Continua de la Educación en México 2020,3 así como los indicadores estatales, de los cuales hasta el momento hay 13 informes.

    El documento nacional es un tomo de 349 cuartillas, lo cual es un primer desafío; sin embargo, se pueden obtener indicadores por sexo y por nivel educativo desde inicial, preescolar, primaria, secundaria, educación media superior y normal.  No obstante, hay ausencias, como que, si bien es posible saber por nivel educativo, tipo de sostenimiento y servicio, el porcentaje de hombres y mujeres, no se puede saber cuántas mujeres son hablantes de una lengua indígena o la formación de docentes y directivos escolares separada por sexo.

    Los indicadores también permiten conocer cuántas mujeres y cuántos hombres son atendidos en los Centros de Atención Múltiple y los USAERs desde educación inicial hasta secundaria y el tipo de discapacidad que se atiende. Un dato: hay 4 mil 806 estudiantes de secundaria con aptitudes sobresalientes, de los cuales, 2 mil 325 son mujeres; pero no hay datos sobre la atención de estudiantes con discapacidad en educación media superior y superior.

    También podemos conocer que tenemos una tasa de asistencia mayor de hombres que de mujeres en educación media superior y superior o que disminuyó en niveles similares la tasa de atención de niñas y niños en la educación inicial al pasar del 8.3 al 7.1 por ciento, entre el 2013-2014 y 2018-2019, lo que claramente refleja el impacto del cierre del programa de estancias infantiles.

    Los datos de MejorEdu permiten conocer tasas de aprobación, eficiencia terminal y abandono escolar, pero no en todos los indicadores es posible conocer por tipo de servicio o grado de marginación

    Y no es ocioso preguntarse a qué se debe la falta de indicadores con perspectiva de género en el sector educativo, y seguramente en la mayor parte de la estadística nacional. Es posible aquí aventurar algunas hipótesis: 1) No están disponibles por un problema del diseño de recolección de datos; 2) Sí existen, pero no se incluyen en el análisis que se hace público; 3) Falta capacitación sobre género a las áreas técnicas; 4) Se elude la rendición de cuentas.

    Lo cierto es que si no es posible conocer el trayecto educativo de las mujeres desde que ingresan al sistema educativo nacional hasta que concluyen o lo abandonan, seguiremos proponiendo políticas educativas generalistas, que no atienden las diferencias culturales y sociales entre hombres y mujeres; y, sobre todo, no sabremos cómo promover medidas más eficaces para que tanto mujeres como hombres se queden en la escuela.

    * Sonia del Valle es integrante de la Red MUxED, periodista especializada en política educativa, maestra en periodismo político y comunicación educativa. Es una de las coordinadoras de la campaña #YoTambiénMeQuedo en la Escuela. Redes Sociales: TwitterFacebook.

    1 Disponible aquí.

    2 Disponible aquí.

    3 Disponible aquí.

    Toda la información e imágenes son de ANIMAL POLÍTICO.
    Link original: https://www.animalpolitico.com/pluma-purpura-repensar-la-educacion/miopia-de-genero-cuando-la-estadistica-educativa-desaparece-a-las-mujeres/