Autor: Editora

  • Se publicó la Ley Olimpia en el Diario Oficial de la Federación

    Se publicó la Ley Olimpia en el Diario Oficial de la Federación

    La ley Olimpia protege a hombres y mujeres contra la violencia digital.

    Se dio a conocer que se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el decreto mediante el que se adicionan algunas disposiciones  en la Ley General  de Acceso de las mujeres a una Vida Libre de Acceso de Violencia  y al Código Penal Federal, mejor conocida como Ley Olimpia.

    La Ley Olimpia trae consigo seguridad para la mujeres que son o han sido víctimas de violencia digitalLas personas que difundan contenido íntimo sexual como fotografías, videos y audios podrán enfrentar una pena de cárcel de hasta seis años. También se impone al agresor o agresora una multa desde los 44 mil hasta los 89 mil 620 pesos. Esta reforma fue aprobada el 29 de abril y fue celebrada por colectivos feministas, activistas y mujeres que han sido víctimas de algún tipo de violencia digital. Recientemente se dio a conocer que esta reforma ya fue publicada en el DOF.

    En este sentido, el Artículo 199 se establece que comete el delito de violación a la intimidad sexual, aquella persona que comparta, divulgue o distribuya audios, imágenes, videos o audios de contenido íntimo y sexual de una persona que posea mayoría de edad, sin su consentimiento. Igualmente está penado que las personas videograben o audiograben, fotografien, impriman imágenes, audios o fotografías con contenido sexual de una tercera persona sin su consentimiento.

    Ley Olimpia publicada en el DOF

    Se publicó en el DOF la Ley Olimpia. (Imagen: Pixabay)

    Ante esta noticia, activistas y colectivos feministas aseguraron que la violencia digital tiene diferentes repercusiones en la salud mental de las mujeres. Se trata de un tipo de violencia emocional y psicológica que deriva en trastornos como la depresión y la ansiedad. Por ello, la Ley Olimpia, le ofrece a las víctimas la posibilidad de obtener justicia tras todo el abuso experimentado.

    Toda la información e imágenes son de PLUMAS ATÓMICAS / Karen Robledo.
    Link original: https://plumasatomicas.com/noticias/

  • Es tiempo de reconocer a las mujeres como agentes de cambio: INAI

    Es tiempo de reconocer a las mujeres como agentes de cambio: INAI

    Su presidenta Blanca Lilia Ibarra sostuvo que con ello se alcanzará una sociedad, plural, incluyente e igualitaria.

    Al reiterar la importancia del derecho de acceso a la información y sus aportes a la prevención de la violencia por parte de las mujeres, la comisionada presidenta del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Blanca Lilia Ibarra Cadena, sostuvo que una adecuada protección de las mujeres pasa por el conocimiento de sus derechos; mientras que la falta de información es una barrera de acceso a servicios y a la justicia; así como a la atención de varias necesidades específicas y el acceso a servicios integrales de apoyo complementario.

    “Es tiempo de acelerar el paso para garantizar el acceso igualitario y reconocer a las mujeres como agentes del crecimiento, la estabilidad y la sostenibilidad, y para que los hombres trabajen de manera paritaria con las mujeres para alcanzar una sociedad verdaderamente plural, incluyente e igualitaria”, concluyó.

    Al impartir la videoconferencia “El Acceso a la Información y la Protección de Datos Personales: requisitos para atender, prevenir y sancionar la violencia contra las mujeres”, coordinado por la Barra Mexicana, Colegio de Abogados, Capítulo Puebla, Ibarra Cadena señaló que el acceso a la información empodera a las mujeres en la lucha para exigir una vida libre de violencia y discriminación, utilizando este derecho como llave para cruzar las barreras que impone la opacidad, a fin de articular exigencias y tomar mejores decisiones al respecto además de que la prevención es la única manera de detener la violencia antes incluso de que ocurra.

    “Para una mujer que se encuentra bajo amenaza o riesgo por violencia de género, obtener información puntual sobre las disposiciones o mecanismos de protección que el gobierno está obligado a garantizar, resulta crucial a la hora de defender su vida y sus derechos”, enfatizó.

    La Comisionada Presidenta del INAI expuso que existen mujeres expuestas a un mayor riesgo de violación de sus derechos por diversos factores que se suman a su género, como las mujeres indígenas, afrodescendientes, con discapacidad y adultas mayores, así como, por contextos particulares de riesgo.

    “Prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres es una obligación que nos compete a todos y todas. Y para que este deber sea efectivo desde la esfera gubernamental, se tiene que priorizar el acceso a la información y la transparencia desde la perspectiva de género: poner a disposición toda información o datos que les permitan a las mujeres ejercer a plenitud sus derechos, sin que medien barreras o disposiciones diferenciadas que discriminen o revictimicen”, aseveró.

    Toda la información e imágenes son de W RADIO.
    Link original: https://wradio.com.mx/radio/2021/05/31/nacional/1622495176_097705.html

  • Mujeres representan más del 50% de candidatos asesinatos, advierte observatorio

    Mujeres representan más del 50% de candidatos asesinatos, advierte observatorio

    La organización advirtió que el proceso electoral actual ha sido el más violento contra las mujeres.

    El proceso electoral de este año en México ha sido denominado como el más violento contra las mujeres por Observatoria Ciudadana Todas Mx, luego de presentar su informe, donde dio a conocer los distintos tipos de violencia que las mujeres han sufrido durante este tiempo de campañas.

    Dentro de la información presentada por esta organización, Yndira Sandoval, integrante de Nosotras Tenemos Otros Datos, resaltó que 21 de los 34 asesinatos perpetrados durante el proceso electoral han sido a mujeres.

    Asimismo, precisó que se han dado muchos casos de violencia contra las mujeres, entre ellos el asesinato de la candidata Ivonne Gallegos en Oaxaca, así como el caso de Saraí Figueroa, candidata a diputada en Acambaro, Guanajuato, quien fue amenazada y baleada en su camioneta hace menos de una semana.

    También, precisó que respecto a la Violencia Política en Razón de Género (VPRG), únicamente seis de los 10 partidos que cuentan con registro nacional cuentan con protocolos de atención para este tipo de delitos.

    Respecto al proyecto de las llamadas anti boletas para exponer a candidatos que violan la ley 3 de 3 contra la violencia, Yndira compartió que hay al menos 100 denuncias en contra de quienes aspiran a un cargo público, siendo el partido Morena el que cuenta con un mayor número de denuncias, con un total de 30; mientras que Veracruz es el estado con  mayor número de denunciados, con un total de 12; aunque se informó que cinco de ellos fueron removidos como candidatos.

    Por su parte, Edurne Ochoa, integrante de 33 mujeres A.C., dio a conocer que durante este proceso electoral se vio un gran número de campañas de comunicación sexista y sin perspectiva de género, entre ellas notas, videos y audios que invalidan a las mujeres dentro de la sociedad.

    De acuerdo con el monitoreo de medios presentado por Edurne, Puebla fue la entidad que encabezó el uso de comunicación sexista en los medios de comunicación, seguido por Yucatán y Veracruz; y respecto a los tipos de violencia que predominaron se encontró la agresión por parte de los medios y candidatos, pero también violencia física, amenazas y discriminación por origen étnico.

    En cuanto a la comunicación sexista también mencionó que, principalmente, se detectó un lenguaje excluyente y sexista, que hace referencia a la apariencia física de las candidatas y, por último, ofende, minimiza e invisibiliza a las mujeres.

    Tras la presentación del análisis, Yndira dijo que la violencia política contra las mujeres es un atentando con el proceso electoral, a la vez que la 3 de 3 no caducará el 6 de junio como un lineamiento electoral, pues buscarán que sea un marco jurídico para los cargos de elección y designación para todos los órdenes de gobierno.

    Toda la información e imágenes son de MILENIO.
    Link original: https://www.milenio.com/internacional/elecciones-usa-2020/candidatos-asesinados-mas-del-50-son-mujeres-observatorio

  • Exigen feministas poner un alto a la violencia

    Exigen feministas poner un alto a la violencia

    Colectivos de mujeres reclaman por agresiones en su contra cuando salen a manifestarse, como en Chicoloapan y Atizapán; prevalece marcha en paz.

    Alrededor de 100 mujeres convocadas por medio de redes sociales se dieron cita en el Monumento a la Revolución para marchar al Zócalo. Bajo la consigna de “Me cuidan mis amigas y no la policía”, protestaron por la violencia que sufren cada vez que salen a manifestarse. En las consignas, además, mencionaron los abusos que han sufrido en Chicoloapan, Atizapán y otras marchas que han convocado.

    Las mujeres, integrantes de las colectivas Mujeres Lunares, Brujas de la Hierba, Colectiva Marisela, Brujitas de la Abue y Revolución de Lilith, llegaron con carteles en los que se leían reclamos como “¿Dónde estaban estas policías cuando las mataron?” y “No a la represión policiaca”.

    Uno de los grupos presentes en la manifestación fue el bloque negro, conformado por mujeres feministas que estaban equipadas con martillos, latas de pintura en aerosol, con su característico vestuario negro y encapuchadas.

    La marcha inició casi una hora después de la marcada en la convocatoria. Las mujeres avanzaron al grito de: “¡Alerta, alerta, alerta que camina… la lucha feminista por América Latina!

    A lado de ellas, el grupo de Ateneas, que superaba los 200 elementos, avanzaron a la expectativa de que las feministas realizaran pintas o destrozos.

    Sin embargo, esto no sucedió, las feministas marcharon por la avenida Juárez gritando consignas y pidiendo apoyo a las personas que pasaban por el lugar: “¡Mujer consciente se une al contingente!”, “¡Señor, señora, no sea indiferente, se mata a las mujeres en la cara de la gente¡”, todo ello sin dañar calles o negocios.

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    Frente al Palacio de Bellas Artes se suscitó un enfrentamiento entre las feministas y policías, que poco después fue controlado.

    Debido a otra protesta, que se instaló desde hace poco más de un mes frente al Palacio de Bellas Artes y a la gran cantidad de policías que avanzaron antes, las mujeres no pudieron llegar al Zócalo, como estaba previsto, y decidieron quedarse en la Antimonumenta a leer sus consignas.

    No obstante, los reclamos por la violencia ejercida en las protestas feministas que se iban a leer no se realizaron, debido a un conato de pelea que hubo entre las mujeres y las policías quienes, en menos de un minuto, las encapsularon.

    Ante ello, las manifestantes pidieron que se les diera espacio, que no se les encerrara, puesto que representaban un número menor al de las policías y habían avanzado de manera pacífica.

    En un extremo del encapsulamiento, las mujeres y Ateneas estaban negociando el volver al Monumento a la Revolución, pero en otro, algunas policías respondieron a las pintas y el lanzamiento de objetos que hicieron las feministas, por lo que hubo un encuentro a golpes entre, por lo menos, tres policías y tres integrante de los colectivos.

    Tras el intercambio de golpes, se logró calmar a las manifestantes y las policías abrieron el paso para que el contingente volviera al punto del que partió.

    De regreso en el Monumento a la Revolución, las feministas continuaron gritando consignas; sin embargo, en este punto incorporaron el ya nombrado himno feminista: Canción sin miedo, tomadas de la mano al frente y más atrás prendieron bengalas de color morado, característico del feminismo.

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    El grupo de mujeres se manifestó gritando consignas.

    Mientras marchaban, algunas cantaban, otras más bailaban, con lo que se evidenció que no sólo había quedado atrás el conato de pelea, sino que esa marcha era completamente pacífica.

    Al alcanzar las fuentes instaladas en el patio del Monumento a la Revolución, las mujeres se soltaron de las manos, como si llegar al punto de inicio les proporcionara alivio, tras caminar por una hora bajo los rayos del sol.

    Poco a poco, las feministas que, de acuerdo con la Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México eran 85, se retiraron en pequeños grupos, hasta que en el Monumento a la Revolución sólo quedó el grupo de Ateneas.

    Toda la información e imágenes son de EL UNIVERSAL.
    Link original: https://www.eluniversal.com.mx/nacion/exigen-feministas-poner-un-alto-la-violencia

  • La participación de las mujeres en la recuperación económica

    La participación de las mujeres en la recuperación económica

    Durante la semana anterior el INEGI dio a conocer que la economía registró un crecimiento de 0.8% en los primeros tres meses del año. Algunos especia – listas en la materia, como el Subgobernador del Banco de México, Jonathan Heath han señalado que es factible que la economía crezca 6% en este año. Aunque, la recuperación económica podría ser mejor si se incorpora una mayor participación laboral de las mujeres.

    La pandemia del COVID-19 hizo que en América Latina se perdieran 31 millones de empleos y las mujeres fueron las más afectadas. Los sectores en los que hay una mayor participación de mujeres fueron los más perjudicados como el sector turístico, el comercio al menudeo, el trabajo doméstico remunerado y el sector educativo, principalmente por la proximidad física que sus empleos requerían. También ellas son las que están tardando más tiempo en recupearlos, esto a pesar de que la participación de las mujeres traería una recuperación económica más rápida.

    De acuerdo con el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO), México, tiene la tasa de participación laboral de mujeres más baja de América Latina (41%), lo que demuestra la falta de inclusión y equidad que hay en la sociedad. Si se aumenta la tasa de participación de la mujer, al mismo nivel que los países de la OCDE (56%), se calcula que el PIB crecería 15% en una década. Por su parte, las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) muestran que, si la brecha de participación laboral entre hombres mujeres desapareciera, la producción económica aumentaría 22.5%.

    El bajo nivel de participación de las mujeres en el mercado laboral se agrava con la brecha salarial y su poca participación en puestos de toma de decisiones. En México, la disparidad de salarios entre hombres y mujeres es la más alta de los 37 países que conforman la OCDE, en el 2019 fue de 18.8%, muy por encima del promedio de los países restantes que fue de 13%. Por su parte, el informe Women in Business 2020 señala que en México sólo el 16% de las mujeres ocupan un puesto directivo o gerencial.

    En este escenario, la recuperación eco – nómica representa una oportunidad para reconfigurar este contexto de desventajas al que se enfrentan las mujeres. Para ello, se necesita la participación de todos los órdenes de gobiernos, de los organismos internacionales.

    POR ARTURO ÁVILA ANAYA

    PRESIDENTE IBN/B ANALITYCS Y EXPERTO EN SEGURIDAD NACIONAL POR HARVARD (NIS) – ARTUROAVILA_MX

    Toda la información e imágenes son de EL HERALDO DE MÉXICO.
    Link original: https://heraldodemexico.com.mx/opinion/2021/5/31/la-participacion-de-las-mujeres-en-la-recuperacion-economica-301498.html

  • La pandemia de Covid-19 alejó más a las mujeres de su derecho a la salud, educación sexual y reproducción elegida

    La pandemia de Covid-19 alejó más a las mujeres de su derecho a la salud, educación sexual y reproducción elegida

    En marzo del 2020 llegó a México la pandemia de la Covid-19 y acompañándola, se inició una serie de transformaciones y cambios en el sistema de salud público; los recursos se han concentrado de una manera importante en hacer frente al virus dejando en segundo plano las necesidades en materia de salud de las mujeres y otros grupos vulnerables.

    Las mujeres, especialmente en países de América Latina son uno de los grupos con mayores obstáculos para ejercer efectivamente un derecho básico: la salud. Estas barreras se profundizan cuando se trata de educación sexual, planificación familiar, reproducción elegida y atención obstétrica. En marzo del 2020 llegó a México la pandemia de la Covid-19 y acompañándola, se inició una serie de transformaciones y cambios en el sistema de salud público; los recursos se han concentrado de una manera importante en hacer frente al virus dejando en segundo plano las necesidades en materia de salud de las mujeres y otros grupos vulnerables.

    El aborto es una de las principales problemáticas de la salud reproductiva en el país, pero no la única. Durante el 2020 se redujo significativamente también la accesibilidad a métodos anticonceptivos, programas de prevención de enfermedades de transmisión sexual e incluso se redujo la distribución de medicamentos. De acuerdo con el estudio Nos cayó el 2020 en materia de salud elaborado por el GIRE (Grupo de Información en Reproducción Elegida), esto se explica en gran medida por el bajo presupuesto que se aprueba y ejerce en términos de salud materna, sexual y reproductiva: apenas 1.4% del total del presupuesto para la salud pública se destina a estos rubros.

    Violencia obstétrica

    Es una problemática casi invisible pero extremadamente común en los hospitales públicos de México. Las agresiones contra las mujeres y personas gestantes que van desde ocultar información relevante o darla incompleta hasta intervenir emocional, física o sexualmente son conocidas como violencia obstétrica.

    En México cerca del 30% de las mujeres ha sido víctima de algún tipo de violencia obstétrica durante el embarazo, parto o puerperio, de hecho, la muerte materna o neonatal es la expresión más grave de este tipo de violencias. Durante la pandemia se ha exacerbado la incidencia de estas problemáticas, por un lado, porque las personas gestantes no acuden con tanta frecuencia a los servicios de salud por el confinamiento y, por otro lado, debido a la concentración de recursos médicos en la atención a la pandemia.

    Durante el 2020 se observó un incremento importante de la muerte materna, que pasó de una tasa de 34 decesos a 47 por cada 100,000 nacimientos. Para resolver estas problemáticas es necesario incentivar la capacitación y especialización del personal médico y auxiliar en las unidades públicas del país, adicionalmente, extender todos los servicios obstétricos en las comunidades marginadas y en zonas rurales.

    Acceso al aborto

    Con la concentración de los servicios médicos en la pandemia, creció la restricción al aborto legal, seguro y gratuito incluso en los únicos dos estados que tienen despenalizado el aborto voluntario hasta la semana 12 de gestación, la Ciudad de México y Oaxaca. Durante este año se registraron 145,719 embarazos adicionales a los esperados y la atención por interrupción voluntarias o espontáneas de embarazos en hospitales cayó 32 por ciento. Sólo en las clínicas de interrupción del embarazo de la capital se registraron 39% menos procedimientos en abril-diciembre del 2020 en relación con el 2019.

    La interrupción voluntaria del embarazo en México se encuentra restringida en 30 de los 32 estados del país, en donde cada uno tiene legislaciones distintas que determinan en qué casos es legal practicarse un aborto, desde casos de violación hasta casos en los que la vida de la madre está en peligro, pero nunca voluntariamente. En estos estados la situación se agrava debido a que afecta directamente y con más fuerza a todas las mujeres que no cuentan con recursos económicos, educativos o temporales para viajar a los estados en los que el aborto sí está permitido.

    Considerar estas brechas es fundamental al legislar sobre la despenalización del aborto. El estudio elaborado por el GIRE, además, recomienda y resalta la necesidad de hacer legal y normalizar este procedimiento en todo el territorio nacional, al tiempo que se impulsan y promueven programas de educación sexual y acceso a métodos de prevención y planificación.

    Acceso a la educación sexual

    La planificación familiar y prevención de enfermedades de transmisión sexual es un lujo que muchos mexicanos todavía no se pueden dar. De acuerdo con cifras citadas por el estudio del GIRE, para 2021 la necesidad insatisfecha de anticonceptivos aumentará de 11 a 18%, lo que podría traducirse en embarazos no deseados y un incremento importante de las enfermedades de transmisión sexual, que, de hecho, repuntaron en los últimos cinco años.

    Adicionalmente en México cerca de 36,000 mujeres viven con VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana) y aunque no tienen tanta visibilización, la discriminación y los obstáculos para acceder a los tratamientos persisten.

    En este sentido es fundamental que se implementen campañas masivas y efectivas de difusión de información y acceso a métodos anticonceptivos, alternativas de planificación familiar, educación sexual y enfermedades. Ampliar la disponibilidad, distribución y dar gratuidad a todos estos servicios también es clave para redirigir las tendencias al alza de embarazos no deseados y contagios de enfermedades de transmisión sexual.

    El acceso a preservativos, métodos de anticoncepción, educación sexual, interrupción voluntaria del embarazo, atención materno-infantil y seguimiento obstétrico son derechos básicos de la salud femenina. La salud materna, sexual y reproductiva son asuntos básicos de la salud pública. La salud pública es un derecho humano. Obstaculizar en cualquier expresión el acceso de las mujeres a estos servicios es una violación importante de los derechos humanos, y la importancia de estas violencias radica en que pueden costar la vida de las mujeres.

    El GIRE, en su informe sobre salud y muchas organizaciones autónomas nacionales e internacionales continúan en la búsqueda de construir nuevas legislaciones y derribar las barreras para que todas las mujeres sin importar sus condiciones individuales puedan acceder a un derecho básico: la salud.

    Toda la información e imágenes son de EL ECONOMISTA / Ana Karen García.
    Link original: https://www.eleconomista.com.mx/politica/La-pandemia-de-Covid-19-alejo-mas-a-las-mujeres-de-su-derecho-a-la-salud-educacion-sexual-y-reproduccion-elegida-20210530-0002.html

  • Estereotipos de género coartan participación laboral de las mujeres

    Estereotipos de género coartan participación laboral de las mujeres

    Para Susana Yolanda Martínez, prácticamente todos los días son iguales: de cuidar durante la mañana entera a su madre, pasa sin escalas a cuidar su propia casa durante la tarde y la noche, con un tiempo mínimo para dedicarse a sí misma o pensar en la búsqueda de un trabajo remunerado. Y así, semana tras semana…

    “Mi mamá tiene Alzheimer, y como vivimos muy cerca, desde las 7:30 de la mañana me paso con ella para cuidarla. No es tanto el tiempo, sino ver que no se caiga, que no agarre nada. A las tres de la tarde llega mi hermana, la que solventa los gastos de mi mamá, y ya me dedico a mi casa. Se me va todo el día en eso y la mayoría de los días es así”, cuenta a La Jornada.

    El ser la única que no tiene un empleo pagado en su núcleo familiar hace que Susana asuma casi por completo esta labor de cuidados.

    “Ahorita no tengo tiempo para mí o es muy poco; si es una hora al día, es mucho. Para buscar trabajo, tampoco, porque mi tiempo se lo dedico mucho a mi mamá. Hay veces que la cuido desde la mañana hasta la noche, y es cuando me voy a mi casa a dormir”.

    Un caso similar es el de Lourdes Ponce de León, quien a diferencia de sus familiares varones, destina hasta el 60 por ciento de su tiempo al aseo de su hogar y al cuidado de su padre y sus dos hijas. Esas actividades ha logrado compaginarlas con la venta de ropa, a la cual le dedica algunas horas cuando el día es propicio.

    Aunque ha combinado bien sus ingresos como comerciante y la pensión económica que le da su ex pareja, Lourdes afirma que “claro que buscaría” algún trabajo que le reporte más dinero, porque “siempre nos hacen falta más cosas”. Por la imposibilidad de hacerlo, y por el efecto sicológico de pasar mucho más tiempo en casa, sigue pensando que el costo a pagar por dedicarse mayormente a su hogar y su familia es muy alto.

    “Los hombres se enfocan más a trabajar para traer el sustento al hogar, ya llegan cansados y no quieren hacer nada. ¡Al contrario, quieren que todo les hagan! Pero una como mujer tiene que trabajar, asear, dar de comer, lavar, ¡todo! Una no puede cansarse, aunque invierta más tiempo y más esfuerzo, más todo”, lamenta.

    Los estereotipos de género, “una barrera” para la inserción laboral.

    Los anteriores son dos botones de muestra de cómo los estereotipos de género impiden una mayor participación laboral remunerada por parte de las mujeres, y cómo son ellas las que más han padecido los estragos económicos de la pandemia de Covid-19.

    Un estudio reciente del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), titulado “La vacuna contra la desigualdad”, indicó que, desde el inicio de la pandemia, 34 por ciento de las mujeres fueron “expulsadas” de su trabajo, frente a 26 por ciento de los hombres.

    De igual forma, la más reciente Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo reveló que, al cuarto trimestre de 2020, había 4.1 millones de personas disponibles para trabajar, pero no lo hacían por tener que dedicarse al cuidado de sus familiares. El 85 por ciento de ellas eran mujeres, “por lo que la carga de cuidados constituye una barrera para reinsertarse” al trabajo, destacó el análisis del CIEP.

    Además del efecto en la pérdida de empleos, señalaron los autores del documento, se encontró que, en términos relativos, en el cuarto trimestre de 2020, el ingreso de los hombres ocupados era aproximadamente 1.2 veces mayor al de las mujeres.

    Por otra parte, la organización indicó que entre el primer y cuarto trimestre de 2020, “se reportó un incremento de 159 mil mujeres no disponibles para trabajar, lo cual se relaciona con el aumento de la participación de mujeres y niñas en el trabajo no remunerado y las tareas domésticas y de cuidados que aumentaron a raíz de la pandemia”.

    Lo anterior, debido a que “las creencias sexistas tradicionales dan por hecho que ellas son quienes tienen que ocuparse de estas labores. […] Cuando los sistemas de salud tienen una alta demanda, hay cierre de escuelas y guarderías, y la atención en el hogar se incrementa, siendo en muchos casos una carga invisible para las mujeres”, resaltó el CIEP.

    En promedio, señaló el informe, “las mujeres asumen el triple de horas (39 horas semanales) de trabajo de cuidado no remunerado, pues los hombres se responsabilizan de 13 horas semanales”.

    Toda la información e imágenes son de LA JORNADA.
    Link original: https://www.jornada.com.mx/notas/2021/05/31/sociedad/estereotipos-de-genero-coartan-participacion-laboral-de-las-mujeres/

  • Explotación sexual infantil: patrones que se han identificado en escuelas de México

    Explotación sexual infantil: patrones que se han identificado en escuelas de México

    La Oficina de Defensoría de los Derechos de la Infancia identificó, con testimonios de menores de edad, patrones de abuso sexual en escuelas. Las víctimas tienen entre 3 y 7 años.

    Corría el año de 2011 y la entonces Procuraduría General de la República buscó a la Oficina de Defensoría de los Derechos de la Infancia (ODI) para pedirles apoyo en la atención de 30 menores de entre 3 y 5 años que habían sido víctimas de abuso sexual en un preescolar público en la ciudad de México. A partir de la denuncia y señalamientos hechos por los padres y los menores, testimoniales recopilados por la ODI desde 2008 y que resultaban confusos, lo confirmaron: niñas y niños son víctimas de violencia sexual organizada en sus escuelas.

    “Lo que vemos es que los patrones no sólo son llamativos por la cantidad de niños y la cantidad de agresores, sino que el tipo de violencia es muy inusual. Se trata de violencia con elementos ritualísticos y escenificaciones, así como la presencia de cámaras (de video) que pareciera tratarse más bien de la producción de material de explotación sexual (…) entre más pequeños son las víctimas de explotación sexual infantil, más extrema es la violencia”, dice Margarita Griesbach, directora general de la ODI en entrevista con Animal Político.

    De la sospecha al horror

    La primera denuncia en 2011 destapó una situación que resultaba difícil de creer: más de 30 niños y niñas, estudiantes del preescolar público Andrés Oscoy ubicado en la hoy alcaldía de Iztapalapa, en la ciudad de México, habían sufrido abuso sexual en la escuela.

    De los testimonios de los menores se detectó a 10 personas -desde la directora del plantel hasta el personal de intendencia- como sus agresores directos. Doce menores describieron ser agredidos por más de un adulto de manera simultánea.

    “Lo vivido por los niños y niñas no se trata de varios agresores que coinciden en una misma escuela, sino de un grupo de personas que de manera coordinada y conjunta agreden a los alumnos”, se lee en el informe “Es un secreto. La exploración sexual infantil en escuelas” coordinado por la ODI y acompañado por los activistas y académicos: Karina Ansolabehre, Maite Azuela, Lydia Cacho, Denise Dresser, Manuel Gil Antón, José Guevara, Lorenzo Meyer, Juan Martín Pérez y Luis Daniel Vázquez.

    En el documento, se exponen a detalle los casos de tres escuelas de nivel preescolar -en la CDMX y el Estado de México- en donde se advierte sobre los patrones delictivos que apuntan que jardines de niños y primarias han sido utilizados como espacios para la comisión de delitos de explotación sexual infantil en línea.

    Las agresiones descritas por los menores resultan inusuales en casos de abuso sexual infantil ya que narran abusos extremos ejercidos con violencia. Algunos refirieron ser amarrados o amordazados y una niña dice haber sangrado. Asimismo, las víctimas dijeron haber sido sometidas a dinámicas y rituales grotescos.

    “Varios niños refieren que el abuso tomaba lugar en el marco de juegos. De manera consistente niños y niñas describen ser penetrados con jeringas con agua, con popotes o con papeles sucios, incluso manchados con excremento”, describe el informe.

    Los menores también refirieron ser ahorcados u obligados a lastimar a otros compañeros y compañeras, así como ser grabados o fotografiados.

    Mayoritariamente estos abusos sucedían en el baño de la escuela, pero también eran violentados en la dirección, en salones, en el patio, e incluso en cuartos de drenaje.

    “Algunas referencias de los niños y niñas resultan tan extrañas que sólo cobraron relevancia a la luz de casos que conocimos posteriormente. Una niña refiere que la lastimaban cuando se quedaba dormida y otra niña dice ser sacada de la escuela y llevada a otro lugar donde era violentada. La sedación y que las víctimas sean sacadas de la escuela, son patrones que en otros casos se repetirían”, se detalla en el documento.

    Tres años antes, en 2008, la ODI representó el caso de una niña de 5 años que refirió ser víctima de abuso sexual en el preescolar privado en el que estudiaba. La menor fue sacada del colegio y llevada en un automóvil -con otros de sus compañeros- a una casa en la que había adultos extraños. “Me sacaba de la escuela y me llevaba a un lugar malo… me hacían muchas cosas feas”, refirió la niña en su testimonio.

    Aunque este caso nunca llegó a juicio dadas las filtraciones de la entonces Procuraduría de Justicia del Distrito Federal, tras revelarse lo sucedido en 2011 en el preescolar en Iztapalapa, el caso ayudó a sumar los elementos para identificar patrones delictivos.

    También en 2011, familiares de menores inscritos en el preescolar público Laura Elena Arce Cavazos, en Cuautitlán, Estado de México, denunciaron abuso sexual cometido por un profesor. Al momento de declarar en la Procuraduría de Justicia del Estado de México, los menores nombran a seis adultos como sus agresores.

    Con estos tres casos ya se habían identificado los patrones del abuso sexual a menores dentro escuelas preescolares y primarias -públicas y privadas-, sin embargo, en 2018 un nuevo caso llega a la ODI: 49 niños y niñas víctimas de violencia sexual en un preescolar público en la CDMX.

    En esta ocasión 16 niños y niñas describieron a más de un adulto al momento del abuso. En total se mencionaron a 11 adultos trabajadores del centro educativo incluyendo a la directora, varias maestras, personal de intendencia y un supervisor pedagógico.

    Según el informe coordinado por la ODI, los menores dijeron que cuando se acercaron con docentes -hombres y mujeres- para comentarles lo sucedido, las respuestas que recibían eran inconsecuentes e incluso recibían amenazas.

    Uno de los factores que más llamaban la atención al momento de que niños y niñas brindaban sus testimonios, era la constante de ser sacados de la escuela y llevado a otros espacios donde no sólo había adultos desconocidos, sino que también se encontraban otros menores que no eran de su escuela.

    Se trató de una acción que de inicio resultaba tan difícil de creer, incluso fue considerado como un mecanismo de defensa emocional durante la narración infantil. Sin embargo, cuando se obtienen mejores condiciones de escucha resulta innegable la reiteración y contundencia con la que se describe este hecho.

    “Como en casos anteriores, los niños y las niñas refieren elementos grotescos como ser penetrados con papeles sucios que son tomados del basurero. Otros refieren orina, excremento o vómito durante las agresiones”, agrega el informe.

    Amenaza, confusión y trauma

    Las afectaciones presentadas por la totalidad de víctimas de abuso sexual en sus escuelas fueron extremas.

    Algunos de ellos comenzaron a tener comportamientos violentos. En uno de los casos un menor amenazó a su madre con un cuchillo. Otros tuvieron comportamientos de agresión sexual en contra de hermanos o hermanas más pequeños y algunos más manifestaron episodios disociativos en los que permanecían incapaces de responder durante ciertos periodos.

    Asimismo, la confusión generada en los menores sobre la complicidad de sus padres en el abuso les generó graves daños psicológicos.

    “Una niña refiere que fue llevada a una casa donde sufrió abuso y que sus padres estaban presentes, pero ‘estaban hechos invisibles’”, se detalla.

    También les amenazaban permanentemente de que, si decían algo de lo que sucedía, lastimarían a sus padres.

    “Incluso algunos refieren que las amenazas eran gráficas, que su madre sería enterrada en el arenero o que sus padres serían convertidos en calavera y por tanto les causaban aún más temor a hablar. Silenciados, la gravedad del trauma ocasionado se manifestó de otras maneras”, agregan.

    Particularmente los menores tenían terror de ir al baño, llegando al extremo de que algunas familias tuvieron que colocar bacinicas o cubetas en la sala o pasillo de sus hogares porque sus hijos se negaban a entrar al baño.

    Otros síntomas y traumas del abuso fueron: trastorno de alimentación, dolor de estómago, infecciones en las vías urinarias, rozadura o dolor genital, enojo, agresión, tristeza, rechazo agudo a la escuela, pesadillas y/o terror nocturno y comportamiento sexualizado.

    No sólo en México

    A fin de poder entender los patrones hallados en los casos anteriores, la ODI se alió con organismos gubernamentales y civiles internacionales como End Violence, Interpol, Homeland Security – ICE y The International Justice Mission a fin de ubicar si esta situación se presentaba en otras naciones

    La búsqueda rápidamente los ubicó en Jerusalén, Israel, en donde pudieron contactar al reportero Haim Rivlin quien ha documentado casos similares a los de México.

    Inicialmente él documentó el caso de 65 niños y niñas que sufrieron abuso sexual cuando tenían edad preescolar. Estos hechos tuvieron lugar en 12 escuelas ortodoxas en Jerusalén.

    Posteriormente se sumó el caso de 100 niños y niñas -también en edad preescolar- que fueron víctimas de abuso sexual en el barrio de Nachlaot en 2011, así como otras 104 víctimas violentadas en barrios del norte de Jerusalén en 2012. Todos con patrones criminales similares.

    “Entre los rasgos similares se observa que en los casos de Jerusalén algunos niños y niñas presentan confusión sobre si sus padres son o no sus verdaderos progenitores (…) al igual que en los casos registrados por la ODI, estas confusiones inusuales pudieran ser indicativas de estrategias utilizadas para generar confusión en las víctimas sobre lo sucedido o para hacer que su narrativa sea menos creíble”, indica el informe.

    Apenas es la punta del iceberg

    Si se tenía conocimiento de cuatro casos sólo en la CDMX y el Estado de México entre 2008 y 2018, y se tenía la documentación de lo que sucedía en Jerusalén, ¿cuántos casos más habría en el país?

    A través de solicitudes de información y haciendo consultas a las recomendaciones de comisiones de derechos humanos estatales se logró tener un acercamiento: 37 casos fueron identificados como posibles coincidencias en patrones, pero sólo fue posible conocer a mayor detalle lo referido por las víctimas en 18 escuelas en siete estados de la república mexicana.

    Se trata de seis casos más en CDMX, cuatro en Jalisco, dos en Oaxaca, dos en Morelos, dos en el Estado de México, uno en San Luis Potosí y uno más en Baja California.

    “En todos los casos se trata de agresiones en contra de niños y niñas de entre 3 y 7 años de edad. Trece de los casos refieren abuso que se comete en contra de grupos de víctimas. Algunos describen abuso frente al salón o la escuela entera. En un caso, por ejemplo, el maestro es denunciado por un vecino que desde la ventana de su edificio observa que se abusa de los niños y niñas en el patio de la escuela. Resulta por supuesto difícil de entender cómo un delito de esta naturaleza se comete de manera tan abierta dentro del contexto escolar”, se lee en el documento coordinado por la ODI.

    Tras el procesamiento de datos hechos con la información pública obtenida se revelaron hechos perturbadores como que en seis de estas escuelas los niños y niñas refirieron presenciar actos sexuales entre adultos que participaban en la agresión y en siete escuelas las víctimas narran ser obligados a realizarse tocamientos entre los propios niños y niñas.

    En 16 de las 18 escuelas identificadas, los menores describieron actividades ritualistas como ser desnudados y amarraros, ser obligados a orinar sobre otras personas o a introducir las manos en orina mientras son agredidos.

    En cuatro escuelas más se reportó el uso de máscaras o disfraces y en una escuela los niños y niñas reportaron ser disfrazados como animales y obligados a ladrar.

    Entre la impunidad y la justicia

    De los casos presentados y acompañados por la ODI entre 2008 y 2018, actualmente hay 7 persona en prisión.

    Filtración de información, amenazas, falta de comunicación entre las distintas instancias y otros hechos han llevado a que familias desistan de las denuncias y quienes la sigan tengan que enfrentarse a un sistema plagado de fallas que han limitado la impartición de justicia en estos casos.

    Luego de los seguimientos hechos a lo largo del tiempo, se detectaron cuatro mecanismos de impunidad que son los que han permitido que no haya justicia por los hechos vividos por niños y niñas de entre 3 y 5 años: (1) deficiente coordinación entre la actividad policial, la coordinación de la investigación y la representación del Estado como parte acusadora, (2) la fragmentación de una investigación haciendo literalmente imposible el esclarecimiento de criminalidad compleja, (3) la falta de especialidad y adecuación en los procedimientos de justicia para las niñas, niños y adolescentes y (4) la exclusión de la víctima para intervenir activamente en la investigación criminal.

    A 10 años de los hechos ocurridos en el preescolar Andrés Oscoy, en la alcaldía de Iztapalapa, las víctimas aún no reciben una reparación justa e integral por los graves daños ocasionados por seis servidores públicos encargados de protegerlos y educarlos

    En 2016, cinco años después de los hechos se dictó sentencia a los seis perpetradores.

    El conserje recibió una condena de 467 años y 3 meses de prisión, así como una multa de un millón 233 mil pesos; la directora 88 años de prisión y una multa de 260 mil 063 pesos; el auxiliar de dirección 81 años de prisión y una multa de 328 mil 858 pesos; el asistente de servicios 36 años de prisión y una multa de 129 mil 288 pesos; y las dos personas de servicio social 68 años de prisión y multa de 199 mil 673 pesos.

    En el caso del preescolar Laura Elena Arce Cavazos, en Cuautitlán, Estado de México, de los seis señalados por los menores como sus violentadores sólo uno de ellos tuvo una sentencia por 16 años y 10 meses de prisión, una multa de 35 mil 396 pesos y la inhabilitación de 10 años para ejercer como educador frente a grupo.

    Sobre los hechos ocurridos en 2018 en otro jardín de niños en la CDMX en donde 49 niños y niñas fueron agredidos sexualmente aún no se tienen sentencias pues se trata de un caso abierto.

    Respecto al papel de la Interpol y la posible existencia de una red internacional de delincuencia, la directora general de la ODI señala que esa investigación debe hacerse coordinadamente con el estado mexicano.

    En varias ocasiones se ha solicitado a la Fiscalía General de Justicia que se indague sobre ello, pero se han negado a pedir apoyo internacional.

    “Es una investigación que tiene que hacer el estado, hay cosas que son imposibles, los ciudadanos no podemos sustituir al estado (…) los ciudadanos no podemos investigar si hay una red internacional de delincuencia, sobre todo en casos de explotación y material de explotación sexual infantil, es una investigación que es imposible hacer si no se es una autoridad autorizada, facultada para hacerlo”, subraya.

    Escuchar y confiar

    Margarita Griesbach, directora general de la ODI, recapitula y sostiene que este informe sobre la explotación sexual de niños en escuelas públicas y privadas es apenas un acercamiento de lo que en realidad puede estar pasando en las escuelas. Se debe investigar urgentemente pues este informe abrirá la puerta a que se develen más casos con los mismos patrones.

    “Dentro de todo lo horrible que narra el informe estamos frente a una gran oportunidad para que esto cambie. (…) lo que se puede cambiar es empoderar a los niños para poder hablar sin temor. Hay que hablar directamente con los hijos y las hijas y decirles que les vamos a creer y les vamos a proteger”, sostiene Griesbach al preguntarle sobre cómo seguir confiando en los centros educativos a donde se lleva a los hijos.

    También resulta necesario atender y modificar la infraestructura de las escuelas en el país pues éstas están construidas de forma ajena a la seguridad de los niños, lo cual consideró absurdo.

    “El hecho de que existan dentro de las escuelas casas particulares donde vive y duerme el conserje es un sinsentido, cuartos oscuros y bodegas son áreas que representan múltiples riesgos para la infancia y que no tienen cabida en una escuela y menos en una escuela publica”, observó.

    En tanto, la Secretaría de Educación Pública (SEP) también debería modificar la respuesta que tiene cuando se le notifica una denuncia de abuso sexual, pues antes de pedir la intervención de la Fiscalía General, hace una investigación interna para decidir si dan vista o no a la autoridad judicial.

    “Exijamos que se cambien las cosas (y tengamos) confianza no solo en la escuela, sino la confianza en que nuestros hijos saben que si algo les pasa que les lastima nos pueden decir porque les vamos a creer y les vamos a proteger”, concluyó Griesbach.

    Toda la información e imágenes son de ANIMAL POLÍTICO.
    Link original: https://www.animalpolitico.com/2021/05/odi-abuso-sexual-ninas-ninos-escuelas/
  • Las Mujeres del Maíz resguardan los secretos de la gastronomía jalisciense

    Las Mujeres del Maíz resguardan los secretos de la gastronomía jalisciense

    Una experiencia culinaria dotada de sabores y texturas desconocidas aguarda a los visitantes a tan sólo una hora de Guadalajara.

    Recetas ancestrales y platillos de origen prehispánico aún se resguardan con orgullo a través de las manos expertas de Las Mujeres del Maíz. Es en el municipio de Ahualulco de Mercado, Jalisco, en donde un grupo de ellas se ha dado a la tarea de rescatar y transmitir el legado de la gastronomía jalisciense.

    Al frente de esta iniciativa se encuentra la investigadora culinaria y chef Maru Toledo, quien ha recopilado más de 700 recetas, mismas que guardan el auténtico sabor de Jalisco.

    Junto con ella hábiles cocineras tienen la misión de salvaguardar los secretos de esta expresión gastronómica, que puede ser degustada por turistas y locales, quienes descubren en el lugar una forma de reconectarse con su pasado ancestral.

    A un poco más de una hora saliendo desde Guadalajara, Ahualulco de Mercado aguarda paciente para recibir a los visitantes en el centro de interpretación ‘El Rancho Santina de la Covadonga’.

    Ahí se pueden descubrir nuevos sabores y texturas a través de un menú de platillos tradicionales de la gastronomía jalisciense: como las dobladas de pasta verde o de hongos, el mole de cacahuate, salsa de elote o tamales blancos bañados con mole.

    Las mujeres del país
    Foto: Cortesía Secretaría de Turismo del Estado de Jalisco.

    En todas estas exquisitas propuestas la proteína animal está prácticamente ausente, puesto que distintas investigaciones, sobre la cocina prehispánica, aseguran que la carne no formaba parte de la dieta en las culturas originarias del Occidente de México.

    gastronomía jalisciense
    Las mujeres del maíz. Foto: Cortesía Secretaría de Turismo del Estado de Jalisco.

    Para ofrecer una experiencia aún más cautivante, el espacio en donde se desarrolla esta expresión culinaria fue animado por distintos utensilios tradicionales de barro, metates y comales, todo ello rodeado de una hermosa vegetación.

    Asimismo, se ofrecen visitas guiadas, previa reservación, en grupos pequeños a los talleres de cocina y comida. Además el centro funciona como escuela de humo para estudiantes de gastronomía, quienes pueden ser parte de las costumbres de la gastronomía jalisciense.

    Toda la información e imágenes son de FORBES.
    Link original: https://www.forbes.com.mx/forbes-life

  • Ataques contra mujeres quedan impunes: sólo se juzga el 0.04% de los casos

    Ataques contra mujeres quedan impunes: sólo se juzga el 0.04% de los casos

    En los últimos ocho años, sólo 781 agresiones contra mujeres fueron juzgadas como intentos de feminicidio. Muchas agresiones violentas son desatendidas por las autoridades y se clasifican con otras figuras jurídicas, denuncian especialistas.

    A pesar de recibir 37 puñaladas en todo su cuerpo, Jeysol venció a la muerte. Es una sobreviviente de feminicidio pero la justicia mexicana no la protegió. Una mala actuación de las autoridades al clasificar como lesiones un hecho de violencia extrema que debió ser tentativa de feminicidio, causó que pasara un calvario entre hospitales y audiencias durante seis años, pero sin obtener justicia ni tranquilidad todavía. Su agresor sigue libre. 

    Ella es es sólo una de las historias de los intentos de feminicidio que quedan desamparados por la justicia en México.

    En los últimos ocho años, las fiscalías de todo el país abrieron 595 investigaciones diarias en promedio por golpes, quemaduras, estrangulamientos, lesiones con armas blancas o de fuego contra mujeres, es decir, más de 1.7 millones en total. Sin embargo, en el mismo lapso de tiempo sólo se iniciaron 781 carpetas de investigación por feminicidio en grado de tentativa.

    Ilustración: Sheila Galicia.

    De esas casi dos millones de investigaciones, se desconoce cuántos casos de extrema violencia que llegaron a juicio como lesiones o violencia familiar debieron ser clasificados como tentativa de feminicidio. Ya que especialistas consultados para esta investigación señalan que existen casos que debieron ser clasificados por este delito y no lo hicieron por falta de perspectiva de género en la administración de justicia.

    Con la formulación de más de 1,200 solicitudes de acceso a la información a las fiscalías y tribunales de las 32 entidades del país, esta investigación, realizada en alianza con CONNECTAS, deja en evidencia las dificultades que enfrentan las mujeres que sobrevivieron a un intento de feminicidio para acceder a la justicia.

    LA CIFRA NEGRA DE TENTATIVA DE HOMICIDIO

    La noche de su cumpleaños fue su peor pesadilla. Era su festejo número 35, en abril de 2017 y Yuliana quiso celebrarlo junto a sus amigas en un bar al centro de Xalapa, Veracruz. Fue así, hasta que su expareja la obligó a salir de la fiesta.

    Empezó con reclamos e insultos, luego vinieron los golpes. Por más de cuatro horas, Yuliana recibió puñetazos, patadas y fue estrangulada hasta perder el conocimiento. “¿Tú sabes lo que se sentiría estar muerta?”, la amenazaba su expareja serpenteando una navaja sobre su cuello.

    Ese día Yuliana estuvo a punto de ser asesinada; pero logró convencer a su agresor de parar el ataque y llegó a un hospital. Ella teme volver a ser agredida y ha cambiado de domicilio en más de dos ocasiones, incluso vendió su auto para no ser identificada.

    Yuliana López lucha por acreditar la tentativa de feminicidio contra su ex pareja. Foto: Marco Gutiérrez.

    Quiere que su caso sea clasificado como tentativa de feminicidio, ya que Carlos, su expareja, también está acusado por presuntamente cometer un feminicidio en 2016. Yuliana siente que su vida está en riesgo.

    Su caso forma parte del millón 712 mil 522 carpetas de investigación abiertas por ataques y agresiones violentas en contra de mujeres. Aunque ella sabe que su expareja la quería asesinar, aún no logra que el delito se clasifique como intento de feminicidio.

    De ese total de casos por ataques y agresiones, las autoridades decidieron clasificar el 68% por el delito de violencia familiar, con la apertura de un millón 158 mil 166 carpetas de investigación y el 32% por lesiones dolosas es decir 553 mil 575 casos.

    En tanto, menos del 0.05% fueron calificados como feminicidio en grado de tentativa. Es decir, en los últimos ocho años, sólo 781 agresiones contra mujeres fueron juzgadas como intentos de feminicidio.

    Ana Yeli Pérez, asesora jurídica del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, asegura que muchos casos de violencia extrema en contra de mujeres se atienden con el mínimo esfuerzo de las autoridades. “En muchas ocasiones se investiga y se judicializa con otras figuras, por ejemplo, violencia familiar, lesiones o tentativas de homicidio. Tiene que ver la falta de perspectiva de género y la falta de debida diligencia”, refiere.

    Hay falta de perspectiva de género en las investigaciones, de acuerdo con Ana Yeli Pérez. Foto: Connectas.

    La importancia de que los casos donde la víctima sufrió una tentativa de feminicidio sean clasificados como tal, radica en que pueden ameritar prisión preventiva oficiosa para el agresor. Esto a partir de la ampliación del catálogo en las reformas al Código Nacional de Procedimientos Penales que incluyó el delito de feminicidio en febrero de 2021. Con esto, las sobrevivientes tendrían protección para evitar un segundo ataque.

    La justicia aún está en deuda con las sobrevivientes. A pesar de la apertura de investigaciones por casos de violencia contra mujeres, no todos llegan a una sentencia condenatoria para los agresores. En ocho años sólo se han dictado 5 mil 901 sentencias condenatorias por violencia familiar en todo México; 6 mil 410 por lesiones dolosas y sólo 182 por tentativa de feminicidio. 

    Para las sobrevivientes, el acceso a la justicia y obtener una sanción para sus agresores es fundamental para retomar su vida y seguridad. Especialistas también afirman que se necesita una reparación integral del daño para las víctimas, ya que algunas mujeres persisten con afectaciones en su salud física y emocional que requieren de intervención especializada.

    “Hay una serie de secuelas físicas, económicas, emocionales que le cambian totalmente el destino a las mujeres. No solamente tienen que salir de sus casas, sino que pierden su trabajo, la movilidad”, sostiene Ana Yeli Pérez.

    LOS RETOS PARA ACREDITAR LA TENTATIVA DE FEMINICIDIO

    Falta de claridad en las leyes, que no exista unificación en los conceptos jurídicos ni su correcta aplicación, forman vacíos legales que impiden que los casos de extrema violencia contra mujeres sean juzgados como un feminicidio en grado de tentativa.

    La tentativa es una figura jurídica que se encuentra en todos los Códigos Penales para dar sanción a una conducta cuando se tuvo la intención de cometerla, la cual tiene como pena de uno a dos tercios de la sanción original.

    Para identificar un caso de tentativa de feminicidio se debe cumplir con las circunstancias por razones de género que establecen el Código Penal Federal por el feminicidio: que la víctima haya sido incomunicada, que se presenten lesiones o mutilaciones, signos de violencia sexual, amenazas o agresiones previas, que entre la víctima y el victimario haya una relación de confianza, o que el cuerpo de la mujer se exponga en una vía pública.

    Resulta complejo acreditar que el agresor tuvo la intención de asesinar a la víctima, pero cuando se demuestra que el victimario se detuvo por razones externas a él, como la intervención de un tercero, es posible demostrar la tentativa de feminicidio.

    Las leyes en México no están armonizadas en cuanto a la tentativa de feminicidio, ya que sólo cuatro estados del país contemplan en un artículo, explícitamente, el “feminicidio en grado de tentativa”, es decir, la literalidad de ese delito. Se trata de Campeche, Durango, Nuevo León y Puebla, los cuales exponen textualmente las agravantes del castigo cuando se trata de agresiones por razones de género que no llegaron a la muerte.  

    Ante las autoridades legislativas se han presentado dos iniciativas para unificar el concepto de la tentativa de feminicidio, pero siguen congeladas y las sobrevivientes se mantienen en riesgo.

    “Incluir el tipo penal como tal de la tentativa de feminicidio para algunos estados resulta ocioso, sin embargo nosotras creemos que es necesario dada la dificultad que para algunos estados y autoridades les entraña la calificación del delito”, asegura la activista Argentina Casanova, quien ha dado acompañamiento a casos de tentativa de feminicidio en la Ciudad de México y Campeche.

    A pesar de que Campeche fue el primer estado en incorporar la literalidad de este delito en su Código Penal, el Fiscal General del estado, Juan Manuel Herrera Campos, asegura que no todos los casos de agresiones contra mujeres son una tentativa de feminicidio y que no tendría que existir la literalidad en las leyes locales.

    “Yo considero que no (es necesario) porque es una cuestión técnica y el propio Código establece lo que es tentativa”, afirma, pero reconoce que es necesaria la capacitación de jueces y magistrados para litigar con perspectiva de género.

    De igual forma, la abogada Ana Yeli Pérez, también directora de la Asociación Justicia Pro Persona, señala que sería reiterativo incluir la literalidad de la tentativa de feminicidio en las leyes de cada estado. “Me parece que más bien hay un desuso de la ley o de esta figura por la falta de capacidades”, dijo.

    En tanto, para Karen Quiroga, secretaria de Igualdad de Género del Partido de la Revolución Democrática y una impulsora de la legislación en favor de unificar la tentativa de feminicidio a nivel nacional, subraya que la literalidad es necesaria para que las mujeres conozcan de qué manera ampararse ante una situación de violencia extrema.

    “Las víctimas necesitan literalidad en la ley. Cuando las mujeres van a presentar una denuncia, cuando reciben el primer daño físico, cuando tienen la oportunidad de aún en vida ir a denunciar al agresor, hay veces que se permite el error de una conciliación”, dice Quiroga. 

    LA JUSTICIA NO PROTEGE A LAS SOBREVIVIENTES

    Mónica Hernández ahora puede dormir tranquila. El hombre que intentó asesinarla en diciembre de 2019 está en prisión, esperando un juicio en su contra por tentativa de feminicidio. Es afortunada, pues su caso es de los pocos ataques de violencia extrema contra mujeres que llegan a la justicia clasificados como feminicidio en grado de tentativa.

    Sin embargo, a pesar de vivir en lo alto de una montaña no se siente segura. “Creo que el miedo siempre existe de que él pueda salir. Te confieso, ando armada todo el tiempo, es lo que me da seguridad”, afirma.

    La Fiscalía le asignó medidas de protección en su domicilio, pero ella las ve poco efectivas.  “De repente llegó una patrulla, muy lindos, muy amables llegaron a mi casa nos tomamos un café, me dijeron estamos a sus órdenes pero yo estoy aquí a medio bosque. Ellos se fueron y no volvieron. Nunca me sentí segura”, afirma.

    Mónica Hernández no se siente tranquila a pesar de vivir en una zona boscosa a 25 km de Xalapa. Teme que su agresor salga de prIsión. Foto: Marco Gutiérrez.

    Tiene temor de vivir una nueva agresión a pesar de que su vivienda se encuentra en la aislada comunidad El Zapotal, en Veracruz, a 25 kilómetros de la capital, donde se llega sólo en auto y casi no hay patrullas.

    Al igual que ella, otras 107 mil 74 mujeres cuentan con órdenes de protección por casos de violencia, de acuerdo con cifras del Banco de Datos de Información sobre casos de Violencia contra las Mujeres (Banavim) de la Secretaría de Gobernación.

    En Jalisco, el estado con más desapariciones en México, es donde más medidas de protección se han asignado a mujeres, con 53 mil 320 órdenes que deben ser ejecutadas por policías municipales. Seguido de Quintana Roo con 8 mil 812 y Zacatecas con 5 mil 457.

    En contraste, Tamaulipas sólo reporta que da protección a dos mujeres, de acuerdo con la misma base de datos. En el listado de menos órdenes asignadas está Durango con 16, Aguascalientes con 20 y el Estado de México sólo asignó 55 medidas de protección, a pesar de ser una de las regiones más peligrosas para ser mujer, donde incluso se han emitido dos Alertas de Violencia de Género por el alto número de feminicidios y desapariciones.

    Sin embargo, el Estado mexicano ha fallado en proteger a las víctimas. Para esta investigación se solicitó a todas las fiscalías del país información sobre los casos de feminicidio que ocurrieron a pesar de que las mujeres contaran con una orden de protección. En los últimos cuatro años, las fiscalías registraron 23 feminicidios, donde las mujeres fallecieron a pesar de estar al cuidado de las autoridades.

    En Jalisco se detectaron seis feminicidios a pesar de que las mujeres tenían medidas de protección, seguido de Sinaloa con cuatro y Coahuila con tres. Los demás estados, Zacatecas, Yucatán, San Luis Potosí y Nuevo León tuvieron dos casos respectivamente, mientras que Chihuahua y Sonora tuvieron una víctima cada uno, que la justicia estatal no pudo defender.

    Sobrevivientes de feminicidio fundaron una colectiva para acompañar a mujeres de todo el país que sufrieron violencia extrema. Foto: Marco Gutiérrez.

    Estas mujeres eran protegidas por las agrupaciones policiales de cada estado, tras denunciar agresiones principalmente cometidas por sus exparejas, por los delitos de violencia familiar, feminicidio en grado de tentativa, lesiones dolosas y amenazas, pero aún así fueron asesinadas.  

    Para este reportaje se consultó a las autoridades de los estados para conocer sobre la efectividad y cumplimiento de las órdenes de protección de mujeres; sin embargo, hasta la publicación de esta investigación no se ha obtenido respuesta.

    Las sobrevivientes viven en un riesgo constante, algunas no dejan de huir de sus agresores, ya que las autoridades se niegan a velar por su seguridad. “Te das cuenta que no sólo tienes que pelear contra el agresor sino que tienes que enfrentarte también contra un sistema que no funciona para atender a las víctimas”, afirma Mónica Hernández Abascal, sobreviviente de feminicidio quien se niega a convertirse en una de las mujeres asesinadas diariamente en México.

    Gloria Peña @GloriaPE_

     * Una investigación realizada por Gloria Piña para Proceso, Animal Político, EMEEQUIS, La Lista, Ruido en la Red y CONNECTAS, con el apoyo del International Center for Journalists (ICFJ) en el marco de la Iniciativa para el Periodismo de Investigación de las Américas. 

    Toda la información e imágenes son de EMEEQUIS.
    Link original: https://www.m-x.com.mx/al-dia/ataques-contra-mujeres-quedan-impunes-solo-se-juzga-el-004-de-los-casos-