Autor: Editora

  • Crece la participación de las mujeres y los jóvenes en la industria del turismo: WTTC

    Crece la participación de las mujeres y los jóvenes en la industria del turismo: WTTC

    La participación de las mujeres y los jóvenes en la industria del turismo presenta un  crecimiento de 24% y 28% respectivamente, en comparación con los niveles del 2010, dijeron el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), y el Centro Global de Turismo sostenible.

    Ambos organismos compartieron los datos como parte de los resultados de una investigación realizada por ambas instituciones para favorecer tanto al sector femenino de la población, como a los trabajadores más jóvenes.

    “Al proporcionar información y datos sobre la situación del sector, el informe permite a los países y regiones establecer objetivos claros para empoderar a las mujeres e involucrar a los jóvenes”, expresó Ahmed Al Khateeb, Ministro de Turismo de Arabia Saudita, entidad impulsora del Centro Global de Turismo Sostenible.

    A la fecha, son 48 millones de mujeres las que trabajan en la industria, empleadas principalmente en el ramo de la hotelería, dice el informe.

    Asimismo, resaltan detalles del informe, en todo el mundo las mujeres representan una mayor proporción del empleo en el sector turístico que la fuerza laboral de toda la economía en Asia-Pacífico y las Américas.

    En cuanto al empleo juvenil, los resultados de la investigación destacan que más de la mitad del trabajo de los jóvenes a nivel mundial en el sector de viajes y turismo se produjo en la región de Asia-Pacífico, con 9.2 millones de puestos registrados hasta 2021.

    Con una tasa de crecimiento del empleo en jóvenes de casi 37% entre 2010 y 2019, la región Asia-Pacífico superó a todas las demás áreas, que estaban más cerca de 20%, completaron el WTTC y el Centro Global de Turismo Sostenible.

  • Una pausa en el amor para echarse de menos: ¿funcionan los tiempos sabáticos en las relaciones?

    Una pausa en el amor para echarse de menos: ¿funcionan los tiempos sabáticos en las relaciones?

    En Estados Unidos, donde bautizan con un nombre atractivo a todos esos hechos o tendencias que en el resto del mundo tildamos de “cosas que pasan”, han creado el marital summer sabbatical. Sirve para definir a ese tiempo vacacional en los que una pareja se separa. Un período que puede ir de días a semanas. Ocurre especialmente en verano, como indica su nombre, pero también en las recién finalizadas Navidades, cuando cada miembro debe viajar a diferentes lugares para ver a su familia.

    Si una tendencia necesita primero un nombre para existir, exigirá después a un famoso para ponerla de moda. Piers Morgan, conocido por sus titulares machistas en la televisión británica y, en España, por ser el periodista que entrevistó a Luis Rubiales tras el escándalo del beso no consentido a Jenni Hermoso, ya ha apostado por estos descansos programados. Lo supimos a través de su esposa, Celia Walden, que publicó un artículo en The Telegraph en el que aseguraba que haberse tomado seis semanas de parón sabático en su matrimonio le ha ido de maravilla.

    “¿Sabes cuando tu ordenador se vuelve terriblemente lento sin ninguna causa discernible y la solución siempre es apagar y reiniciar? Eso es lo que hace un tiempo sabático matrimonial. Ni pasaba nada malo en la relación, ni estábamos fallando. Pero cuando consideras lo antinatural que fue pasar cada hora del día en compañía de tu otra mitad durante todos esos largos meses del confinamiento, lo cierto es que es un milagro que cualquier pareja, casada o no, haya salido ilesa”, escribe sobre los 42 días que pasaron separados.

    En realidad, las pausas sabáticas dentro de las relaciones se han practicado durante siglos, como explica en The marriage sabbatical: the journey that brings you home (El año sabático matrimonial: el viaje que te lleva a casa) Cheryl Javis. En la Edad Media, las mujeres casadas adineradas que querían pasar tiempo a solas se retiraban a los conventos. La autora se pregunta qué les ocurre en la actualidad a esas parejas cuyos trabajos no les ofrecen la posibilidad de pasar largos períodos separados y subraya la importancia que tienen estas pausas o descansos, pues en su opinión otorgan una mayor esperanza de vida a los matrimonios. “En un momento en el que muchos se preguntan cómo hacer que sus matrimonios prosperen durante largos años, es vital ver los períodos sabáticos dentro del matrimonio no como una patología, sino como una promesa”, escribe.

    Al parecer, no es la única que lo piensa, pues la proveedora de productos íntimos y empresa del sector del bienestar sexual Lovehoney Group así lo señala en su informe 2024 Sex Trends Reports. Destaca que muchas personas están cambiando conscientemente sus estrategias de relación para darse prioridad a sí mismas, por lo que están aumentando los períodos sabáticos en las relaciones. Se trata de tomar breves pausas en las relaciones para explorar el crecimiento personal, los objetivos y el autodescubrimiento antes de volver a la pareja.

    Relaciones sabáticas, pero comunicativas

    Cualquiera de cierta edad (o con suscripción a televisión a la carta) a quien se le mencione “un descanso” recordará inmediatamente la frase “¡Estábamos tomándonos un descanso!”, que Ross le espeta a Rachel en Friends para justificar que él tuviese sexo con una mujer sin que eso supusiese una infidelidad. De este parón sentimental tan televisivo, por cierto, Cecilia Bizzotto, socióloga y portavoz de JOYclub España, aplicación para encontrar citas y encuentros sexuales, cree que podemos aprender la importancia de dejar claro qué significado tiene esa pausa. “¿Podemos acostarnos con otras personas? ¿Nos lo contaremos después? ¿Vale hacerlo con cualquier persona? ¿Nos mantenemos en contacto o nos desconectamos absolutamente entre nosotros? Si convivimos: ¿Cómo lo gestionamos? ¿Podemos acostarnos con otra persona en la casa de ambos? Hay que autoanalizar qué estamos buscando, qué esperamos del otro y ser asertivos para evitar problemas de comunicación si no queremos acabar como Rachel y Ross”, advierte.

    Muchos considerarán que la pausa debería servir únicamente para disfrutar de la soledad, encontrarse a uno mismo y tener tiempo para echar de menos a la pareja, pero sería caer en el error de que existe un solo modelo relacional clásico, una sola forma de sentir y de convivir. Igual que no hay una sola manera de estar en pareja, tampoco existe una única forma de tomarse un tiempo. “Cuando una pareja toma la decisión de darse una pausa sabática, lo hace porque cree que es lo conveniente para sus problemas. Considera que darse aire, echarse de menos, tomar tiempo para pensar y respirar con calma les ayudará a reenfocar la relación, ver hacia dónde quieren dirigirse, sopesar pros y contras y hacer un buen análisis de la situación”, explica Bizzotto. “Pero para otros puede implicar la vía para hacer realidad fantasías sexuales con otras personas, para conectarse eróticamente con terceros más allá de la pareja y probar cosas nuevas. Decidir un enfoque u otro no es ni malo ni bueno, depende de las necesidades de cada persona de la pareja y de lo que decidan acordar”.

    Otros expertos en relaciones apuestan por diferenciar entre las pausas sabáticas y darse un tiempo. Ambas situaciones implican un espacio temporal, pero la intención y el enfoque son diferentes. “La pausa sabática se centra principalmente en el crecimiento personal, la autoexploración y el autodescubrimiento. Ambas partes buscan tiempo para nutrir sus necesidades individuales. Se lleva a cabo mediante un acuerdo mutuo y consciente entre la pareja, donde ambas partes están de acuerdo en tomar este tiempo para su desarrollo individual y, de paso, fortalecer la relación”, explica Ainoa Espejo, coach y grafóloga personal y de relaciones. “La comunicación durante la pausa sabática es clave. Las parejas suelen establecer límites claros, compartir expectativas y mantener una conexión emocional a lo largo de este período. A veces puede estar propiciado por eventos externos, ajenos a la relación, como las vacaciones, separación por trabajo u otros motivos”.

    “Por un lado, hay que aceptar las necesidades de cada cual y comprender que, si nuestra pareja necesita espacio, hemos de respetarlo y no insistir para que cambie de parecer, pues eso suele generar el efecto contrario”, continúa Espejo. “También reflexionar sobre qué es lo que me preocupa de ese tiempo de distancia. ¿Que se acueste con otros? ¿Sentir soledad? ¿Que deje de necesitarme? ¿Que se olvide de mí? Si basamos una relación en la confianza y los acuerdos, nada de eso debería preocuparnos, y si la otra parte no respeta los límites acordados o se da cuenta de que sola está mejor, tampoco tiene sentido seguir juntos”.

    Las ventajas de parar para volver a empezar

    Como explica Espejo, en una sociedad caracterizada por la brevedad y la aceleración constante, tomarnos pausas y reevaluar periódicamente nuestras vidas resulta esencial. “Decidir libremente cada día si queremos seguir compartiendo nuestro camino con esa persona puede otorgar un nivel de compromiso más auténtico. Este acuerdo diario, basado en decisiones maduras y conscientes, puede superar la aparente solidez de relaciones sostenidas por pactos formales o situaciones compartidas a largo plazo. Es un recordatorio de que la verdadera esencia del compromiso reside en la elección continua de estar juntos, haciendo que cada día sea un acto renovado de amor y conexión genuina”, asegura.

    Tomarse un tiempo sabático en la relación permite a muchas personas revalorizar a sus compañeros y apreciar lo que tienen a su lado día a día, dejar de dar por hechos los pequeños detalles y comprender por qué están con esa persona. “Considero que uno de los aprendizajes que deberíamos adquirir de tomarnos un tiempo es descubrir por qué hemos necesitado esta fórmula de pausa sabática para tener tiempo para pensar”, indica Bizzotto. “¿Quizá tenemos una relación demasiado absorbente donde no tenemos espacio para nosotros mismos, nuestros proyectos, amistades o simplemente para oír nuestros pensamientos? ¿Cómo podemos priorizar el tiempo individual en la convivencia de pareja?”.

    Un matiz clave

    Cheryl Lynn Jarvis puntualiza en The Marriage Sabbatical: The Journey That Brings You Home que estas pausas sabáticas suelen ser más complicadas para las mujeres. La psicóloga conductual Carol Gilligan añade que las mujeres están condicionadas a ser más relacionales que los hombres: mientras que ellos desarrollan su identidad a través de la separación y la autonomía, las mujeres desarrollan su identidad a través de las relaciones con los demás. “Debido a que las mujeres han sido educadas para invertir más en las relaciones y a que su sentido de sí mismas está organizado en torno a la afiliación, les resulta psicológicamente más difícil alejarse de las relaciones en sus vidas”, asegura. En este sentido, es posible que esa pausa en el amor pueda ser doblemente beneficiosa para ellas: no solo pueden replantearse una relación en concreto, sino su modo general de relacionarse con el mundo. Como terapia, no tiene precio.

  • Revolución reproductiva: Cada vez más mujeres pueden empezar una familia en la madurez

    Revolución reproductiva: Cada vez más mujeres pueden empezar una familia en la madurez

    Cada vez con más frecuencia, la gente está posponiendo la maternidad y la paternidad. Desde hace años, la ciencia le ha posibilitado a las mujeres empezar una familia en la madurez. En el futuro cercano podríamos ver métodos cada vez más avanzados para extender la fertilidad.

    Chillis siempre había querido ser madre

    Dos semanas antes de cumplir 48 años, Eboni Camille Chillis estaba acostada en una cama de hospital, lista para dar a luz a su primer hija.

    En sus veinte y treinta había esperado un final feliz, de comedia romántica. “Quería enamorarme, casarme y tener un bebé,” me contó la educadora y emprendedora que vive en Atlanta. “Pero no fue así”. Cuando la pandemia la obligó a desacelerar su vida y reflexionar, decidió tener un hijo sola. 

    Estaba a mitad de sus cuarenta. De acuerdo con su edad y los resultados de sus estudios, la probabilidad de concebir con sus propios óvulos era menor a 1%, por lo que inició su búsqueda. Por años, revisó perfiles de donadoras de óvulos y donadores de esperma, analizando a detalle sus fotos de bebés, historial médico, películas favoritas.

    empezar una familia en la madurez
    Eboni Camille Chillis, de 48 años, carga a su hija recién nacida en el cuarto de la bebé, en su casa en Atlanta. Cuando Chillis decidió tener un hijo como madre soltera, se enfrentó con la realidad de la escasez de donantes negros de esperma y óvulos. Coescribió un artículo sobre esta problemática para Psychology Today. (Nos pidió no revelar el nombre de su hija). / JACKIE MOLLOY

    Una vez que encontró a los dos donantes que parecían ser los adecuados, era momento de preparar su útero para la transferencia embrionaria. Durante las dos semanas anteriores a la intervención, se inyectó progesterona todos los días. Después, lo siguió haciendo a lo largo del primer trimestre del embarazo.

    En enero de 2023 nació la hija de Chillis, quien llegó al mundo al ritmo de Isn’t She Lovely? de Stevie Wonder. Una enfermera colocó a la bebé en el pecho de Chilis y de inmediato su boca diminuta quiso ser amamantada. Cuando lo logró, se disolvió la incertidumbre de los años previos y Chillis pensó “Vamos a estar bien”.

    Empezar una familia en la madurez

    En Estados Unidos, en 1970 la edad promedio de una mujer que daba a luz por primera vez era de 21.4 años. Para 2021, era de 27.3. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, entre 1985 y 2022 la tasa de natalidad para mujeres entre 40 y 44 años se triplicó. En el caso de aquellas mayores de 45 años, en 2022 la tasa se mantuvo baja pero supuso un incremento de 12% respecto al año anterior. Si bien las cifras varían según el país, muchos lugares del mundo muestran la misma tendencia.

    Para que quede claro, no es nuevo que algunas mujeres tengan hijos en la madurez. En 1940, la tasa de natalidad en Estados Unidos para mujeres entre 40 y 44 años, incluso de más de 45, era ligeramente mayor que en 2022. Pero, en aquel entonces, la norma era que esos nacimientos correspondieran a su tercero, cuarto o quinto hijo.

    Un cambio en la forma de vivir

    Hoy día, las personas tienen hijos en la madurez y, en algunos casos, sin pareja. Es una historia familiar: frecuentemente los individuos con acceso a métodos anticonceptivos más confiables, priorizan la educación y sus carreras profesionales antes de asumir las responsabilidades absorbentes de la crianza. La disponibilidad de mejores oportunidades profesionales para las mujeres y el cambio en los roles de género familiares han sido factores clave.

    Mientras tanto, las tecnologías de reproducción asistida, como la fecundación in vitro (FIV), han permitido tener hijos en circunstancias que en el pasado hubieran sido difíciles. Esto derivó en por menos 12 millones de bebés que nacieron a nivel global, concebidos mediante FIV. Hoy, la ciencia explora nuevas líneas de investigación que prometen continuar revolucionando la reproducción y permitiéndole a las mujeres empezar una familia en la madurez cada vez con más facilidad.

  • Poetas para un nuevo 27: la generación de mujeres que domina la poesía en español

    Poetas para un nuevo 27: la generación de mujeres que domina la poesía en español

    Si aquella foto del Ateneo de Sevilla en el homenaje a Luis de Góngora de 1927 se tuviera que repetir unos 100 años después, en vez de hombres trajeados y rostros masculinos podrían aparecer en su lugar un buen número de mujeres. Si ellos demostraron innegable talento, dotes, voluntad y audacia sobrada para reinventar el camino de la poesía en el pasado siglo, lo mismo ocurre en el presente. Se enfrentan a él con armas similares, iguales vocaciones, distintas herramientas… pero la misma fe. La que emana de una confianza ciega en la poesía como forma de abordar el mundo.

    Como a ellos ayer; a ellas hoy las une también cierta angustia por un tiempo incierto, pero el convencimiento de que, para iluminarlo, conviene emplearse a fondo en la tarea de rescatar de la ciénaga el lenguaje y hacerlo digno de la más noble condición humana mediante el arte de la poesía.

    Para aquel homenaje quedaron inmortalizados Rafael Alberti, Federico García Lorca, Juan Chabás, Mauricio Bacarisse, José María Romero Martínez, Manuel Blasco Garzón, Jorge Guillén, José Bergamín, Dámaso Alonso y Gerardo Diego. Faltaban algunos hombres y también sobraban allí, en la imagen de la que luego fue bautizada como Generación del 27. No estaban aquel día Luis Cernuda, Pedro Salinas, Emilio Prados, Manuel Altolaguirre, Vicente Aleixandre, Juan José Domenchina… Pero, sobre todo, quedaron fuera un buen puñado de mujeres, sin permiso de residencia en el canon. Poetas que con idéntico derecho merecían su lugar. Hablamos de Ernestina de Champourcin, Josefina de la Torre, Concha Méndez, Carmen Conde, Concha Lagos…

    A tres años de cumplir aquel centenario, en una misma década, pero con distinto pálpito, las mujeres que hoy aparecen en esta portada de Babelia también marcan una época. No están todas las que deberían, por supuesto. Los azares y los lugares a veces no cuadran con el momento oportuno, pero quienes acudieron a la cita que planteamos en el Círculo de Bellas Artes de Madrid sí representan, entre la cincuentena y la treintena de años, a dos generaciones vigorosas y plenas de talento en la poesía en español contemporánea. Una más madura, a la que pertenecen Lara Moreno, Ada Salas, Julieta Valero, Ana Merino y Raquel Lanseros y otra de sólida juventud ya consagrada como Elena Medel, Berta García Faet, Ángela Segovia y María Gómez Lara.

    De izquierda a derecha, Elena Medel, Raquel Lanseros y Ana Merino.
    De izquierda a derecha, Elena Medel, Raquel Lanseros y Ana Merino.XIMENA Y SERGIO

    Todas encarnan la creatividad digna y central, ética y estética, de su género. Abordan territorios comunes y angustias discordantes en el imperio de lo que define esta época: el eclecticismo. Aficionados como somos a menudo en empeñarnos a ver el triunfo de las sombras, ellas niegan con su trabajo la mayor y alumbran el panorama literario presente con sus luces. Ya hubo Siglo de Oro, Edad de Plata, no sabemos qué metal reserva la historia para este presente. Una potente aleación, sin duda, de muchos quilates. Por las mujeres y los hombres que lo enriquecen, con la devoción poética múltiple y global de nuestro tiempo.

    La reinvención que a todos nos retó tras la apisonadora de las vanguardias, aquella ruptura que llevó a Marinetti a pronunciar su odio a la luna, legó una arrolladora libertad que marca este siglo. Con la variedad y el pluralismo como señas de identidad, cree Raquel Lanseros (Jerez de la Frontera, 50 años), ganadora en 2023 del Premio Generación del 27 por su obra El sol y las otras estrellas y de la Crítica en 2018 por Matria (Visor). En lo que la mayoría de ellas coinciden es en ese primer rasgo: el eclecticismo. “No tenemos, en mi opinión, una definición clara y única”, asegura Lanseros. “Pertenecemos a tiempos en los que impera el eclecticismo en la poesía y el resto de las artes, tanto para abordar temáticas como estéticas”, añade.

    Coincide en su diagnóstico con María Gómez Lara (Bogotá, 34 años), ganadora en 2015 del Premio Loewe Joven por Contratono (Visor): “Nos une una pluralidad de voces. Me alegra que esta foto contenga a tantas mujeres escribiendo de maneras distintas”, dice la autora colombiana. Lo mismo que Ángela Segovia (Las Navas del Marqués, Ávila, 37 años), ganadora del Premio Nacional Miguel Hernández de Poesía Joven de 2019 por La curva se volvió barricada (editado en La uña rota): “Todas somos muy distintas y eso es maravilloso, porque muestra una riqueza que me parece presente en la poesía en español de nuestro tiempo”.

    En la misma dirección apunta Elena Medel (Córdoba, 38 años), ganadora también del Loewe Joven en 2014 por Chatterton y alejada del género como escritora desde hace una década, aunque no como editora, con su labor al frente del sello La bella Varsovia. “Si algo define la poesía en español en este siglo es la diversidad, con voces de referencia y relevancia en estéticas muy diferentes”, afirma.

    No quisiera Medel aplicar perspectiva de género a la generación que pertenece. “Creo por encima de todo que la escritura es un diálogo. ¿Qué nos define? Todas las que estamos aquí somos mujeres que escriben poesía. Pero nada más. Por fortuna no existe el estereotipo de la poeta. Como editora, es decir, como lectora, además, creo que no existe un rasgo único. Pero, por favor, que no se nos acote en el cliché: temas de mujeres. Las circunstancias influyen en la escritura, pero no la determinan ni la definen. No la limitan”.

    “En España se ha avanzado mucho para que las poetas formen parte del canon”, subraya Ana Merino

    Medel insiste en la transversalidad. No solo masculina y femenina. No solo espacial, también temporal a la hora de buscar vínculos con figuras del pasado. Pero puntualiza que si algo ha definido la escritura de las mujeres ha sido la dificultad a la hora de mantener una carrera. Si miramos atrás, a quienes formaron parte de la Generación del 50, muchas de ellas obtuvieron premios por sus primeros libros, reseñas entusiastas y cánticos de futuros prometedores. “Pero luego sus carreras se detuvieron y la mayoría desapareció. En el caso de muchas de ellas por la maternidad. Es curioso, pero me lo pregunto mucho: qué ocurre con los terceros, cuartos, quintos libros. ¿Qué ocurre cuando deja de ser novedad y cumple años?”.

    Para eso ha sido necesario compensar, tal como sostienen Ana Merino y Raquel Lanseros en el prólogo de su antología femenina de referencia sobre el siglo XX, titulada Poesía soy yo (Visor, 2016). “La mirada de la compensación fue una expresión acuñada en Estados Unidos durante el último cuarto del siglo XX”, señala Lanseros. “Busca ampliar voces, se entiende como suma y extensión que enriquece”, afirma Merino. “Es importante tener un sentido de la responsabilidad que se comprometa con la búsqueda y recuperación de voces que quedaron olvidadas en el pasado”, agrega la ganadora del Premio Adonais en 1994 por Preparativos para un viaje.

    A ello alude Medel, también, con varias preguntas sobre el presente: “¿Cuántas mujeres escriben crítica de poesía en los principales suplementos? ¿Cuántas editamos —y hablo como editora, no autora— desde sellos con buena distribución? ¿Cuántas programan ciclos y festivales…?”, inquiere la escritora andaluza.

    De izquierda a derecha, María Gómez Lara, Ángela Segovia y Berta García Faet.
    De izquierda a derecha, María Gómez Lara, Ángela Segovia y Berta García Faet.XIMENA Y SERGIO

    Sin embargo, la situación, en ese aspecto y en los años recientes, ha mejorado, cree Merino. “Con un gran compromiso y una mirada poliédrica. En España se ha avanzado muchísimo para que las poetas, hoy, formen parte del canon o lo que se entendía como el espacio de gran representación cultural”. Pero falta para llegar donde a Raquel Lanseros le gustaría: “Yo confío en que la igualdad plena de reconocimiento esté muy próxima”, asegura.

    Por ser justos y ampliar campos y poéticas, en la reunión faltaban nombres, como los de la última ganadora del Premio Nacional por Materia (Visor), Yolanda Castaño, Olga Novo, Luisa Castro, Aurora Luque, Luna Miguel, Azahara Alonso, Miriam Reyes, Esther Ramón, Violeta Medina, Ana Gorría, Ana Vidal Egea, Marifé Santiago Bolaños, entre otras… Pero no serían nada sin el vínculo global que une al idioma con América. Nada sin el presente magistral que ejercen la colombiana Piedad Bonnett, la uruguaya Cristina Peri Rossi, la dominicana Soledad Álvarez o la nicaragüense hoy exiliada en España Gioconda Belli…

    Nada, tampoco, sin una visión ambiciosa del panhispanismo en el siglo XXI. Ese lazo, precisamente en poesía, se refuerza por una base común fundamental que apunta la colombiana María Gómez Lara, residente ahora en Madrid: “Tenemos la suerte de leer en lengua original a muchas autoras de países distintos. Pero siempre podemos leernos más. Vivimos en un mundo mucho más conectado. Es fundamental no olvidar el contexto y las diferencias históricas al momento de enfrentarnos a los textos. Entender la diferencia es una forma de acercarnos”.

    “Nos hemos formado con mentalidad panhispánica”, asegura Ana Merino (Madrid, 52 años). “No podríamos pensar en el modernismo español sin la figura de Rubén Darío”, apunta. Ni más atrás, prescindiendo del Inca Garcilaso de la Vega o Sor Juana Inés de la Cruz. Y si a la Generación del 27 la hubiéramos dotado de esa fundamental seña de identidad, crecería a nuestros ojos con los nombres de Pablo Neruda, Vicente Huidobro, César Vallejo, Jorge Luis Borges y ya, más adelante, con el genio de Octavio Paz. Lo mismo que el siglo XX resulta inconcebible sin la influencia de la chilena Gabriela Mistral, premio Nobel en 1945, la cubana Dulce María Loynaz, la argentina Alfonsina Storni o más tarde, a partir de la segunda mitad del XX, por parte de figuras únicas, singulares, como la argentina Alejandra Pizarnik.

    Todos estos nombres no hubieran quedado clavados en la Historia sin otro atributo común que tienen las poetas de hoy y que destaca Ángela Segovia: “La valentía de cada una en su poética y a la hora de defender su propuesta. Todas son escritoras de carácter, han apostado por sus voces y las han llevado lejos”, afirma. Lo mismo cree Ada Salas (Cáceres, 58 años). Quien fuera ganadora del Premio Hiperión en 1994 por su obra Variaciones en blanco, anda inmersa en una consagrada madurez, palabra con truco: “Puede sonar a boutade, esto. La madurez se alcanza cuando una deja de pensar en si ha llegado a la misma. Justo cuando empiezas a dudar de verdad de si lo que escribes vale la pena”. Lo que no duda la extremeña es de la valía de sus compañeras. “La calidad de los libros es lo que las define y responde a un alto nivel de autoexigencia. Cuando pienso en autores coetáneos a los que admiro, los primeros nombres que me vienen a la cabeza son de mujeres”.

    “Compartimos voluntad de aventura y un diálogo con nuestros predecesores”, asegura Berta García Faet

    En eso y en la búsqueda constante de riesgos está de acuerdo Berta García Faet (Valencia, 36 años), también Premio Nacional de Poesía Joven Miguel Hernández en 2018 por Los salmos fosforitos (La bella Varsovia). “En todas nosotras hay voluntad de aventura y de estilo. También diálogo con quienes nos preceden y con quienes coexistimos literaria y vitalmente hablando. En todas nosotras lo personal es político y lo imaginativo es real. Nuestras afinidades se dan por el grado de complicidad entre nuestras pulsiones, las pasiones lectoras y la manera que tenemos de estar vivas aquí y ahora”, afirma.

    En un presente que para Julieta Valero (Madrid, 52 años) ha arrasado muchas convenciones y prejuicios. “Nuestra escritura sucede desacomplejadamente desde la identidad de mujer, epistemológica, corporal, sexual. Lo que significa serlo en este tiempo histórico”, afirma la poeta madrileña, ganadora del Premio Ausiàs March en 2010. “En este sentido, somos deudoras de la genealogía de mujeres poetas que escribieron desde una flagrante lateralidad, cuando no desde la resistencia al borrado sistemático. También somos conscientes de que tenemos la responsabilidad de incorporar la riqueza, las reivindicaciones y los debates de la lucha feminista en nuestro trabajo”.

    Otra diferencia que además afecta a estas poetas, según Valero, es el cambio al paradigma digital. “Internet es un hallazgo, una incuestionable evolución, y sin duda ha reducido el encapsulamiento de la poesía en grupos de poder o meramente en azares diversos a la hora de conectar poéticas entre el allá y el acá”, afirma. Pero tiene su cara oculta, avisa: “Su uso perverso. Deformidades complejas y peligrosas, como la pantallización de la realidad. La sobreexposición del yo y la identificación de la poesía de ínfima calidad con muchos seguidores, pero, al fin y al cabo, una poesía escolar hecha por adultos”.

    De izquierda a derecha, Lara Moreno, Julieta Valero y Ada Salas.
    De izquierda a derecha, Lara Moreno, Julieta Valero y Ada Salas.XIMENA Y SERGIO

    La encrucijada en este sentido cobra importancia colectiva, observa Valero. “En la construcción de un nosotros que viene de las afinidades electivas y afectivas. En la conciencia de que, o somos desde lo plural solidario o no seguiremos siendo”. Esa búsqueda la realiza quien se considera poeta con una radical conciencia de lenguaje. “Y de sus límites”, añade Valero. “En relación con esa alianza vital, percibo la poesía actual escrita por mujeres como una poesía menos retórica, muy desacralizada”.

    Coincide con ella en muchos aspectos Lara Moreno (Sevilla, 45 años). “Algo que nos atraviesa, en mayor o menor medida, es la conciencia del yo, de la identidad, de nuestro lugar como mujeres y como cuerpos en el mundo cotidiano e íntimo, pero también en el mundo social y político”, asegura la autora, que tiene reunida su poesía en el volumen Tempestad en víspera de viernes (Lumen).

    Todo eso subyace en una forma a menudo común, dice Moreno: “En una manera expresiva, directa, seca a veces, más descarnada o quizá fluida, despreocupada, natural; una manera en la que el poema parece ser un medio para decir, y no un fin; en la que el lenguaje se afila con una desnudez y una rotundidad más prosaica, más oral o narrativa”, sostiene. “Atesoramos una conciencia diferente del poema. El de un lugar que nos representa, más que un artificio que refleje nuestra poética”.

    Los múltiples caminos que en sí y en común atesoran las creadoras de lenguaje en este cruce del siglo XXI, todo ese sano eclecticismo y las características propias y dispares que ellas representan, anda también personificado en las voces masculinas que paralelamente las acompañan.

    Buena parte pasarán a la historia en letras mayúsculas. Como herederos de la línea que se formó en el 27, quedó traumatizada con la guerra y el exilio y mantuvo alta la exigencia con la Generación del 50 y los todavía supervivientes como Antonio Gamoneda en España e Ida Vitale en Uruguay. Todos sus hijos en el ámbito de la poesía en español, los hoy muy activos de la corriente de la experiencia liderada por Luis García Montero, Felipe Benítez Reyes o Benjamín Prado; otros como Antonio Colinas y Juan Carlos Mestre. Y, sobre todo, los que iniciaron el camino del pluralismo radical de la mano de estas voces, muchas de ellas antologadas en el volumen La lógica de Orfeo (Visor) por Luis Antonio de Villena; como Antonio Lucas, Lorenzo Oliván, Carlos Pardo, Mariano Peyroux, Carlos Marzal, Javier Rodríguez Marcos, Andrés Neuman, Manuel Vilas, Juan Antonio González Fuentes, Martín López Vega, Alberto Conejero, Marcos Díez o Luis Muñoz, conviven en el mismo universo… Todos ellos, todas ellas, muestran la brillante vigencia, la extraordinaria salud de la poesía en español y marcan, así mismo, el futuro.

    Lecturas

    Matria, Raquel Lanseros. Visor, 2019. 86 páginas, 12 euros.

    Contratono, María Gómez Lara. Visor, 2015. 80 páginas, 12 euros.

    La curva se volvió barricada, Ángela Segovia. La uña rota, 2016. 80 páginas, 12 euros.

    Chatterton, Elena Medel. Editorial, 2014. 50 páginas, 12 euros.

    Poesía soy yo, Raquel Lanseros y Ana Merino (editoras). Visor, 2016. 978 páginas, 22 euros.

    Preparativos para un viaje, Ana Merino. Reino de Cordelia, 2013. 112 páginas, 8,95 euros.

    Arqueologías, Ada Salas. Pre-textos, 2022. 100 páginas, 18 euros.

    Los salmos fosforitos, Berta García Faet. La bella Varsovia, 2017. 188 páginas, 13,90 euros.

    Mitad, Julieta Valero. Vaso roto, 2021. 122 páginas, 20 euros.

    Tempestad en víspera de viernes, Lara Moreno. Lumen, 2020. 176 páginas, 15,90 euros.

  • Recuperación del trabajo femenino se concentra en mujeres jóvenes y con más educación

    Recuperación del trabajo femenino se concentra en mujeres jóvenes y con más educación

    Al tremendo desempleo que sufrieron millones de mujeres en América Latina en la pandemia le siguió un restablecimiento desigual, pues la recuperación del empleo femenino se observa “con particular fuerza” entre las jóvenes y de ellas, las de mayor nivel educativo.

    La Organización Internacional del Trabajo (OIT) publicó recientemente el informe Panorama Laboral 2023 América Latina y el Caribe, un reporte anual que este año cumple tres décadas. En esta edición da buenas noticias, pero también informa sobre el lado B de esas mismas revelaciones.

    Según la investigación de la OIT, en las primeras olas de la pandemia de covid-19, la tasa de desempleo de las mujeres en la región aumentó 27.5%, mientras que la tasa de desocupación masculina empeoró 26.3 por ciento.

    Tres años después, las mujeres están recuperando sus empleos a mejor ritmo que los hombres, pues entre el segundo trimestre de 2020 y el segundo trimestre de 2023 la tasa de ocupación femenina creció 23% y la de los hombres, 17 por ciento.

    Sin embargo, antes de la pandemia la población de mujeres con trabajo remunerado era mucho menor a la de los hombres. En 2019, el 69.2% de los varones tenía empleo y apenas el 45.8% de las mujeres estaba en la misma condición.

    Luego, más mujeres que hombres se quedaron sin trabajo al comenzar la crisis por la pandemia. Por lo tanto, la recuperación que están reportando ellas no es suficiente, pues en 2023 “la tasa de ocupación masculina es alrededor de 48% más alta que la femenina”, señala el organismo.

    En México, al inicio de 2020, cuando todavía no comenzaba el confinamiento y el cierre de establecimientos por la covid-19, el 43% de las mujeres y el 74% de los hombres tenían un trabajo remunerado, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).

    Para el tercer trimestre de ese mismo año, sólo el 38% de las mujeres y el 69% de los hombres pudieron conservar su empleo o seguir laborando en la actividad que les genera ingresos.

    A tres años de esa crisis, en el tercer trimestre de 2023 la recuperación de la ocupación femenina ha sido notoria, pues la tasa de 45% de mujeres con empleo es mayor a la que se tenía a inicios de 2020 y se encuentra en niveles históricos. Los hombres también volvieron a sus empleos y recobraron el mismo nivel de 74% de ocupación.

    Mujeres mayores con menores tasas de empleo

    Al analizar quiénes son las mujeres que han logrado volver al trabajo o entrar al mercado laboral en América Latina, la OIT señala desigualdades de edad, clase y formación educativa.

    Entre las mujeres, el grupo de las más jóvenes (de 15 a 24 años) son quienes muestran la mayor recuperación en los niveles de ocupación, del orden del 7% entre el segundo trimestre de 2019 y el segundo trimestre de 2023. Las trabajadoras de más de 25 años en la región tuvieron, en promedio, una recuperación de 0%, según la OIT.

    De manera general, entre hombres y mujeres, el Panorama Laboral de la OIT indica que desde mediados de 2020 “los jóvenes regresaron al empleo de manera más rápida que los adultos. La tasa de ocupación regional de las personas jóvenes en el segundo trimestre de 2023 era 3.4% (1.3 puntos porcentuales) superior a la de igual período de 2019 mientras que la de los adultos resultaba similar”.

    Esto ha provocado que la brecha de ocupación entre ambos grupos etarios sea inferior en 2023 respecto de cuatro años antes. Sin embargo, a lo que hay que poner atención, recomienda la OIT es que los empleos de las personas jóvenes suelen tener salarios más bajos y carecer de seguridad social.

    La brecha educativa

    “El nivel educativo ha sido otra dimensión de gran relevancia en la dinámica laboral desde el inicio de la pandemia”, apunta el organismo en el reporte. La correlación negativa entre el bajo nivel educativo y la brecha de ocupación es evidente, tanto entre los hombres como entre las mujeres, pero “esta asociación es más fuerte entre ellas”.

    En el segundo trimestre de 2023 las mujeres de menor nivel educativo en América Latina continuaban “significativamente más alejadas del nivel de empleo de igual trimestre en 2019 (-8%) en comparación con cualquier otro grupo de ocupados”.

    Por ejemplo, la brecha de ocupación entre los hombres de nivel educativo bajo era la mitad de la registrada entre ellas, 4 por ciento. “En el otro extremo, la tasa de ocupación de los hombres y mujeres de niveles altos de educación han superado (levemente) los valores observados cuatro años atrás”.

    A 30 años de presentar continuamente este informe, la OIT apunta que la tasa de participación laboral de mujeres de 15 años o más en América Latina y el Caribe aumentó en casi 12 puntos porcentuales, al pasar de 41.3% a principios de los noventa al 53.9% en promedio en 2022.

    Sin embargo, subraya que “aún persisten grandes desafíos con relación a la igualdad de género sobre los cuales la región necesita seguir trabajando”.

  • Más mujeres, el reto de la música urbana mexicana para 2024

    Más mujeres, el reto de la música urbana mexicana para 2024

    La escena de la música en español enfrenta este 2024 un reto significativo: La incorporación de las mujeres en el género emergente urbano mexicano, según dijeron a EFE artistas, empresarios y ejecutivos de esa industria.

    Es una tarea pendiente que se enmarca en la urgente necesidad de abrir más espacios para las artistas femeninas en general, agregaron.

    Aunque 2023 vio un incremento en la premiación y las reproducciones por las plataformas de internet de la música hecha por mujeres, la mayoría las generaron un pequeño grupo: Shakira, Karol G, Rosalía, Natalia Lafourcade, Becky G y la eternamente exitosa Selena Quintanilla (1971-1995).

    “Nuestra música no podrá competir a nivel mundial realmente hasta que no haya una buena representación de mujeres”, dijo a EFE el empresario musical Jimmy Humilde, considerado el principal mecenas del regional urbano mexicano.

    Humilde explicó que, en Rancho Humilde, su empresa discográfica, impulsa a mujeres en géneros como los corridos tumbados y otras fusiones del regional mexicano con sonidos del urbano latino y anglo.

    “Nos estamos enfocando en las mujeres que están haciendo nuestra música”, manifestó.

    “El día en que la mujer entre a este estilo nuevo de música mexicana es cuando este movimiento se va a otro nivel”, afirmó Humilde, quien lanzó a pioneros del género como Natanael Cano y Junior H.

    “Por eso estamos buscando a esa gran mujer que llegue aquí y abra las puertas para todo el mundo”, indicó.

    Una de las candidatas para liderar el lado femenino del urbano mexicano es Ivonne Galaz, la primera mujer en cantar profesionalmente corridos tumbados.

    Galaz ha dicho a medios especializados que antes de su vinculación a Rancho Humilde no había ninguna mujer cantando tumbados.

    La mexicana se acerca ya a los 50,000 suscriptores en Spotify y en julio pasado lanzó su segundo disco, ‘Júpiter’ con siete canciones inéditas.

    Tanto ella como Tania Domínguez, otra artista urbana mexicana que lanzó su primer álbum a finales de 2023, consideran que su modelo es la fallecida artista mexicano-estadounidense Jenni Rivera (1969-2012).

    Rivera abrió un boquete para las mujeres en la música regional mexicana, específicamente en el género de la banda, entre finales de la década de 1990 y principios del nuevo siglo.

    Otras exponentes femeninas del mexicano urbano son Natalie López, el grupo Conexión Divina, y el trío Yahritza y su esencia, encabezado por Yahritza Martínez en compañía de sus hermanos.

    Entre la música latina, el género que más creció en 2023 fue justamente el mexicano.

    Más mujeres: el reto de la música urbana mexicana para 2024

    Según la firma de mediciones Luminate, en el primer semestre del año, el consumo general de música regional mexicana aumentó un 42.1%, superando a todos los demás, excepto el coreano K-pop.

    Artistas globales como Bad Bunny y Shakira hicieron temas dentro del regional mexicano con colaboraciones con bandas sierreñas y norteñas. Además de 35 canciones regionales mexicanas ingresaron al ‘Hot 100 de Billboard’, lideradas por el éxito de Eslabón Armado y Peso Pluma ‘Ella baila sola’, que también hizo historia cuando ingresó a los cinco primeros éxitos de esa lista.

    “Vimos crecer la música mexicana porque los artistas empezaron a colaborar”, consideró María Inés Sánchez, vicepresidenta de operaciones de la costa oeste estadounidense de Sony Music Latin. Es una lección que le aprendieron a la música urbana latina.

    El siguiente paso sería que aumentaran las colaboraciones con las mujeres ya que se están abriendo camino en el urbano mexicano.

    Humilde ya lleva ventaja en eso.

    Galaz ya tiene dos canciones con Natanael Cano, el artista más exitoso de Rancho Humilde. Se trata de ‘Golpes de la vida’ y ‘El mágico’.

    La canción más exitosa de Yahritza y su esencia es ‘Frágil’, una colaboración con Grupo Frontera, que supera los 362.000 millones de escuchas en Spotify.

    La artista mexicano-estadounidense Becky G también vio la misma ruta cuando se decidió por diferentes estilos del regional mexicano, incluyendo los tumbados, en su disco de 2023 ‘Esquinas’. Sus producciones anteriores habían estado más por el lado del pop y el reguetón. Una de las canciones más exitosas del álbum es ‘Chanel’, una colaboración con Peso Pluma.

    Para Humilde, el mapa ya está hecho, “solo hay que adaptarlo a lo nuestro y seguirlo”, afirmó. Es lo mismo que se planteó cuando decidió apoyar a los artistas del urbano mexicano y “no me ha salido mal”, manifestó.

    Con información de EFE.

  • Mónica Ortiz, astronauta de Oaxaca, comandará Misión Latinoamericana de Investigación Análoga de Marte

    Mónica Ortiz, astronauta de Oaxaca, comandará Misión Latinoamericana de Investigación Análoga de Marte

    La oaxaqueña Mónica Ortiz Álvarez, fue seleccionada como comandante (tripulante análoga) en la Primera Misión Latinoamericana de Investigación Análoga de Marte en España, por Astroland Interplanetary Agency, en Santander – España.

    «Agradezco inmensamente el honor de compartir crew a Sagrario Linares Melo Ingrid Marian, Lia Seguel Alvarado Rivaldo Duran, quienes más que amigos somos una gran familia en FAU Youth , todos tenemos grandes cualidades y el compartir esto representando a nuestros países lo hace aún más especial», escribió la oaxaqueña compartió la noticia en redes sociales.

    Asimismo, precisó que el objetivo de la misión “Principia” es fomentar la participación de las mujeres en áreas STEM, al tiempo, visibilizar la tecnología espacial en las nuevas generaciones , a nivel internacional.

    Además de investigaciones científicas, aseguró «impulsamos la inclusión de la juventud latina en el desarrollo del sector espacial español».

    Añadió que el proyecto puede impulsar el sector STEM en México y en todo Latinoamérica, al poder resolver diversas problemáticas que podrían tener las futuras colonizaciones al realizar estudios en un hábitat completamente inmersivo de simulación de la superficie de Marte, generando así la cooperación entre diversos tipos de ciencias.

    «Este proyecto nos ayudará a crear consciencia de la importancia y la preservación de nuestro planeta en el estudio de las ciencias espaciales», agregó en su mensaje.

    La misión se realizará en el mes de julio del presente año. Ortiz Álvarez es actualmente Presidenta del capítulo Juvenil de la Fundación Acercándote al Universo.

  • ¿Sufres discriminación laboral por embarazo? Aquí te pueden apoyar.

    ¿Sufres discriminación laboral por embarazo? Aquí te pueden apoyar.

    Algunos datos relevantes:

    – En México, 2.2 millones de personas están ocupadas en el trabajo doméstico no remunerado, 90% son mujeres.

    – La participación económica de las mujeres en México es del 45% comparada con el 77% de los hombres, una de las cifras más bajas de América Latina.

    – De acuerdo con el CONEVAL (Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social), el 52% de la población que vive en situación de pobreza, son mujeres.

    – 25% de las mujeres de 15 años y más que no estudian exclusivamente, no cuentan con ingresos propios, en comparación con el 5.8% de los hombres.

    – De acuerdo con la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), la brecha salarial entre hombres y mujeres en 2020 fue de 9.6%

    – Las mujeres en México dedican 3 veces más de tiempo al trabajo del hogar y de cuidados, asumiendo 30.8 horas semanales de trabajo no remunerado, mientras los hombres realizan 11.6 horas.

    ¿Cómo se puede atender?

    ONU Mujeres y el Pacto Mundial de las Naciones Unidas publicaron los ‘Principios para el empoderamiento de las mujeres’ que ofrecen al sector privado algunas prácticas y políticas sobre cómo empoderar a las mujeres en el lugar de trabajo.

    Los principios propuestos son:

    1. Promover la igualdad de género al más alto nivel de dirección;

    2. Tratar a hombres y mujeres de forma igualitaria en el trabajo;

    3. Respetar y defender los derechos humanos y la no discriminación;

    4. Velar por la salud, la seguridad y el bienestar de los trabajadores y trabajadoras;

    5. Promover la educación, la formación y el desarrollo profesional de las mujeres;

    6. Llevar a cabo prácticas de desarrollo empresarial, cadena de suministro y mercadotecnia a favor del empoderamiento de las mujeres.

    7. Evaluar y difundir los progresos realizados a favor de la igualdad de género.

    Los Principios formulados por ONU Mujeres, son una guía útil para las empresas privadas y el gobierno. Es decir, son objetivos en el fortalecimiento de las capacidades de la mujer para empoderarse económicamente. Una de estas líneas de trabajo, ha de incluir el ofrecimiento, sobre todo con recursos públicos, de créditos a la palabra a mujeres emprendedoras, así como capacitación para negocios.

    Marco legislativo relacionado

    En materia de autonomía y empoderamiento económico de las mujeres, a nivel internacional México ha firmado convenios internacionales como la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), convenios vinculados con la igualdad de género con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), tales como:

    – Convenio sobre Igualdad de Remuneración (1952)

    – Convenio sobre la Discriminación (1961)

    – Convenio sobre los Trabajadores con Responsabilidad (1981)

    – Convenio sobre la Protección de la Maternidad (2000)

    – Convenio sobre las Trabajadoras y los Trabajadores Domésticos (2011)

    – Convenio sobre la Eliminación de la Violencia y el Acoso en el Mundo del Trabajo (2019)

    A nivel nacional, la legislación en la materia comprende:

    – Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (Art. 1, 4, 123)

    – Ley Federal del Trabajo (Art. 2, 5, 56, 86, 126, 132, 133, 164, 541, 995)

    – Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación (Art. 15Bis)

    – Ley General para la igualdad entre Mujeres y Hombres (Art. 17, VIII)

    – Ley del Seguro Social

    El marco legislativo tanto nacional como internacional, apunta a garantizar los derechos de las mujeres en cuanto a salarios iguales para el mismo trabajo entre hombre y mujeres, derechos de las mujeres embarazadas, medidas para asegurar la corresponsabilidad y la vida personal y familiar de las mujeres y hombres, la protección de las mujeres frente al despido, etc.

    Sitios a donde acudir.

    El Gobierno de la República ofrece algunas oportunidades de financiamiento, capacitación y asesoría para micronegocios:

    Programas del Gobierno Federal

    – Programa Tandas para el Bienestar: El Programa de Microcréditos para el Bienestar, mejor conocido como Tandas para el
    Bienestar, tiene la finalidad de impulsar el desarrollo económico de las familias y comunidades a través de la consolidación de los negocios y mejorar las condiciones de vida de las personas desde una perspectiva de género e inclusión social.

    https://www.gob.mx/bienestar/tandas?tab=ProgramaTandas#objetivo

    En la Ciudad de México.

    – El Fondo para el Desarrollo Social (FONDESO) ofrece una diversidad de créditos, entre ellos, Microcréditos para Mujeres Emprendedoras, Microcréditos para Actividades Productivas de Autoempleo, Financiamiento para Mujeres Empresarias, Financiamiento para el Autoempleo en Zonas de Alta y muy alta Marginación. Consulte el portal de internet para más información.

    https://www.fondeso.cdmx.gob.mx/programas

    – Cursos de Educación para la Autonomía Económica Pilares

    https://pilares.cdmx.gob.mx/autonomia

    En las entidades federativas

    En cada entidad federativa, las Secretarías de Economía y las Secretarías de Desarrollo Social locales cuentan con programas de apoyo y financiamiento para mujeres emprendedoras.

    Consulte su página de internet para más información.

    Talleres de empoderamiento social y económico para apoyar a las mujeres a salir del círculo de violencia

    Directorio de Centros de Justicia para las Mujeres en las entidades federativas.

    https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/715487/Directorio_P_blico_25.01.23.pdf

    En caso de vivir discriminación laboral:

    En CDMX se puede acudir al Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México, COPRED

    https://www.copred.cdmx.gob.mx/

    A nivel nacional, existe el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, CONAPRED

    http://www.conapred.org.mx/

  • Las conquistas de las mujeres por sus derechos en 2023

    Las conquistas de las mujeres por sus derechos en 2023

    Para que una mujer ocupe por primera vez un cargo político, reciba un galardón que tradicionalmente sólo recibían hombres o se cuelgue una medalla de manera histórica ha sido necesaria la lucha incansable de millones de mujeres en México y el mundo.

    Cada año realizo un recuento de las conquistas de las mujeres y del feminismo —en su pluralidad— que hacen del mundo un lugar un poco más justo cada vez. Este 2023 pongo el foco en lo ocurrido en México en materia de género. Estas son algunas de las conquistas.

    Derechos reproductivos para todas

    El aborto es un derecho humano. La mayoría de las mujeres europeas han avanzado en esa batalla, en América Latina las mujeres se mantienen en la pelea. En 2023 México dio un paso histórico en materia de derechos reproductivos.

    La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el máximo tribunal, despenalizó el aborto en México. En septiembre se resolvió que es inconstitucional penalizar a las mujeres y el personal médico que realice abortos hasta la semana 12 de gestación. Este fallo implica que ninguna mujer o persona con capacidad gestante podrá ser penalizada judicialmente por interrumpir voluntariamente su embarazo.

    Aguascalientes legalizó el aborto a través de modificaciones a su Código Penal. Sumándose a la lista de las 12 entidades mexicanas en donde el aborto no sólo no puede penalizarse, sino que se garantiza en instituciones públicas para que este procedimiento sea universal, seguro y gratuito.

    Mujeres deportistas que hicieron sonar el himno nacional

    El deporte profesional fue un espacio reservado para los hombres durante mucho tiempo. En las competencias internacionales más importantes, como los mundiales de futbol o los Juegos Olímpicos, las mujeres tuvieron que esperar años para poder participar. Y aunque ya tienen lugar, las mujeres todavía ganan menos que sus pares hombres y enfrentan más obstáculos para desarrollarse como atletas: acoso, hostigamiento o violencia sexual.

    Pese a todas las barreras, las deportistas mexicanas le dieron a México algunas medallas y otras hicieron sonar el himno nacional mexicano.

    De manera histórica el equipo de natación artística de México se colgó una medalla de oro en los Juegos Panamericanos 2023. Con este resultado el equipo integrado por Nuria Diosdado, Joana Jiménez, Regina Alférez, Jessica Sobrino, Glenda Inzunza, Samanta Rodríguez, Daniela Estrada, Pamela Toscano, Itzamary González y Fernanda Arellano también logró llevar a México a los Juegos Olímpicos de París 2024.

    México no calificaba para esta categoría desde hace 28 años. Esta selección también se colgó una presea dorada en el Mundial de Natación 2023.

    Alexa Moreno, una de las mejores atletas de México, volvió a sobresalir en la Copa del Mundo de Gimnasia este 2023. Alexa Moreno se colgó la medalla de oro en la prueba de salto, venciendo a la australiana Georgia Godwin y haciendo retumbar el himno nacional en la Accor Arena de París, Francia.

    En esa misma competencia, Alexa Moreno también se llevó el bronce en la rutina de piso. Alexa tiene 29 años y nació en Mexicali, Baja California. En 2023, logró preseas en el Campeonato Panamericano de Gimnasia y en los Juegos Centroamericanos y del Caribe. Consiguió también su pase a los Juegos Olímpicos de París 2024. Los expertos han bautizado a Alexa Moreno como la mejor gimnasta que ha tenido México.

    En otra disciplina, Alexa Grasso se convirtió en la primera mujer mexicana campeona de la UFC (Ultimate Fighting Championship). El logro lo consiguió en la categoría de Peso Mosca (125 libras) al derrotar a la ahora excampeona Valentina Shevchenko, de Kirguistán. Alexa Grasso tiene 29 años y nació en Guadalajara, Jalisco.

    En los Panamericanos 2023 las mujeres le dieron a México 67 medallas. Si sólo se consideran las preseas de rama femenil, México se ubica en el tercer lugar de países con más preseas, sólo por debajo de Estados Unidos y Brasil.

    Mujeres en posiciones de poder

    Tener más mujeres en la política, los congresos, en los tribunales, en la dirección de empresas y al frente de los movimientos civiles es fundamental para desarrollar espacios igualitarios, justos y seguros.

  • Las mujeres zapatistas y su impacto en México; 30 años de Revolución

    Las mujeres zapatistas y su impacto en México; 30 años de Revolución

    En las profundidades de la selva de Chiapas, un movimiento revolucionario ha estado gestando cambios significativos durante tres décadas. Las Mujeres Zapatistas, un grupo vital en el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), han redefinido la lucha por los derechos de las mujeres indígenas y la justicia social en México. Esta nota examina su viaje, impacto y legado.

    Orígenes del Movimiento y la Ley Revolucionaria de Mujeres

    En vísperas del levantamiento zapatista de 1993, se promulgó una pieza clave de legislación: la Ley Revolucionaria de Mujeres. Este documento no solo subrayó los derechos de las mujeres dentro del movimiento, sino que también estableció un precedente para la lucha por la igualdad de género y la justicia en el contexto más amplio de México.

    Las Mujeres Zapatistas no solo se unieron a las filas insurgentes, sino que desempeñaron roles de liderazgo, redefiniendo la participación femenina en movimientos guerrilleros. Márgara Millán, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, destaca cómo su enfoque integró la lucha antipatriarcal, antirracista y anticapitalista.

    Impacto Político: El Ascenso de «Marichuy»

    El nombramiento de María de Jesús Patricio Martínez, «Marichuy», como vocera del Consejo Indígena de Gobierno en 2017, marcó un hito en la representación política femenina en México, evidenciando la creciente influencia de las mujeres zapatistas.

    El Encuentro Internacional de Mujeres que Luchan El Primer Encuentro Internacional de Mujeres que Luchan, celebrado en 2018, fue un evento clave que demostró la capacidad del movimiento zapatista para conectar y movilizar a mujeres de diversas culturas y países en la lucha común por la igualdad y justicia.

    Descolonización y Despatriarcalización: Un Camino Conjunto

    Las enseñanzas de las mujeres zapatistas van más allá de la lucha armada. Han mostrado cómo la descolonización y la despatriarcalización están intrínsecamente ligadas, ofreciendo un nuevo paradigma para entender y abordar la opresión femenina.

    Desde su rol en el EZLN hasta su influencia en movimientos globales, las mujeres zapatistas de Chiapas han enseñado la dignidad y han propuesto un horizonte de emancipación único, desafiando las estructuras de opresión y abriendo caminos para futuras generaciones.

    Las Mujeres Zapatistas han sido mucho más que participantes en un movimiento guerrillero; han sido arquitectas de un cambio social profundo. Su lucha de 30 años continúa inspirando a mujeres y movimientos en todo el mundo, demostrando que otro mundo es posible.

    Con información de UNAM Global TV.