Autor: Editora

  • “Las mujeres sostenemos el mundo sin pago y sin reconocimiento”

    “Las mujeres sostenemos el mundo sin pago y sin reconocimiento”

    Valentina Zendejas Moreno, feminista, maestra en Políticas Públicas y Género por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) México, y subdirectora en el Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir (ILSB), platica en entrevista sobre el patriarcado y sus consecuencias en la sociedad.

    —¿Qué es lo más urgente de atender en torno de la violencia de género?

    — Tiene que haber un cambio institucional: cómo hacemos para que nuestro sistema de justicia funcione. Hay que modificar la impunidad que existe en el país. Pero por otro lado, y quizá de manera más importante, está la necesidad de hacer un cambio cultural que lleve a los hombres a cuestionarse por qué tienen esta forma de relacionarse tan tóxica y violenta con las mujeres. Sería fundamental que en las escuelas se den clases sobre educación sexual, género, diversidad, derechos humanos… Es decir, cómo hacemos para que los jóvenes crezcan con una mirada diferente, mucho más crítica y menos machista.

    —¿Qué es el patriarcado y cómo afectan estas ideas a la sociedad?

    —Es un sistema que se basa en un grupo de personas que tiene menos oportunidades, posibilidades, espacios de decisión. Y hay otro grupo, por lo general hombres, que han estado tradicionalmente en los espacios de toma de decisión, donde reciben remuneración económica; es decir, han estado en el lado del poder, han organizado el mundo de forma que tienen una posición de poder privilegiada frente a la de las mujeres. Pero todo este mundo se basa en el trabajo no remunerado que hacemos nosotras y que se nos ha dicho que lo hacemos por nuestra personalidad, por amor, pero en realidad las mujeres sostenemos al mundo sin paga y sin reconocimiento. Todo esto que vemos en la política, la ciencia o el arte, que tradicionalmente están ocupados por hombres, no podría funcionar si no estuviera el trabajo no remunerado que hacemos las mujeres.

    Pacto

    Una segunda cuestión, señala Zendejas, “es que a los hombres les cuesta mucho romper el pacto y señalar cuando sus propios colegas tienen actitudes machistas. Y no lo hacen porque existe una condena social entre ellos. El patriarcado justamente pone pruebas a los hombres donde tienen que demostrar su machismo para ser aceptados: tienen que presumir de ser violentos o depredadores sexuales o tener muchísimas mujeres, de no crear vínculos afectivos. Les han enseñado que su valor está en su capacidad de obtener ingresos y que ellos tienen que ser siempre los responsables de la manutención y de los ingresos de una familia. El patriarcado no solo es nocivo para las mujeres: también lo es para los hombres”.

    —¿Cómo avanzan las mujeres hacia una sociedad más igualitaria?

    —Todos los derechos que ahora tenemos las mujeres no nos lo regaló nadie: los tenemos gracias a que muchas que nos antecedieron se organizaron, los demandaron y los obtuvieron. Todo esto a costa de que las metieran a la cárcel, las golpearan, las tacharan de locas. Ahora nosotras podemos hacer cosas que nuestras bisabuelas ni siquiera soñaron. Por ejemplo:decidir si te quieres casar o divorciar, tener una propiedad, ir a la escuela, trabajar. Cosas que ahora nos parecen normales antes no lo eran. Entonces, para seguir avanzando, es necesario que las mujeres nos informemos, seamos conscientes de las desigualdades que aún existen y sigamos luchando en colectivo por cambiarlas. Claro que hemos avanzado pero lamentablemente, por ejemplo, vemos que ningún partido político toma en serio la agenda de género.

    Por ello, dice, “me pregunto si la solución es que hagamos un partido feminista que tenga como prioridad la agenda de género, pero también una agenda de desigualdades. Es verdad que hay muchas mujeres en el Congreso que han logrado avances en las Legislaturas por la igualdad de género, pero al interior de sus partidos y cuando estos temas compiten parecen no ser la prioridad. Entonces quizás un partido feminista sea la ruta que debemos seguir en el futuro”.

    Toda la información e imágenes son de VERTIGO POLÍTICO.
    Link original: https://www.vertigopolitico.com/columnas/lo-que-yo-quiero/

  • México, último lugar en igualdad de género laboral en América Latina: ONG

    México, último lugar en igualdad de género laboral en América Latina: ONG

    En el país, las mujeres con mayor preparación acceden a puestos de alto mando todavía con remuneraciones que son 50% menores a las de los hombres, criticaron la Red de Mujeres Sindicalistas y la Red Iberoamericana de Municipios por la Igualdad de Género.

    México ocupa el último lugar en igualdad de género laboral en América Latina; por ejemplo, las mujeres con mayor preparación acceden a puestos de alto mando todavía con remuneraciones que son 50% menores a las de los hombres con posiciones similares, indicó Teresa Inchuástegui, en la presentación del análisis “T-MEC, Reforma Laboral e Igualdad de Género. Apuesta por el adelanto de las trabajadoras” de la Red de Mujeres Sindicalistas y la Fundación Friedrich Ebert.

    La presidenta de la Red Iberoamericana de Municipios por la Igualdad de Género dijo que uno de los temas que más preocupa es la baja participación económica de las mujeres en México, a pesar de que ha multiplicado su escolaridad. Es el país de la OCDE que tiene la más baja participación, e incluso para 2019 ya se encontraba debajo de la tasa de incorporación del resto de América Latina.

    Más allá del renovado acuerdo comercial de libre comercio entre México, EUA y Canadá (T-MEC), nuestro país tiene compromisos, obligaciones constitucionales, legales e internacionales, de hacer avanzar los derechos de las mujeres trabajadoras, para esto, el además permite que las mujeres conozcan las disposiciones legales que en materia de sus derechos contempla el T-MEC y la reforma a la Ley Federal del Trabajo 2019, coincidieron especialistas tras analizar el papel de la mujer en el mercado laboral.

    Aleida Hernández Cervantes, abogada especialista en género y derechos humanos, refirió la importancia de que el T-MEC contemple un capítulo sobre derechos humanos de las mujeres e igualdad de género.

    “Son necesarios mecanismos y un desarrollo de garantías para hacerlos efectivos. Sobre todo, se necesita de un cambio profundo en el orden social de género que está basado en la división sexual del trabajo, la persistente brecha salarial entre mujeres y hombres y la falta de reconocimiento al trabajo del hogar y de cuidados, entre otros factores que requieren ser visibilizados”.

    En su intervención, Alex Covarrubias Valdenebro, investigador del Colegio de Sonora, expuso que el avance en la materia en México es insuficiente, y es solo una respuesta a presiones de actores laborales de EU. Agregó que se debe replantear la pregunta de si existe un nuevo modelo laboral en México, ya que a pesar de que se impulsa una reforma para eliminar la subcontratación, el articulado en materia de utilidades refleja una enorme contradicción con las tendencias internacionales y de organismos como la ONU.

    Tanto Rosario Ortiz como Inés González, de la Red de Mujeres Sindicalistas y de la Fundación Friedrich Ebert Stiftung, destacaron la importancia de este tipo de estudios que muestran los avances en la materia y compilan argumentos legales útiles al servicio de las mujeres.

    Toda la información e imágenes son de EL ECONOMISTA.
    Link original: https://www.eleconomista.com.mx/empresas/Mexico-ocupa-el-ultimo-lugar-en-igualdad-de-genero-laboral-en-America-Latina-20210419-0086.html

  • Inmujeres y Cámara de diputados firman convenio para promover paridad de género

    Inmujeres y Cámara de diputados firman convenio para promover paridad de género

    Este convenio se da en cumplimiento de las obligaciones internacionales ratificadas por el Estado mexicano y para garantizar los derechos de las mujeres en la legislación y políticas públicas.

    El instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) y la Cámara de Diputados firmaron un convenio general de colaboración para promover y dar seguimiento a la paridad de género y el principio de igualdad en los poderes ejecutivo y legislativo.

    Este convenio se da en cumplimiento de las obligaciones internacionales ratificadas por el Estado mexicano y para garantizar los derechos de las mujeres en la legislación y políticas públicas.

    Nadine Gasman, presidenta del Inmujeres, aseguró que para lograrlo es fundamental “un marco normativo libre de las desigualdades que viven las mujeres, un marco que contribuya a la igualdad sustantiva y la eliminación de las violencias que las afectan”.

    https://twitter.com/inmujeres/status/1382365873852284930?s=20

    La firma de este convenio, permitirá a la Cámara de Diputados participar en la implementación del Programa Nacional para la Igualdad entre Mujeres y Hombres (PROIGUALDAD) 2020-2024, y  fortalecer la participación estratégica de ese órgano legislativo como invitado permanente en el Sistema Nacional para la Igualdad entre Mujeres y Hombres (SNIMH), añadió la titular del Inmujeres.

    Este convenio está acompañado de un plan de trabajo para su implementación, con el cual el Inmujeres acompañará en la capacitación y certificación de competencias laborales para incorporar la perspectiva de género en los proyectos legislativos, del mismo modo brindará opiniones técnicas a propuestas de reformas legislativas en materia de igualdad, acceso de las mujeres a una vida libre de violencia, derecho al cuidado, derechos humanos de las mujeres y contribuirá a fortalecer los presupuestos públicos desde la perspectiva de género.

    Por su parte, la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri, destacó que este convenio permite ir más allá de la colaboración interinstitucional existente y fructífera, la cual puede ser potenciada, ya que la primera acción que plantea es la de llevar a cabo lo necesario para fortalecer la ejecución de la política de igualdad plasmada en el PROIGUALDAD.

    La vigencia del convenio, añadió, “nos impone, con carácter de urgencia, la necesidad de crear sinergias institucionales y concretar acuerdos que permitan dar continuidad a la colaboración que hoy formalizamos, con la próxima Legislatura. Esta Legislatura de la paridad apuesta por el fortalecimiento de la Política Nacional de Igualdad”.

    Inmujeres y la Cámara de Diputados refrendaron su compromiso para “articular, fortalecer y concertar acciones que impulsen la participación plena de las mujeres en condiciones de igualdad con los hombres en todas las esferas de la vida”.

    https://www.facebook.com/watch/?v=2932373397020391

    Toda la información e imágenes son de MILENIO.
    Link original: https://www.milenio.com/politica/inmujeres-camara-diputados-firman-convenio-promover-paridad

  • Muy pocas mujeres editan la Wikipedia en español

    Muy pocas mujeres editan la Wikipedia en español

    Con más de 40 millones de artículos en 301 idiomas diferentes, la Wikipedia es uno de los mayores esfuerzos de colaboración humana de la historia. Sin embargo, diferentes estudios han apuntado que existe una brecha de género persistente en lo que respecta a los contenidos y la composición de su comunidad.

    Un equipo de investigadores de la Universitat Oberta Catalunya (UOC) ha analizado esta desigualdad en la Wikipedia en español, la novena más grande, con más de 1.600.000 páginas, y la cuarta según el número de editores registrados, unos 17.000. Uno de los retos ha sido identificar el género de estas personas, ya que en muchos casos optan por no revelarlo en sus perfiles personales de la Wikipedia.

    El porcentaje de editoras activas en la Wikipedia en español es del 7,4 % del total de perfiles existentes, y aumenta al 11,6 % si se consideran los perfiles cuyo género se conoce

    Para averiguarlo, además de recopilar la información divulgada por los propios usuarios, también han creado un método sistemático para obtener este dato a partir de sus nombres y del uso del género gramatical en las descripciones que aparecen en el perfil. Así se ha identificado el género del 49 % de los editores, aunque solo un 38,8 % lo especifica en su página personal.

    Siguiendo este procedimiento, los datos muestran que el porcentaje de editoras activas en la versión en español de la Wikipedia es del 7,4 % del total de perfiles existentes, y aumenta hasta el 11,6 % si solo se consideran los perfiles cuyo género conocemos. Estos resultados se publican en la revista PLOS ONE.

    «Estas diferencias hacen que la Wikipedia en español sea un territorio dominado por hombres y que las mujeres editoras la puedan considerar plausiblemente como un espacio misógino”, señalan los autores, “y, por otra parte, el gran porcentaje de perfiles desconocidos no ayuda mucho a reducir esta percepción, ya que las mujeres perciben que los editores anónimos son más críticos con sus aportaciones».

    Menor tasa de retención entre las editoras

    «Las mujeres editan menos y lo dejan antes, sobre todo durante las primeras semanas, y es en parte por eso por lo que la brecha no se reduce», destacan los autores

    En términos generales, el estudio también ha hallado diferencias en cuanto a las prácticas editoriales, ya que las mujeres tienen una tasa de retención más baja. Este hecho puede explicarse «parcialmente por la menor persistencia de las mujeres editoras, que tienden a dejar la Wikipedia mucho más rápidamente, sobre todo durante las primeras semanas».

    «Las mujeres editan menos y lo dejan antes, y es en parte por eso por lo que la brecha no se reduce», destacan los autores.

    Sin embargo, el análisis de las personas más activas en esta web reveló que, en algunos casos, las diferencias de género desaparecen o incluso se revierten: «Hay un pequeño grupo de mujeres editoras veteranas que superan a los editores masculinos en cuanto a sus prácticas de edición y a su participación en diferentes espacios de la Wikipedia», señala el estudio. Esta realidad podría ayudar a diseñar medidas para visibilizar y aumentar la participación de las mujeres en este espacio.

    Hay un pequeño grupo de mujeres editoras veteranas que superan a los editores masculinos en cuanto a sus prácticas de edición y a su participación en diferentes espacios de la Wikipedia

    El tipo de contribuciones también es un factor diferencial entre hombres y mujeres. El porcentaje de ediciones de las editoras es mayor en páginas que no son artículos, es decir, en los espacios específicos para interactuar con otros participantes, en particular en páginas de discusión, donde se comentan carencias y posibles mejoras de los artículos.

    Estos hallazgos parecen coincidir con estudios anteriores donde se apunta que los hombres a menudo son contribuidores y las mujeres tienden a comportarse más como colaboradoras. No obstante, los investigadores subrayan que «cuando se consideran solo los editores más activos, aunque las mujeres cuentan con un número medio de ediciones más alto en todos los espacios de nombres, las diferencias no son significativas desde el punto de vista estadístico».

    Los investigadores también han comprobado divergencias en cuanto a los intereses de los dos grupos a partir del análisis de las categorías que utiliza Wikipedia para agrupar temáticamente sus artículos. Aunque estas categorías son «demasiado generales», el estudio sugiere que las mujeres están «algo menos» interesadas en editar páginas sobre ciencia y naturaleza.

    Triple de hombres en páginas de contenidos

    En cuanto a páginas de contenido, los hombres siempre superan a las mujeres en una proporción de tres hombres por cada mujer. De hecho, en muchos casos las mujeres no contribuyen o lo hacen significativamente menos, con una excepción: las páginas y wikiproyectos relacionados con la brecha de género.

    Solo se ha encontrado dos grupos de páginas donde las mujeres parecen ser más activas que los hombres, los wikiproyectos de ‘Mujeres’ y ‘Feminismo’, y las relacionadas con cuestiones de géner

    «Solo hemos podido encontrar dos grupos de páginas donde las mujeres parecen ser más activas que los hombres, los wikiproyectos de ‘Mujeres’ y ‘Feminismo’, y otro grupo de páginas relacionadas con cuestiones de género, por lo que parece que las mujeres están más interesadas en contribuir en esta temática», destacan.

    Recomendaciones para mejorar

    Ante esta brecha, los investigadores sugieren diferentes medidas para fomentar la participación de las mujeres. Por un lado, proponen cambios en el funcionamiento de la web, como por ejemplo facilitar la edición, especialmente la gestión de las referencias, para «evitar que se hagan ediciones incompletas o erróneas que seguramente serán borradas».

    También recomiendan mejorar la detección de «malas prácticas abusivas», especialmente por parte de editores veteranos que pueden no ser «del todo imparciales por temas de género, un problema que no es exclusivo contra las mujeres y que también puede estar afectando a otros colectivos minoritarios«, subrayan los autores.

    Apoyar a las editoras durante más tiempo y visibilizar la participación de las más activas son algunas de las medidas a adoptar

    Por otra parte, destacan la importancia de apoyar a las mujeres editoras durante más tiempo después de haber participado en actividades de bienvenida en la Wikipedia como los wikiproyectos o las wikimaratones, donde las editoras se reúnen en un mismo espacio para editar y mejorar un tema o grupo de artículos.

    Visibilizar la participación del grupo de mujeres editoras más activas es otra de las recomendaciones de los investigadores, ya que señalan que «incrementar la conciencia de las experiencias de éxito de las mujeres podría ser un buen punto de partida para animar a otras mujeres a seguir editando y, por tanto, promover el compromiso a largo plazo de las mujeres en la Wikipedia».

    Por último, las conclusiones del trabajo también resaltan la necesidad de investigar las causas por las que las mujeres dejan de editar la Wikipedia y de profundizar en el papel de las wikimaratones para fomentar que más mujeres adopten y mantengan el hábito como editoras a lo largo del tiempo.

    Referencia:

    Minguillón, J; Meneses, J; Aibar, E; Ferran-Ferrer, N; Fàbregues, S. (2021). «Exploring the gender gap in the Spanish Wikipedia: Differences in engagement and editing practices». PLOS ONE, 2021

    Toda la información e imágenes son de AGENCIA SINC.
    Link original: https://www.agenciasinc.es/Noticias/Muy-pocas-mujeres-editan-la-Wikipedia-en-espanol
  • Mujeres enfrentan retos en reactivación económica

    Mujeres enfrentan retos en reactivación económica

    Desde la desigualdad salarial hasta el empoderemiento femenino, estos son algunos retos que enfrentan las mujeres de camino a la reactivación económica.

    De camino a la recuperación económica por la pandemia de COVID-19 las mujeres enfrentan diversos retos como la desigualdad salarial, falta de empoderamiento femenino y sobre todo, un cambio en el contexto de las mujeres, coincidieron expertas.

    Durante el conversatorio “Mujeres, pieza clave para la reactivación económica”, organizado por el Consejo de la Comunicación, las expertas señalaron que existen diversos factores que influyen en la participación de las mujeres dentro del sector económico, por lo que es necesario detectarlos y hacerles frente.

    Fátima Masse, directora de Sociedad Incluyente en el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), recordó que México podría ver crecer su Producto Interno Bruto (PIB); si se sumara a 8.2 millones de mujeres. Lo anterior implicaría una participación económica similar a la que maneja la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).

    “México ha hecho esfuerzos, pero no es un tema que se cambie solo por cuotas; hay que mejorar el entorno para las mujeres en los diferentes ámbitos”, indicó. 

    Sin embargo, la experta recordó que hay algunas barreras que deben combatirse; desde la presencia de roles de género desde la infancia, hasta la vinculación de egresados y la flexibilidad al interior de las empresas.

    Del mismo modo, Rocío Fernández, directora ejecutiva de Core Food Solutions subrayó que las mujeres sin duda se enfrentan a grandes retos, especialmente en temas de desigualdad salarial; créditos y financiamientos; y a una falta de empoderamiento femenino.

    “Es importante que haya una conciencia dentro de las empresas, que haya información, campañas y capacitación para que tengan un ambiente de equidad”, mencionó. 

    Combatir roles de género

    Mientras que, Fernanda Zenizo, CEO de Intelab señaló el tema de los cuidados a los hijos y familiares así como el de educación, pues aseguró que algunos de los problemas de machismo e inequidad, vienen desde la educación.

    “Lo importante es que atendamos los temas de formación en el sentido de equidad desde el hogar hasta el lugar de trabajo”. 

    Además, reiteró que desde la infancia, tanto mujeres y hombres acarrean roles de género, por lo que insistió en la importancia de tanto formar a las mujeres con un rol de proveedoras; y a los hombres para adentrarse más a las labores del hogar.

    Por otro lado, Masse recordó que son las mujeres quienes han sido más afectadas por la pandemia, pues la recesión tuvo un impacto sobre ellas en cuanto a pérdida de empleos.

    Lo anterior debido a que más del 53% de las mujeres están concentradas en el sector de servicios de giro no esencial; ello es un problema, pues las mujeres están en la informalidad.

    Ante ello, Arlenne Muñoz, directora editorial de Grupo Mundo Ejecutivo y moderadora del panel, reiteró la importancia de impulsar a las mujeres emprendedoras, especialmente durante la reactivación económica, pues son quienes han logrado buscar salidas ante el desempleo provocado por la pandemia de COVID-19.

    Toda la información e imágenes son de ENERGÍA HOY.
    Link original: https://energiahoy.com/2021/03/23/mujeres-enfrentan-retos-en-reactivacion-economica/

  • Inseguridad alimentaria golpea más a las mujeres: ‘comen de últimas y menos’

    Inseguridad alimentaria golpea más a las mujeres: ‘comen de últimas y menos’

    La ONU señalo que la crisis agravada por el Covid-19 ha empujado a entre 83 y 132 millones de personas a la desnutrición en el mundo.

    La inseguridad alimentaria en el mundo, agravada por la pandemia del Covid-19, ha golpeado con más virulencia a las mujeres y a las niñas, quienes “en las casas, suelen ser las que comen de últimas y menos”, denunció este lunes la directora ejecutiva del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA, por sus siglas en inglés), Natalia Kanem.

    “Debemos mostrarle al mundo que las aspiraciones de las mujeres y las niñas -y la de todos- no quedarán fuera de nuestro alcance”, dijo Kanem durante el arranque de la 54 sesión de la Comisión para la Población y el Desarrollo que concluirá este viernes.

    Para Kanem, la “pandemia ha sido dura para todos: mayores, migrantes, gente con discapacidades, indígenas y gente de descendencia africana”; sin embargo, insistió en que “el Covid-19 es una crisis con rostro de mujer”.

    La crisis aparejada a la pandemia ha empujado a entre 83 y 132 millones de personas a engrosar las filas de la desnutrición en el mundo que afecta a 690 millones de personas, según el Fondo de la ONU para la Población.

    “La pandemia de Covid-19 continúa afectando negativamente a mujeres y niñas. Está alterando los sistemas alimentarios. Está aumentando la pobreza, ha habido daños en los sistemas de salud pública y se han socavado los principales programas de nutrición”, dijo la responsable en su intervención.

    Por todo ello, subrayó que es “vital” que la comisión que hoy comienza sus encuentros bajo el título “Población, seguridad alimentaria, nutrición y desarrollo sostenido” alcance “un resultado significativo basado en el consenso, con soluciones para mejorar la salud pública, la nutrición y la seguridad alimentaria en todo el mundo, especialmente para los más vulnerables”.

    La vicesecretaria general de la ONU, Amina Mohammed, por su parte, hizo hincapié en que el mundo está todavía muy lejos de donde debería estar a pesar del progreso conseguido en los últimos 27 años, cuando se celebró la primera Conferencia sobre Población y Desarrollo en El Cairo.

    “Nos encontramos en un momento clave para hacer avanzar la agenda de El Cairo”, dijo Mohammed, antes de insistir en que la pandemia de Covid-19 “ha devastado las vidas de muchas personas, aumentado las injusticias y las desigualdades y amenazado décadas de progreso”.

    Mohammed, que reconoció la imposibilidad de acabar con el hambre y la malnutrición en el mundo para 2030 como se había marcado como meta la ONU en sus Objetivos de Desarrollo Sostenido, hizo una llamada, al igual que Kanem, a adoptar un plan de acción durante esta semana de discusiones.

    La vida de 4,500 millones de personas están atadas a nuestros sistemas de alimentación. Por ellos, y por la salud de la gente de todo el mundo, debemos aprovechar este momento de transformación potencial”, dijo.

    Toda la información e imágenes son de FORBES.
    Link original: https://www.forbes.com.mx/noticias-inseguridad-alimentaria-golpea-mujeres-comen-ultimas-menos/

  • “Unknown New York: The City that Women Built”, el documental que revela cómo las mujeres construyeron NY

    “Unknown New York: The City that Women Built”, el documental que revela cómo las mujeres construyeron NY

    El lado poco conocido de la arquitectura neoyorkina es revelado por este documental que explora el lado femenino de la emblemática ciudad.

    Un buen día, Beverly Willis miró Manhattan desde algún punto en que los rascacielos dominaban y se preguntó qué tanto habían contribuido las mujeres a la construcción de la ciudad .

    Aquel cuestionamiento llevó a la arquitecta estadounidense de 91 años a lanzar un reto desde la Fundación BWAF. Se trató de identificar cien proyectos en la isla neoyorquina en los que diseñadoras, ingenieras, arquitectas o desarrolladoras hubieran participado en cualquier momento de la historia de la ciudad.

    Para su sorpresa, Willis recibió más de 350 nominaciones que develaban no sólo rascacielos, sino también casas, estructuras, jardines que “dan a Nueva York su rico y complejo aspecto”, declaró la arquitecta al sitio de la fundación.

    Fue entonces cuando Beverly y su equipo decidieron que tenían que dar a conocer los nombres y los proyectos en que tantas mujeres habían contribuido. Para ello decidieron que lo harían a través de un cortometraje que llamaron Unknown New York: The City that Women Built .

    zaha hadid edificio en nueva york

    La pieza, de tan sólo 17 minutos de duración, expone magistralmente la importancia de las aportaciones de las mujeres a la “Gran Manzana” y cómo es que han sido prácticamente borradas de todo reconocimiento por sus colegas.

    Mediante una narrativa histórica y un mapa, Unknown New York: The City that Women Built, revela los lugares exactos en los que nombres como los de las arquitectas Annabelle SelldorfWinka DubbeldamDeborah Berke o la reconocida Zaha Hadid han participado y que continúan dándole forma a los espacios públicos y privados de Manhattan.

    Toda la información e imágenes son de ADMAGAZINE.
    Link original: https://www.admagazine.com/editors-pick/unknown-new-york-the-city-that-women-built-el-documental-que-revela-como-las-mujeres-construyeron-nueva-york-20200212-6467-articulos.html

  • Las niñas con tractores y los niños con muñecas: ¿tienen género los juguetes?

    Las niñas con tractores y los niños con muñecas: ¿tienen género los juguetes?

    Educando y ofreciendo muñecos por estereotipos ahondamos en una sociedad machista, les ponemos límites absurdos y acotamos las vías de imaginación, según las expertas.

    Los juguetes no entienden de género, pero desde pequeños se nos deforma el deseo para que nos adecuemos a una y otra categoría dependiendo de si nacemos niña o niño. Cristina de Babymachismos lleva cuatro años observando y dando visibilidad desde las redes sociales a las diferencias que los estereotipos de género marcan en niñas y niños y cómo inconscientemente educamos en el juego de forma diferente. Ella considera que en la industria juguetera se sigue ahondando en la diferencia: “Grandes fabricantes como Playmobil o Lego han ampliado en los últimos años sus gamas con la versión rosa asociada exclusivamente a unicornios, hadas o escenas de roles domésticos. Cualquier adulto, si no se plantea el sesgo, lo elegiría para regalar a una niña y lo descartaría para un niño”.

    Cristina reconoce que distribuidores y vendedores tratan cada vez más de hacer catálogos de juguetes neutros, evitando fotos infantiles junto a cada producto el manido rosa-azul. “La clasificación en los pasillos de las tiendas también va cambiando, pero ahí sigue influyendo mucho el packaging, que viene dado por la estrategia de venta de la marca juguetera. El marketing en los juguetes se dirige inicialmente a los adultos y, como tenemos los estereotipos de colores, roles y personajes tan interiorizados, tendemos a sesgar nuestra elección”. A veces los juguetes y su marketing es de un machismo evidente, como cuando en el envase de un set de pinturas de purpurina solo aparece una niña y en el de una excavadora la foto es de un niño. “Incluso un bebé de menos de dos años aprende por observación y deducción, y a medida que crece y expresa sus deseos empieza a sentirse identificado solo con lo que se les ha dicho que corresponde a su género”.

    La psicóloga Mire Carrera considera que no es sano que eduquemos en estereotipos de género (respecto al juego y todo lo demás): “Pero no es algo que a veces nos demos cuenta y lo hagamos adrede, es incuestionable que la sociedad en general y de manera subliminal continúa dando este mensaje patriarcal. En los juguetes, en las películas infantiles, en los perfiles de Instagram o TikTok, e incluso nosotros mismos en los quehaceres de casa”. Los niños aprenden por imitación, si eres niña copiarás lo que haga la mamá, y si eres niño igual con tu semejante. Los padres no se depilan y las madres (por lo general) no juegan al fútbol. “Hay muchos progenitores que intentan a toda costa regalar a sus hijos juguetes neutros. Pero es muy difícil y lo digo por experiencia. Mi segundo hijo creció con los juguetes de su hermana, muñecas, cocinitas, disfraces de princesa y ya siendo muy pequeño los descartaba”, afirma Mire Carrera.

    Mire Carrera es especialista en consultas parentales: “En Estados Unidos y otros países el parenting consultant es algo muy habitual. Pensamos que ser padres es algo innato, pero no lo es. Estamos cargados de dudas en una sociedad machista que nos oprime y nos señala. Esta rama de la psicología no busca los traumas o construcciones sistémicas de la familia, sino más bien analiza los roles y ambiente familiar e intenta mejorarlo para potenciar una buena infancia a los peques de la casa”. Carrera cuenta que una niña y un niño de hasta 10 años se mueven igual. Ambos hablan mirando a los ojos al interlocutor y su postura es erguida, pero que a partir de esa edad aparece el cambio. “Un cambio brutal, las niñas se retraen, curvan sus hombros hacia el pecho, ya no miran a los ojos y su tono vocal es más flojito. De manera inconsciente ya están adoptando la postura que las define como mujeres, la sumisión, la adquisición de los roles que las definen como pertenecientes al grupo fémina. Y lo vemos en la hora del patio, los niños juegan a pelota, las niñas hablan de sus cosas o interactúan con muñecas”.

    La psicóloga considera que los juguetes son la primera vía de aprendizaje de esta desigualdad, “pues ya estamos etiquetando quién es quién desde el primer minuto de vida. Y si no fijaros cómo vestimos a los bebés, la ropa no es unisex, es femenina o masculina. Ellos ni tan solo son conscientes de ser un ente distinto a la madre, y ya los estamos encorsetando en los colores y formas de lo que supuestamente tiene que ver con su género. El primer peluche será de un color o un animal que pertenezca al reino masculino o al femenino según sus genitales. ¡Y estoy generalizando, muchos padres al leer esto dirán yo no! Pero la inmensa mayoría sí lo hacemos sin pensar que eso tiene repercusión”, concluye Mire Carrera.

    Cristina de Babymachismos afirma que cualquier juguete estimula la imaginación y la creatividad infantil. Ella cree que en un escenario hipotético en que niñas y niños tuvieran acceso a los mismos tipos de juguetes, y no existiera el estereotipo cultural de los colores y los roles como niño albañil y niña futura madre, no habría preferencias notables de unos y otros por los coches/tractores o muñecas/cocinitas. “Cuando los niños empiezan a tener opinión, ya han interiorizado que, por alguna razón, las muñecas rosas son exclusivamente para ellas”. Tanto Mire Carrera como Cristina Babymachismos concluyen que educando y ofreciendo juguetes por estereotipos ahondamos en una sociedad machista, les ponemos límites absurdos y acotamos las vías de imaginación. Los juguetes no tienen género porque no queremos seguir cerrando puertas solo por el sexo de nuestros niños y niñas. La igualdad se empieza a contruir por los juguetes.

    Toda la información e imágenes son de EL PAÍS.
    Link original: https://elpais.com/mamas-papas/2021-04-18/las-ninas-con-tractores-y-los-ninos-con-munecas-tienen-genero-los-juguetes.html

  • El inicio de las prácticas agrícolas en Europa, hace 7000 años, pudo haber comportado la diferencia sexual del trabajo

    El inicio de las prácticas agrícolas en Europa, hace 7000 años, pudo haber comportado la diferencia sexual del trabajo

    El análisis de objetos de más de 600 tumbas en seis grandes necrópolis europeas muestra que los ajuares de hombres y mujeres tienen herramientas que fueron usadas para diferentes labores relacionadas con el nacimiento de la agricultura. Dirigido por científicas del CSIC en Barcelona, el trabajo persigue entender cuáles pudieron haber sido las actividades realizadas por uno y otro sexo en el inicio del Neolítico en Europa.

    A la izquierda, tres de las herramientas halladas en un enterramiento masculino, en Nitra (Eslovaquia), y analizadas en este estudio. A la derecha, dibujo artístico que ilustra una escena Neolítica genérica (autor: Luís Pascual Repiso)

    Entre las mujeres y los hombres que habitaban Europa hace 7000 años ya se practicaba la división sexual del trabajo, al menos de forma parcial. Eso es lo que revela el análisis de las herramientas de piedra halladas en más de 600 tumbas de seis de las principales necrópolis neolíticas centroeuropeas en la Republica Checa, Eslovaquia, Alemania, Francia y Austria. El trabajo, que se publica esta semana en la revista PLOS ONE, está dirigido por la Dra. Alba Masclans, arqueóloga de la Institución Milá y Fontanals de Investigación en Humanidades (IMF) del CSIC. El objetivo es averiguar cuales pudieron haber sido las actividades realizadas por uno y otro sexo en el inicio del Neolítico en Europa, período en el que se dio el nacimiento de la agricultura y la ganadería.

    El trabajo muestra que los hombres eran enterrados con azuelas (un tipo de herramienta similar a las hachas) de piedra, que a menudo habían sido usadas en actividades como la carnicería (descuartizado de animales), la tala de árboles (para abrir nuevos campos de cultivo, por ejemplo), la carpintería y como armas. Los hombres también eran enterrados junto a puntas de flecha, vinculadas a la violencia entre personas y a la caza. En cambio, las mujeres raramente eran enterradas con herramientas y, las pocas veces que eso ocurría, solían ser herramientas relacionadas con el procesado de pieles de animal u otras fibras orgánicas. La distribución diferencial de herramientas, así como los desgastes y afectaciones en los huesos humanos provocados por movimientos repetitivos y forzados de las extremidades en los restos óseos de los individuos pone de manifiesto que estas comunidades consideraban algunas actividades como un factor claramente ligado al género.

    Las científicas han analizado 621 tumbas bien preservadas. De ellas, 151 son de mujeres, 137 de hombres, 36 probablemente de mujeres y 107 sin identificar. Se han analizado cerca de 300 objetos de piedra, entre ellos azuelas, proyectiles, láminas de sílex y útiles macrolíticos. Además de la IMF-CSIC, en el trabajo han participado el CNRS (Centro Nacional Francés para la Investigación Científica), la Universidad de Estrasburgo (Francia), y la Universidad de York (Reino Unido).

    Construcción de la identidad

    Las arqueólogas han analizado al microscopio el desgaste de las herramientas (análisis funcional) para averiguar en qué fueron usadas y sobre qué material. Los objetos funerarios, dice Alba Masclans, “dan una poderosa visión de las identidades sociales prehistóricas”. Y aunque la visión de la identidad expresada en el enterramiento pueda no ajustarse siempre a la realidad estricta de cómo era la persona en concreto, matiza la investigadora, sí que es indicativa de cómo la persona (o las cualidades que esta entrañaba) era categorizada y representada por la sociedad”.

    Estos primeros grupos Neolíticos reconocían y representaban diferencias en la simbología de lo masculino y lo femenino, lo cual evidencia una construcción de la identidad basada en gran medida en la diferenciación de género.

    La división sexual del trabajo era parcial

    Los resultados revelan que hombres y mujeres pudieron haber practicado la división sexual del trabajo de manera parcial. Y es que hay indicios, como los restos de hoces hallados tanto en tumbas masculinas como femeninas, que indican que tareas como la siega de cereal pudieron ser compartidas.

    Además, hay un importante número de hombres y mujeres que, o bien no recibieron elementos de ajuar en sus tumbas, o bien estos ajuares no tenían un componente simbólico de uno u otro sexo. “Uno de los retos a los que nos enfrentamos”, dice Alba Masclans, “es llegar a entender quiénes eran estas personas y por qué fueron intencionalmente distinguidas del resto”. Entre otras hipótesis, se ha sugerido que o bien tenían un estatus social distinto al del resto o bien pertenecían a categorías de géneros alternativos al binomio masculino/femenino”. Y es que, de la misma forma que la etnografía ha documentado pueblos con más de dos géneros, “no se descarta la existencia de una construcción de género mucho más variada en el Neolítico de la que es habitual hoy en día”.

    El análisis de los objetos funerarios se ha complementado con datos proveniente de trabajos previos y relativos a patologías, pautas de alimentación y patrones de movilidad, datos que revelan que había ligeras diferencias en la dieta entre hombres y mujeres, así como en su actividad física. “Este trabajo pone sobre la mesa importantes diferencias en las manifestaciones simbólicas del trabajo entre hombres y mujeres y su relación con sus hábitos alimentarios, la gestión de la violencia interpersonal y los modos de vida exogámicos”, concluye Alba Masclans.

    La desigualdad de género podría haber surgido con el Neolítico

    Se considera que la especialización del trabajo tuvo un papel fundamental en el surgimiento de la propiedad, la acumulación de excedentes, la concentración del poder político y la explotación social. Pero estos procesos a menudo se interpretan sin considerar la posible división sexual del trabajo y el género. Este trabajo refuerza la hipótesis de que las raíces de las desigualdades de género podrían encontrarse, en parte, en las implicaciones sociales que tuvieron los cambios demográficos y tecnológicos del Neolítico.

    La transición al Neolítico permitió la colonización de Europa mediante migraciones. Ello implicó un aumento en el número de nacimientos y, a su vez, una mayor inversión de tiempo y esfuerzos en la lactancia y el cuidado de niños y niñas. Este incremento en la carga física y emocional del trabajo de las mujeres probablemente condicionó su participación en las actividades políticas, económicas y culturales.

    Futuros estudios permitirán caracterizar con mayor precisión los indicios obtenidos hasta el momento y profundizar en la relación entre la transición al Neolítico, la división sexual del trabajo, la construcción de género y la jerarquización social, incluyendo el patriarcado.

    Artículo de referencia:

    A sexual division of labour at the start of agriculture? A multi-proxy comparison through grave good stone tool technological and use-wear analysis. Alba Masclans,  Caroline Hamon, Christian Jeunesse, Penny Bickle. PLOS ONE. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0249130 

    Toda la información e imágenes son de DICAT.
    Link original: https://www.dicat.csic.es/es/noticias-2021/1134-el-inicio-de-las-practicas-agricolas-en-europa-hace-7000-anos-pudo-haber-comportado-la-diferencia-sexual-del-trabajo

  • Las mujeres y el humor: ¿quién dice que no podemos hacer reír?

    Las mujeres y el humor: ¿quién dice que no podemos hacer reír?

    Desde la literatura clásica a los manuales de modales, a las mujeres se las presentó como una fábrica de hijos, no de chistes. Pero la historia moderna ha dejado en evidencia que esta es una construcción patriarcal y no una realidad.

    ¿Es el reconocimiento del derecho al sentido del humor -y su consiguiente práctica- una de las conquistas que aún nos faltaría alcanzar plenamente a las mujeres? Vale preguntárselo cuando se hace un repaso a ciertas notas periodísticas firmadas por varones de distintas latitudes en años cercanos, a encuestas donde ellos opinan sobre el tema y aparece esa resistencia, a veces solapada, a aceptar que ellas sean capaces de ejercer la ironía, disparar epigramas, replicar con gracia y celeridad, volverse mordaces si viene al caso, acertar con el humor negro… O recurrir con felicidad al nonsense, saliéndose de la lógica del sentido común, como lo hace Gaby Blanco en su reciente libro de cuentos Una chica normal (Paradiso Ediciones, que distribuye Galerna en distintos puntos de Capital y el interior).

    Un género el nonsense que ¿hace falta señalarlo? cultivó a las mil maravillas nuestra María Elena Walsh en sus canciones para niños, inspirándose en la tradición anglosajona que le transmitió su padre y que encontró en esta poeta absoluta -con una amplia producción que va mucho más allá de los temas y cuentos dedicados a los chicos- una formulación precisa y bien personal en castellano. Deliciosamente humorística con la luna que baja en camisón revoleando su sombrilla de azafrán o en ese reino del revés donde una araña y un ciempiés van montados en caballos de ajedrez; asimismo, en ocasiones trastocando los contenidos del folclore argentino, por caso en la Baguala de Juan Poquito, el grillo que llora con sus alas, o la Chacarera de los gatos, es decir, de los tres morrongos de bastón, galera y guantes que van en tranvía a Tucumán, confundiendo un concurso para gato y chacarera con uno de belleza… Nursery rhymeslimericks, rima y métrica ajustadas, el disparate porque sí para crear con toda libertad imágenes poéticas, para jugar con las palabras, su sentido y su sonido, extendiendo generosamente el vocabulario.

    Niní Marshall Niní Marshall

    Pues bien, en el país de MEW y de otra genia de gracia plena -en diferente registro pero de semejante potencia creadora- como Niní Marshall; en el país de Silvina Ocampo Alicia Steinberg, de Olinda Bozán Elena Lucena,de las Gambas al Ajillo y Sara Gallardo, hace unos 35 años, en una mesa redonda de la Feria del Libro se dictaminó alegremente que las mujeres carecían de sentido del humor, tal si los debatientes viviesen en el País del Nomeacuerdo. Es decir, quedó demostrado que los caballeros de esa mesa redonda (nada que ver con los que se reunían en el hotel Algonquin de NY en torno a otra mesa -realmente circular- hace un siglo, animados por la excelsa humorista Dorothy Parker, guionista, escritora, poeta), menospreciaban el llamado sexto sentido en ellas. O acaso los irritaba la mera posibilidad de que las mujeres incursionaran por su cuenta y riesgo en lo que consideraban patrimonio exclusivo masculino (o sea, universal) desde tiempos remotos. Abrir su cabeza un pasito más allá, ay, qué miedo que les dio.

    No es de sorprender que todavía, en la actualidad del XXI, exista semejante rémora, esa reticencia a aceptar de buen grado que las mujeres puedan intervenir desarrollando esa herramienta de poder social que confiere el sentido del humor inteligente, ingenioso; a veces, desestabilizador, subversivo. Apto para tirar abajo toda expresión de solemnidad echando una luz nueva, crítica, con especificidad de género, sin límites temáticos.

    Dorothy Parker (Everett/Shutterstock)Dorothy Parker (Everett/Shutterstock)

    ¿Solo destinadas a reproducir y criar machistas?

    Ciento y pico de años después de que la recién creada revista Harper’s Bazaar se formulara en su portada la pregunta ¿Tienen sentido del humor las mujeres?, ya en pleno siglo XXI, año 2007, el brillante polemista inglés Christopher Hitchens publicó en Vanity Fair un famoso artículo donde -otro señor que nos explica cosas- sostenía que las mujeres son incapaces de ser graciosas. Al revés de los hombres, pontificaba el socialista que se volvió neoconservador, ellas no necesitan del humor para conquistar a los varones, mientras que la estrategia de ellos es lograr “la dulce rendición de la risa femenina”. Por supuesto, faltaba más, Hitch bendice paternalmente a las mujeres por sus buenos corazones que desean una vida justa y apacible. Y reconoce que muchos señores prefieren que no sean divertidas, puesto que las quieren como audiencia reidora antes que como rivales chistosas.

    Christopher Hitchens  (Reuters)Christopher Hitchens (Reuters)

    Desinformado de lo que han hecho sobre los escenarios y en la tevé unas cuantas comediantes de tierras australes con letra propia como Gabriela Acher o las antes mencionadas Gambas (para remitir a ejemplos argentinos), dice el columnista que -salvo Lucille Ball Helen Fielding– las mujeres no ironizan con la propia decadencia física. Y citando al mismísimo Rudyard Kipling, a propósito de su poema La hembra de las especies, preconiza que cada fibra del cuerpo femenino está destinada en una sola dirección, que quien se enfrenta al dolor y a la muerte con cada vida que lleva en su seno, no puede desviarse en bromas o compromisos públicos. La cuestión de la gracia, subraya por su lado C.H., sería básicamente secundaria para ellas, conscientes de un llamado superior, que no es motivo de risa: la maternidad y la crianza de los hijos (aquí habría que anotar que el mismo ensayista fue un padre desatento, al menos durante la infancia, con los cuatro que tuvo de dos matrimonios; y también que a su primera esposa la dejó embarazada del segundo por un flechazo con otra mujer). Guardián de ciertos intereses masculinos, Christopher Hitchens sentencia que para los hombres es una tragedia que las dos cosas que más valoran, las mujeres (¡hummm!) y el humor, sean tan antitéticas. Con amigos aduladores de esta calaña, que te valoran de esta guisa, ¿no serían preferibles los enemigos desembozados?

    ¡A las risas, ciudadanas!

    Hitchens y Kipling son apenas dos muestras -si bien significativas- de los millones de señores que a través de generaciones nos han explicado cosas con condescendencia, incluso con unas palmaditas indulgentes en el hombro, para recordarnos el lugar que nos asignó el patriarcado como fábrica de hijos, no de chistes. En todo caso, si afuera hay actividades extenuantes del tipo de las bélicas, ser el reposo del guerrero al que hay que esperar pacientemente, fielmente, a lo sumo tejiendo y destejiendo. Sin siquiera poder elegir Penélope la música si hay extraños -los famosos pretendientes- en las inmediaciones, según remarca Mary Beard, catedrática inglesa de clásicos, en Mujeres y poder (Crítica, Barcelona), citando el momento en que Telémaco manda a su madre de vuelta a sus labores femeninas diciéndole: “El relato estará al cuidado de los hombres. (…) Mío pues es el gobierno de la casa”.

    Mary Beard  en la National Gallery de London, 2020 (REUTERS/Simon Dawson)Mary Beard en la National Gallery de London, 2020 (REUTERS/Simon Dawson)

    Entonces, ya en las primeras evidencias escritas de la cultura occidental, las voces de las mujeres son acalladas en la esfera pública: “Tal como lo plantea Homero, una parte integrante del desarrollo del varón consiste en controlar el discurso público y en silenciar a las hembras de su especie”, dice Beard, erudita con gran sentido de la ironía que, por si hacía falta, del griego pasa al mundo romano, a la Metamorfosis de Ovidio, “probablemente la obra más influyente de la literatura occidental después de la Biblia, que vuelve reiteradamente a la idea de acallar a las mujeres en su proceso de transformación”. Y da ejemplos bien concretos, apropiados para aventar cualquier duda.

    Si vale remontarse a las citas literarias de la Antigüedad -amén de las bases respecto de los roles de género que dejaron asentadas- es porque el humor representa una forma del discurso público: necesita audiencia, ya sea en una reunión social, en un teatro o un cine, mirando televisión o leyendo libros, artículos, tuits, tiras cómicas. Desde luego, un discurso que exige libertad de expresión, estímulos, un cacho de cultura: condiciones de las que se privó históricamente a las mujeres en general (salvando excepciones dentro de la nobleza y en los conventos -que alumbraron a personas con sentido de la paradoja y de la autocrítica de a ratos burlona, como Sor Juana Santa Teresa).

    Gambas al ajilloGambas al ajillo

    El confinamiento y la educación desalentaron largamente el desarrollo del sexto sentido en las mujeres. Muchos manuales de buenos modales hasta entrado el siglo XX han predicado que ellas no debían hacer chistes ni contar anécdotas graciosas en la mesa, que no era de buen tono soltar una carcajada… En suma, se implantó que sentido del humor y mujeres se excluían mutuamente, y se endulzó ese prejuicio poniendo en valor la sensibilidad, la delicadeza, la emotividad, la abnegación. El propio machista Hitchens después de anotar en su artículo que el humor es signo de inteligencia, al menos tiene la decencia de reconocer que “muchas mujeres han recibido el aviso de que si parecían demasiado brillantes, se podían volver amenazadoras para los hombres”.

    “Reír es propio del hombre”, avisó Rabelais en el prólogo de su delirante, gozoso Gargantúa (1534), se cree que inspirándose en Aristóteles y su afirmación de que reír es una rara cualidad exclusivamente humana. Obvio que durante siglos muchos varones aplicaron ese aforismo al género masculino, incluso cuando ya habían irrumpido a fines del XIX, comienzos del XX actrices en estado de gracia y con un toque de locura (grain de folie, dirían en Francia) que encontraron el burlesque, el music-hall, el varieté, la comedia, en oportunidades con letra propia (la impagable atrevida Mae West) o ajena (Katharine Hepburn), los cauces ideales para aplicar un talento generador de risas.

    FANNY

    Entre las pioneras descuella la grandiosa Fanny Brice, notable mujer orquesta nacida en 1891 que tanto te aliñaba un burlesque como te interpretaba un musical en Broadway o te entonaba un tema de jazz, sin dejar de lado las actuaciones en radio con guiones que le pertenecían (Barbra Streisand la homenajeó libremente en el film Funny Girl, 1964). Estas chicas iluminadas solían saltarse límites, salirse de madre, sembrar el caos y la anarquía. Que algunas comedias del Hollywood de los ’30 y comienzos de los ’40 subvirtieron los valores más prestigiosos de la tragedia gracias a las actrices lo demuestra el pasaje de la divina Greta Garbo -insuperable Anna Karenina o Dama de las camelias– a este género con Ninotchka (1939), de la sabia mano de Ernst Lubitsch: el eslogan publicitario solo decía: “¡Garbo ríe!”

    La lista de actrices, guionistas, escritoras, directoras, dibujantes dotadas para el humor acá y en el mundo, a esta altura del 2021 es tan vasta que ya no habría necesidad de seguir dando examen, si no fuera porque aún se sigue cuestionando ese talento en las mujeres. Hay algo que incomoda, que mueve el piso masculino en el hecho de que las humoristas de todos los registros (incluida la negra ferocidad de Elfriede Jelinek, de Virginie Despentes) hayan tomado la palabra en este tipo de discurso público, particularmente cuando se lanzan sin bridas y sin estribos a patear desenfadadamente tótems y tabúes, mandatos y conformismos que cercenan libertades civiles, de pensamiento y de accionar.

    Afiche de "Ninotchka", con Greta Garbo, donde dice "Garbo ríe" Afiche de «Ninotchka», con Greta Garbo, donde dice «Garbo ríe»

    Gaby Blanco y el indescifrable encanto del nonsense

    En algunos cuentos del libro Una chica normalGaby Blanco deja colar como quien no quiere la cosa, de soslayo, el peligro que nos persigue -y a veces nos alcanza o nos toca de cerca- desde hace más de un año: la maldecida pandemia. Lo hace desdramatizando, desde escenarios familiares que ella sabe enrarecer por la vertiente oblicua de cierto nonsense. Pero sin llegar a los estados más puros de este género, es decir, la ausencia completa de sentido común, despegada sin más de la realidad. Blanco mantiene una suerte de control, desorganiza hasta cierto punto la vida de varios de sus personajes, los empuja a hacer cosas fuera de las reglas, insensatas; a intentar realizar deseos inalcanzables… Y de pronto los suelta para que se estrellen y comprueben que la vida no es sueño. Justo cuando la lectora, el lector habían entrado en ese mundillo lunático, irresponsable.

    Gaby Blanco es dramaturga, directora teatral, performer. Su obra Consorcio Zoom ganó el Concurso Nacional de Actividades Performáticas en Entornos Visuales del INT, y en el Festival Shakespeare de Buenos Aires resultó seleccionada la pieza Romeo y Julieta QR. En el reciente Fiba presentó la audiobra Para decir adios, perfo desde el lago Regatas de Palermo hasta el río: una forma de reparación de los rituales de despedida que la cuarentena sustrajo. En cada función se recolectaron audios que referían a lo que no había podido ser antes de realizar una procesión laica. Algunos de estos mensajes apelaban a un humor cariñoso. Blanco creó esta obra en homenaje a una amiga muerta por covid en confinamiento.

    "Una chica normal", de Gaby Blanco«Una chica normal», de Gaby Blanco

    En uno de los relatos de Una chica normal hay una vecina de la provincia de Buenos Aires que decide, frente al persistente virus, adelantarse y escribir su propio obituario tirando a jodón y mandarlo al diario local, con foto y todo: “Quiero que el mundo sepa lo que el mundo sabe, porque las cosas se saben, y más acá, en Chacabuco”. Y ahí comienza el deschave donde no salvará su honor pero sí determinado prestigio.

    En el que acaso sea el cuento más chiflado, Fundir el vidrio, la protagonista se erotiza y desmelena mientras Daniel San, adiestrado de cerca por el señor Miyagi, limpia del lado de afuera los vidrios de su ventana, aunque no estamos en los departamentos South Seas (¡la narradora vive en Bartolomé Mitre y Perón!). Como quiera que sea, la frase “Pule y encera” excita a la chica. (No hace falta haber visto la saga Karate Kid para disfrutar de esta ensoñación).

    Como telón de fondo, la pandemia se hace presente asimismo en El alpinista, con la ciudad desierta como si estuviera amenazada por Godzilla mientras que un hombre afecto a la montaña cae azarosamente en un gimnasio donde se enseña alpinismo de pared. Y el mismo tipo, escritor sin éxito de un solo libro, descubre -en otro relato- su texto dentro de un canasto de saldos junto a un volumen de Doña Petrona. Naturalmente, tomará una decisión descabellada.

    Gaby BlancoGaby Blanco

    Una canción coreana parece arrancar en un tono racional y muy pronto se desequilibra para convertirse en una sátira, indirecta pero mordaz, a la pretendida amistad en redes. En otros cuentos, la autora revela como un pequeño gesto innecesario puede generar en efecto dominó una serie de desastres crecientes; o combina la lista de cosas para hacer guardada en una cartera con la obsesión por tener mano verde con los helechos… En un país invadido por chimpancés que han tomado amablemente el poder (Escalera al cielo) se trenzan un par de malignos gemelos albinos, su quisquillosa tía, árboles de navidad y una fuente con vitel toné. Siempre rozando el absurdo, una mujer enamoradiza, quizás la misma que ¿intimó? con Daniel San y el señor Miyagi, imita sin proponérselo a la Anita Eckberg de La Dolce Vita, en la Fontana de Trevi, en pleno verano romano.

    Así son las cosas en este breve libro excéntrico -con algunos descuidos en la corrección de tiempos verbales y otras menudencias- que brinda la alegría inexplicable, el placer sonriente y esa gratuidad del nonsense donde lo insólito se vuelve posible y el desorden se presenta como un paréntesis incongruente en la vida cotidiana.

    Toda la información e imágenes son de INFOBAE.
    Link original: https://www.infobae.com/cultura/2021/04/19/las-mujeres-y-el-humor-quien-dice-que-no-podemos-hacer-reir/