Con gotas de sudor en su rostro quemado por el sol, Liang Qiuli encontró su overol ya empapado de sudor.
En el sitio de construcción del Distrito Central de Negocios en la nueva capital administrativa de Egipto, Liang examinó meticulosamente los tamaños, cantidades y especificaciones de los materiales de construcción, desafiando el sol abrasador.
Proveniente de la Región Autónoma Zhuang de Guangxi, en el sur de China, la ingeniera es una rareza relativa en un sector que generalmente exige trabajo in situ a miles de kilómetros de distancia de casa. «Las personas a menudo perciben los sitios de construcción como entornos dominados por hombres, pero las mujeres también pueden hacer contribuciones significativas con su profesionalismo, atención al detalle y meticulosidad».
Involucrada en el proyecto más importante emprendido por empresas chinas en Egipto hasta la fecha, Liang trabajó incansablemente en el sitio de construcción durante todo el día. Cuando cayó la noche, evaluó diligentemente el progreso del trabajo, verificó los datos y escribió informes completos. «Aspiro a participar en más proyectos en el futuro, apoyando el desarrollo de infraestructura de más naciones africanas».
Las historias en el sitio de construcción en Egipto son ejemplos vívidos del papel vital de las mujeres en la cooperación chino-africana. Desde la ayuda médica, la investigación científica y la reducción de la pobreza hasta los intercambios económicos y comerciales y la combinación de estilos de vida. Las mujeres de China y África participan en una cooperación más amplia, más fuerte y más efectiva.
A medida que se profundizan los intercambios y la cooperación entre China y África, estas mujeres apasionadas, resistentes y valientes continúan difundiendo la fuerza suave pero poderosa de «sostener la mitad del cielo», contribuyendo a la amistad duradera entre China y África.
Hoda Ibrahim Ahmed Gomaa, una empleada que trabaja codo a codo con Liang, se desempeñó como oficial de seguridad en el proyecto después de adquirir conocimientos sobre seguridad de equipos a través de la iniciativa de colaboración China-Egipto conocida como el «Instituto Luban».
La mujer egipcia no ocultó su apatía cuando asumió el cargo al principio. «Inicialmente, tenía la intención de asegurar un trabajo estable para mantener a mi familia, pero mientras trabajaba, me intrigó este sector».
Ella ve los proyectos chinos como agentes de cambio, introduciendo prácticas estandarizadas de capacitación de empleados y tecnologías de producción avanzadas en África. «Esta posición me ha equipado con habilidades invaluables y ha mejorado significativamente el bienestar de mi familia».
Lineo Kobeli es otra mujer africana que persigue su «sueño chino» en medio de la evolución de la cooperación entre China y África.
Desde la infancia, la mujer de Lesotho ha escuchado muchas historias de su padre sobre el país en el Lejano Oriente. Su padre es un hombre de negocios que viajaba con frecuencia a China.
Después de pasar dos años trabajando en África, aprovechó la oportunidad para obtener una maestría en China, finalmente cumpliendo su sueño de infancia.
Durante una competencia de emprendimiento juvenil, Kobeli fue cautivada por una mujer china en el panel de jueces que representa a la Asociación Empresarial de África Guangdong (AGBA).
«Ella afirmó que con suficiente determinación, las mujeres pueden tener éxito en sus carreras», recordó Kobeli. Inspirado por estas palabras, Kobeli se acercó al juez después de la competencia.
«En ella vi a una mujer en la que quería convertirme. Le pregunté si había una oportunidad de trabajar con ellos, y ella estuvo de acuerdo», recordó.
La mujer china que Kobeli mencionó fue Tracy Huo, vicepresidenta de AGBA. Huo recordó que se sintió conmovida por la confianza, la sinceridad y el entusiasmo por aprender de la mujer africana, por lo que invitó a Kobeli a realizar una pasantía con su equipo.
«Los jóvenes africanos pueden inspirarse en el desarrollo de China, aprender y equiparnos aquí, y retribuir a África», dijo Kobeli.
Huo también ha sido testigo de los cambios en los roles sociales de las mujeres africanas en los últimos años. Dijo que un número cada vez mayor de mujeres africanas había escapado de la pobreza y se había dado cuenta de su autoestima a través de la educación, el desarrollo de habilidades y el crecimiento industrial.
«En el futuro, las mujeres ciertamente desempeñarán un papel más importante en la cooperación económica y comercial China-África y en los intercambios culturales», dijo Huo con confianza.
El 29 de junio, el Foro de Mujeres China-África tuvo lugar en Changsha, provincia central china de Hunan, como un evento paralelo de la Exposición Económica y Comercial China-África.
