Categoría: Noticias

  • Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia en números: cuál es la situación de las científicas en la actualidad

    Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia en números: cuál es la situación de las científicas en la actualidad

    A pesar de que los ámbitos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés) se consideran fundamentales para las economías nacionales y que las mujeres son clave para la comunidad científica y tecnológica, la mayoría de los países, independientemente de su nivel de desarrollo, no han alcanzado la igualdad de género en este sector.

    La información proviene de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que también advierte que a nivel mundial solo 1 de cada 3 investigadores son mujeres.

    Para reconocer su rol clave en la comunidad científica y tecnológica y promover su acceso a la educación, la capacitación y la investigación, el organismo internacional instituyó el 11 de febrero como el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia.

    En general, las mujeres en los campos STEM publican menos, reciben menores salarios por su investigación y no progresan tan lejos como los hombres en sus carreras, reconoce el Instituto de Estadística de la Unesco (UIS, por sus siglas en inglés).

    En ocasión del Día Internacional, accede a las estadísticas que demuestran esta situación.

    Las mujeres corren el riesgo de perderse los empleos del futuro

    “El mundo está experimentando una transformación fundamental que está cambiando nuestra forma de vivir, trabajar y pensar”, reconoce un informe sobre la ciencia publicado en 2021 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés).

    Las implicancias de esa transformación tienen gran alcance e impactan en diferentes áreas: desde los efectos del cambio climático que obligan a replantearse el enfoque de desarrollo actual hasta la irrupción de la inteligencia artificial (IA) en diversos campos.

    Por lo tanto, se sabe que, a medida que se vayan automatizando los empleos poco cualificados, el mercado de trabajo exigirá cada vez más un mayor nivel de formación y competencias. Las mujeres enfrentan un escenario complicado en este sentido y corren un serio riesgo de perderse los trabajos del futuro.

    Según un estudio colaborativo de 29 programas de las Naciones Unidas, la mitad de los empleos actuales habrán desaparecido en 2050 y las mujeres serán las más perjudicadas por el cambio: se estima que perderán 5 empleos por cada 1 ganado gracias a la Industria 4.0, frente a la pérdida de 3 empleos por cada 1 ganado por parte de los hombres.

    Para 2018 se había logrado la paridad numérica en ciencias de la vida en muchos países, ...

    Para 2018 se había logrado la paridad numérica en ciencias de la vida en muchos países, pero la proporción de doctoras en ingeniería no superaba el 30 %. En la fotografía, una estudiante de la Tecnicatura en Laboratorio utiliza un microscopio en un centro de salud de Mogadiscio, la capital de Somalia.

    FOTOGRAFÍA DE RICE UN PHOTO

    Las mujeres tienden a ser una minoría en el mercado laboral digital

    Datos de 2018 compartidos por la Unesco demuestran que, para ese año, las mujeres solo representaban un tercio (33 %) de los investigadores del mundo. Si bien para ese entonces habían logrado la paridad numérica en ciencias de la vida en muchos países, su proporción entre los doctores en ingeniería y en informática solamente ascendía a un 28 % y un 40 %, respectivamente.

    Un sector crítico es el de la IA, que está creciendo a niveles acelerados, explica el informe. Tal es así, que en dos años (entre 2015 y 2017) el número de trabajadores en todo el mundo con habilidades en la temática aumentó en un 190 %, según el Foro Económico Mundial.

    No obstante, la presencia femenina es minoritaria en esta disciplina. Según la misma información de la agencia de la ONU, para 2018 las mujeres solamente representaban un 22% de los profesionales que trabajaban en inteligencia artificial, a nivel mundial.

    “Esta brecha es visible en los 20 países con mayor concentración de empleados de IA y es particularmente evidente en Argentina, Brasil, Alemania, México y Polonia”.

    Sumado a lo anterior, el organismo refleja que las mujeres siguen siendo minoritarias en los puestos técnicos y directivos de las empresas tecnológicas. Además, tienen más probabilidades que los hombres de abandonar el campo tecnológico. Las razones más comunes esgrimidas tienen que ver con las condiciones laborales, la falta de acceso a roles creativos clave y una sensación de “sentirse estancadas en sus carreras”, menciona el reporte de 2021.

    Si bien las principales empresas multinacionales de tecnología están logrando avances, todavía están lejos de cerrar la brecha de género en los roles técnicos y de liderazgo. Un ejemplo concreto es que, en el mundo empresarial, solo 1 de cada 4 investigadores es mujer.

    A eso se suma que, cuando las mujeres crean sus propias empresas, tienen serios problemas para obtener financiación. “En 2019, solamente un 2 % del capital de riesgo iba a parar directamente a empresas fundadas por mujeres”.

    Cuáles son los países con mayor cantidad de científicas

    América Latina y el Caribe es una de las dos regiones (junto con Asia central) que han alcanzado la paridad en la proporción de hombres y mujeres investigadores. Aquí, el 45 % del total de los investigadores son mujeres, mientras que el promedio mundial arroja que representan menos del 30 % a nivel global, según datos del UIS.

    Pese a ello, las mujeres aún se encuentran subrepresentadas en los niveles más altos de las carreras profesionales y continúan siendo una minoría en muchos campos de las STEM en casi todos los países de la región, advierte un artículo informativo de ONU-Mujeres de 2022.

    De hecho, agrega la Unesco, en el mundo académico las investigadoras suelen tener carreras más cortas y peor remuneradas y sus trabajos están infrarrepresentados en las revistas de alto nivel. Al respecto, un análisis de casi 3 millones de artículos sobre informática publicados en Estados Unidos entre 1970 y 2018 concluyó que la paridad de género no se alcanzaría en este campo hasta el año 2100.

    De acuerdo con una hoja informativa del UIS que presenta los datos más recientes sobre investigación y desarrollo experimental disponibles a junio de 2019, los países de la región con mayor cantidad de investigadoras son: Venezuela (con un 61.4 %), Guatemala (53 %) y Argentina (52 %), seguido de Panamá (51.8 %), Trinidad y Tobago (49.8 %), Cuba (49 %), Paraguay (48.9 %), y Uruguay (48.3 %).

    Una científica utiliza tinte para revelar impurezas químicas en diversos materiales. Las mujeres han realizado (y ...

    Una científica utiliza tinte para revelar impurezas químicas en diversos materiales. Las mujeres han realizado (y continúan haciendo) importantes aportes a la ciencia. Sin embargo, la mayoría de los países no han alcanzado la igualdad de género en este sector.

    FOTOGRAFÍA DE WILLARD CULVER

    En Latinoamérica hay más investigadoras, pero publican menos

    En todo el mundo, las mujeres científicas publican menos que sus homólogos masculinos y la situación es similar en Latinoamérica y el Caribe (LAC), aunque en toda la región su participación en la producción científica es heterogénea, indica el documento Una ecuación desequilibrada: aumentar la participación de las mujeres en STEM en LAC publicado en 2022 por la Unesco con el apoyo del Consejo Británico.

    Específicamente, la proporción de artículos científicos que incluyen la participación de al menos una autora va desde el 43 % en El Salvador hasta el 72 % en Brasil. Seguido de Brasil, los países que encabezan la lista son Argentina (67 %) y Guatemala (66 %), mientras que los países en los que la proporción está por debajo del 51 % son Nicaragua, Chile, Bolivia, Ecuador, Costa Rica, República Dominicana y Honduras.

    A eso se le suma que las mujeres tienen menos probabilidades que los hombres de ser primeras o últimas autoras (los puestos de autoría más prestigiosos), las publicaciones con firma femenina reciben menos citas, y el porcentaje de mujeres que figuran como primeras y últimas autoras se asocia negativamente con el factor de impacto de una revista. “En otras palabras, a mayor factor de impacto, menor presencia femenina”, explica el documento antes mencionado.

    Latinoamérica tiene mucho por hacer para incluir a las mujeres en la ciencia

    Ese reporte de 2022 concluye que Latinoamérica y el Caribe ha experimentado mejoras significativas en cuanto a la inclusión de las mujeres en STEM y reconoce que gran parte de los países de la región ha emprendido políticas para mejorar el escenario, como leyes y planes de igualdad e iniciativas STEM a nivel universitario, entre otras.

    A pesar de estos avances, la región sigue presentando un contexto muy variado en cuanto a la adopción de las STEM por parte de las mujeres y las niñas, y siguen existiendo brechas y barreras en las distintas etapas del ciclo vital como consecuencia de diferentes variables

    Algunas de esas variables son los estereotipos y las ideas erróneas que se propagan en las familias y a través de los profesores; la falta de pedagogías, herramientas e infraestructuras de STEM con perspectiva de género; y la pobreza, que afecta más a las mujeres y a las niñas que a la población general.

    Por lo tanto, los autores del documento recomiendan trabajar sobre esos factores para poder potenciar la presencia de las niñas y las mujeres en la ciencia y contar con sus invaluables aportes.

  • Naciones Unidas, la UNAM y el Politécnico festejarán a mujeres y niñas en la ciencia

    Naciones Unidas, la UNAM y el Politécnico festejarán a mujeres y niñas en la ciencia

    La participación de las mujeres en la ciencia y la tecnología es más frecuente en la actualidad, pero para la Organización de Naciones Unidas (ONU) es necesario que sean más las que trabajen en esos ámbitos, se lee en su página de Internet.

    En 2015 la Asamblea de Naciones Unidas declaró el 11 de febrero como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia con el fin de difundir su trabajo y promover la igualdad de género en el sector.

    Para conmemorar ese día, la ONU presentará la edición nueve de la Asamblea del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia el 8 y 9 de febrero en su sede de Nueva York. Científicas, responsables gubernamentales, representantes de organizaciones internacionales y del sector privado debatirán sobre el liderazgo de las mujeres para alcanzar los tres pilares del desarrollo sostenible: prosperidad económica, justicia social e integridad medioambiental.

    En México se tienen preparadas diversas actividades. La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ofrecerá este jueves talleres, conferencias y visitas a laboratorios en el Instituto de Ciencias Nucleares, ubicado en el circuito exterior de Ciudad Universitaria. Estarán abiertas a todo público.

    En el Colegio de Ciencias y Humanidades Naucalpan se proyectarán películas con temática de mujeres científicas; además, habrá una sesión de cuentacuentos, que incluirá los libros Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes, de Elena Favilli y Francesca Cavallo. Asimismo, alumnas del plantel impartirán el Taller de experimentos científicos sencillos. Las actividades se realizarán el domingo de las 9 a las 16 horas, en la Sala de Cine Audiovisual y en los auditorios Antonio Lazcano y José Sarukhán.

    El domingo también se presentará la Jornada por el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia 2024: Pregúntale a una bióloga. Se realizará un conversatorio entre académicas del Instituto de la Biodiversidad de la UNAM sobre vertebrados, invertebrados, plantas y hongos, entre otros temas. Tendrá lugar en la Sala Multimedia del Pabellón Nacional de la Biodiversidad. Alumnas de estas investigadoras impartirán talleres de divulgación.

    El Instituto Politécnico Nacional llevará a cabo el Festival de la Mujer y la Niña en la Ciencia en el Planetario Luis Enrique Erro. Se realizarán talleres y se proyectarán películas relacionadas con el tema. Destaca la charla Misión Artemisa presentada por la divulgadora científica por redes sociales Danna Ximena Astro, quien platicará acerca de la participación de la mujer en las exploraciones espaciales. Se realizará el domingo a las 14 horas en ese recinto.

    En el Centro Cultural España se realizarán actividades este 10 y 11 de febrero; el sábado destaca la charla Comunicar ciencia con lentes violetas, en la que se abordará el tema del riesgo que tienen las mujeres al divulgar la ciencia.

    En el conversatorio las ponentes brindarán recomendaciones desde su experiencia. Participarán la bióloga de la Facultad de Ciencias de la UNAM Aketzalli González Santiago; la gerente de proyectos en el British Council y directora general voluntaria en Girls in Tech México, Mónica Angulo Miñarro; la coordinadora de la maestría en periodismo ambiental y editora de la revista Noósfera, del Centro de Investigación Atmosférica y Ecológica, Cecilia Montero; la investigadora Liliana Quintanar Vera, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias y la de América Latina.

    El domingo se impartirá el taller Mujeres en la Tierra y en el espacio, que explorará la vida de las que han conquistado el cosmos y de las que, a través del arte, se han dedicado a comprender procesos biológicos, como la metamorfosis.

  • 6 de cada 10 mujeres que acuden a refugios reportan violencia física o psicológica

    6 de cada 10 mujeres que acuden a refugios reportan violencia física o psicológica

    La violencia de género en México es una de las problemáticas más persistentes: 7 de cada 10 mujeres han enfrentado algún tipo de agresión por razón de género, desde manipulación, insultos, violencia económica, golpes, abuso sexual, hasta intentos de feminicidio.

    Como parte de las estrategias de política pública para frenar la violencia de género se crearon en 2010 los Centros de Justicia para las Mujeres, a cargo de la Conavim (Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres). Al corte del 2022 se registraron 65 unidades repartidas en todo el país.

    La violencia física y la violencia psicológica son las más reportadas por las mujeres que acuden a estas unidades a pedir ayuda: 6 de cada 10 (57.7%) mujeres atendidas llegaron por dichas agresiones, de acuerdo con cifras del Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía).

    Un 4.6% de las mujeres que acuden a estos centros reportaron violencia sexual, 4.4% violencia económica y 2.4% violencia patrimonial. Resalta que el 31% restante son mujeres que no especificaron el tipo de violencia que enfrentan.

    En línea con otras estadísticas oficiales sobre violencia de género, se observa que en la mayoría de los casos el agresor es alguien cercano a las mujeres, particularmente las parejas.

    Del total de casos que atienden estos refugios, al menos, en el 28% la pareja (cónyuge, concubino, novio o ex pareja) es quien perpetra la violencia. Otros de los agresores que mencionan las mujeres son los padres, abuelos, vecinos, parientes segundos, colegas o jefes del trabajo e incluso servidores públicos.

    En los reportes de agresores también destaca que, por motivos individuales, las mujeres que van a estas unidades a pedir ayuda prefieren omitir el parentesco o relación que tienen con sus agresores. Estos reportes no especificados concentran el 44.3% del total.

    ¿Qué son los Centros de Justicia para las Mujeres?

    Los Centros de Justicia para las Mujeres son una especie de refugio para las mujeres y sus hijos e hijas que han sobrevivido a algún tipo de violencia de género. Brindan atención psicológica y médica, guía jurídica, alimentos, productos de higiene, ludotec, albergue temporal y otros servicios.

    También ofrecen talleres de empoderamiento social y económico para ayudar a las mujeres a salir de círculos y dinámicas violentas.

    No existen requisitos para recibir la ayuda de estos centros, no tienen costo y están abiertos los 365 días del año, las 24 horas.

    ¿A quiénes atienden?

    Entre 2012 y 2022, estos centros atendieron a 967,920 mujeres y casi 96% de ese total fueron mujeres que acudieron directamente a las unidades a buscar ayuda. El restante fueron mujeres canalizadas por otras instituciones o encontradas en situaciones de violencia por otras autoridades.

    De acuerdo con la información recolectada y procesada por el Inegi se observó que la mayoría de las mujeres que son atendidas en estas unidades son adolescentes y adultas jóvenes. El 57.2% del total tienen entre 15 y 44 años.

    Muchas mujeres no especifican toda la información social, económica y demográfica en sus reportes, no están obligadas a hacerlo. Pero entre las mujeres que brindan esta información se observa que la mayoría están casadas o en unión libre, y cuentan con estudios hasta secundaria y bachillerato.

    Aunque se ha visto un crecimiento importante de la capacidad de estas unidades, es importante mencionar que muchas mujeres no tienen la posibilidad de pedir ayuda (por cuestiones de violencia, dinero o ubicación). Es fundamental extender los servicios de prevención y atención, principalmente en zonas marginadas y entre poblaciones vulnerables.

  • Al menos 21 mujeres fueron víctimas de feminicidio en enero de 2024 en Colombia

    Al menos 21 mujeres fueron víctimas de feminicidio en enero de 2024 en Colombia

    Al menos 21 mujeres fueron víctimas de feminicidio en Colombia en enero de este año, informó este miércoles la Procuraduría General (Ministerio Público), que calificó el comienzo de año en el país para las mujeres como «violento» y pidió acciones ante esta lacra.

    Dos de las víctimas eran menores de edad y 11 de ellas fueron asesinadas por su pareja o expareja sentimental. Los datos de la Procuraduría indican que la mayoría de los crímenes fueron cometidos con arma blanca o punzante.

    En lo que va de 2024 el Ministerio Público ha emitido 84 alertas derivadas de valoraciones por Medicina Legal por violencia intrafamiliar o de pareja, mientras que en todo 2023 emitió 848 alertas.

    En este contexto, el ente de control le pidió al Ministerio de Igualdad y Equidad «referir cuáles han sido las gestiones de la cartera ministerial para garantizar los derechos de las niñas y mujeres a una vida libre de violencias y en riesgo de feminicidio, compromiso que demanda acciones inmediatas frente al alarmante inicio de año en materia de violencia contra la mujer en el país».

    Por eso, urgió a la ministra de Igualdad y Equidad, la también vicepresidenta colombiana, Francia Márquez, a «informar a la Procuraduría las acciones y el avance de los cumplimientos adquiridos para la prevención y el abordaje de la atención oportuna a las víctimas de feminicidios y la eliminación de todas las formas de violencias contra las niñas, adolescentes y mujeres».

    En situaciones de emergencia para víctimas de violencia machista o para reportar un caso, está disponible en Colombia la línea 155, que funciona las 24 horas bajo reserva y de forma gratuita, donde personal especializado pueda dar información sobre cómo actuar en estos casos, orientación psicosocial y jurídica y dirigir posibles denuncias a la Policía Nacional. EFE

  • “Una niña sin circuncidar no tendrá marido y sufrirá burlas”: las mujeres de Malí que tratan de acabar con la mutilación genital femenina

    “Una niña sin circuncidar no tendrá marido y sufrirá burlas”: las mujeres de Malí que tratan de acabar con la mutilación genital femenina

    “Una niña sin circuncidar tendrá un deseo excesivo y corre el riesgo de perder su virginidad muy pronto. Las niñas que no están circuncidadas son consideradas ‘sucias’, no son limpias según la religión. No tendrán marido, sufrirán burlas, serán una deshonra para su familia”. Así relata Koura Diallo, agricultora de la comuna de Sansankidé (al oeste de Malí), la presión social que existe para someter a las niñas a la mutilación genital femenina (MGF).

    Lo que se esconde tras esta práctica patriarcal son consecuencias nefastas para su salud: dolor, hemorragias, infecciones, fístulas, partos complicados y traumas psicológicos.

    Actualmente no existe ninguna ley en Malí que criminalice específicamente la mutilación genital femenina. La falta de legislación y la presión social hacen que sea muy difícil terminar con esta práctica en este país de 22,5 millones de habitantes, donde casi ocho millones de niñas y mujeres han sido sometidas a este procedimiento. Pero, aun con el riesgo del estigma social, hay mujeres que desafían la tradición.

    La MGF es solo una de las violencias machistas que sufren las mujeres en Malí, y que tienen graves consecuencias para sus vidas, su educación y su autonomía. Dolo Oum Jomele dirige Iamaneh Malí, una asociación que promueve el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos, y también la autonomía económica de las mujeres, desafiando las tradiciones y normas sociales. “Hacemos un trabajo de sensibilización a todos los niveles para acabar con las llamadas ‘prácticas tradicionales nefastas’, que son aquellas costumbres que violan los derechos humanos, especialmente de las mujeres y las niñas. Hablamos de la mutilación genital femenina, pero también del matrimonio infantil, el matrimonio forzado o la violencia doméstica”, cuenta la directora. Iamaneh, con el apoyo de Farmamundi, capacita al personal sanitario de la región de Kayes y mejora las instalaciones de los centros de salud para prevenir y atender las complicaciones de salud derivadas de la mutilación.

    Dolo Oum Jomele, en el centro, directora de la asociación de derechos reproductivos Iamaneh Malí.
    Dolo Oum Jomele, en el centro, directora de la asociación de derechos reproductivos Iamaneh Malí.IAMANEH MALÍ

    Hinda Keita es matrona del Centro de Salud Comunitario de Diema, donde ve cada día los riesgos de parir con MGF, tanto para la madre como para el bebé. Por eso, Keita está muy implicada con la sensibilización a la comunidad. “La gente cree que la mutilación es una obligación prescrita en el Corán, pero no existe ninguna mención. Tratamos de convencer a las mujeres y sus maridos para que no sometan a sus hijas a esta práctica, y evitar muchas muertes innecesarias”, cuenta la matrona.

    El uso de métodos anticonceptivos es otro de los puntos clave de la sensibilización, ya que la falta de planificación familiar también afecta a los derechos de las mujeres: altas tasas de fecundidad, alto riesgo de mortalidad materna y una baja esperanza de vida. Mariame Soucko, del grupo de mujeres de Sansankidé, explica las dificultades que tienen para acceder a la planificación, y que tienen que ver —una vez más— con los roles de género y el machismo. “Muchas mujeres del pueblo tienen a sus maridos en el extranjero. Si su marido no está presente, a la mujer le dará vergüenza pedir información sobre planificación familiar. Y si intentan hablarlo con él, inmediatamente pensará que quieren engañarlo”, explica.

    El resultado de estas acciones empiezan a reflejar un cambio en las mujeres, sobre todo en la libertad a la hora de denunciar las violaciones de derechos de las mujeres, algo que antes era tabú. Existen comités comunitarios contra las “prácticas tradicionales nefastas” y se realizan campañas y talleres en las que participan mujeres y hombres de todas las edades, incluyendo a los líderes locales.

    Las organizaciones que defienden los derechos de las mujeres en Malí inciden en la necesidad de contar con una ley que prohíba la MGF, ya que el cambio legal ayudaría al cambio social. Malí ha ratificado varios pactos internacionales que le compromete a tomar medidas para erradicar la mutilación genital femenina, como el Comité de Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) o el Protocolo de Maputo. Sin embargo, todos los intentos de la sociedad civil por aprobar una ley no han prosperado.

  • Continúa la violencia física y sicológica contra las mujeres: Inegi

    Continúa la violencia física y sicológica contra las mujeres: Inegi

    Entre 2021 y 2022 en México se atendió a 967 mil 920 mujeres por situación de violencia, en donde la mayor cantidad de mujeres se concentró en el grupo de 15 a 44 años, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

    El organismo autónomo presentó este miércoles los resultados del programa estadístico Centros de Justicia para las Mujeres (CJM) 2023. Este programa ofrece datos de los 65 Centros que había en operación al 30 de junio de 2023 en 31 entidades federativas.

    El reporte estimó que los CJM atendieron un millón 361 mil 653 incidentes de violencia, dentro de los más reportados fueron los casos de violencia física, con un tercio de los casos atendidos. Siguieron los incidentes de violencia sicológica (24.9 por ciento). La violencia sexual reportó un ligero repunte de 4.6 por ciento de los incidentes.

    Asimismo, el principal ámbito de ocurrencia fue con la pareja (28.2 por ciento) y el comunitario (15.6 por ciento).

    Las principales personas agresoras de las mujeres atendidas por situación de violencia fueron sus parejas, cónyuge y concubino, seguidas de personas desconocidas.

    En Inegi aclaró que las cifras presentan un nivel alto de dato no especificado. Por este motivo, los datos absolutos, porcentajes y análisis corresponden a la información que especificaron los CJM.

    El área de atención jurídica fue la más reportada por los CJM, con 96.9 por ciento. Siguieron las áreas de atención sicológica, con 95.4 por ciento, y de trabajo social, con 93.8 por ciento.

    La apertura e inicio de operaciones de los CJM en el país ha sido un proceso continuo entre 2011 y 2023. En 2011, los primeros CJM iniciaron operaciones en Campeche, Chiapas y Chihuahua. Los de operación más reciente iniciaron en 2023 y se localizan en Ciudad de México, Quintana Roo, Sinaloa y Sonora. Por la dinámica anterior, las unidades de observación y de análisis son distintas en cada ejercicio de recopilación dirigido a los CJM. No obstante, en todos se ha alcanzado una cobertura completa a nivel nacional y por entidad federativa.

    En cuanto a recursos humanos, al 31 de diciembre de 2022, 98.5 por ciento de las personas titulares de los CJM era mujer; 43.1 por ciento se encontró en el rango de edad de entre 40 y 49 años; seis de cada 10 contó con estudios de maestría o posgrado y las principales áreas de conocimiento fueron violencia contra las mujeres (92.3 por ciento) y género (89.2 por ciento).

    Asimismo, se tiene que 4 mil 52 personas laboraron en los CJM que estaban en operación al 31 de diciembre de 2022. De estas personas, 58.5 por ciento estaba adscrito a los CJM; 27.8 por ciento, asignado/comisionado de parte de instituciones representadas en los CJM, y 13.6 por ciento se catalogó como otro tipo (servicio social o prácticas profesionales). Del personal adscrito y asignado, 80.5 por ciento correspondió a mujeres y 19.5 por ciento a hombres.

  • Mi devoción por la música llegó sola, nunca la planeé: Marcela Rodríguez

    Mi devoción por la música llegó sola, nunca la planeé: Marcela Rodríguez

    Dentro de la cultura de México, la familia Rodríguez es excepcional.

    Desde el teatro El Hábito, Jesusa Rodríguez y Liliana Felipe hicieron una formidable aportación a la cultura y a la crítica política (ellas sí que saben lo que significa la palabra patria, porque la construyen todos los días).

    Marcela Rodríguez, compositora de más de 15 obras, entre óperas, conciertos y sinfonías, esposa del filósofo Carlos Pereda, destaca por su creatividad y su notable aportación a la música, tal como consignaron Javier Álvarez y Mario Lavista.

    Gabriela Rodríguez destaca en el feminismo, tal como consigna La Jornada. En música, Marcela Rodríguez fue una de las primeras en entrar al paraíso y al infierno de la creación al lado de otra compositora: Alicia Urreta.

    Marcela Rodríguez logró por sí sola que el machismo permitiera entrar a las compositoras hasta entonces relegadas.

    Durante cuatro años, Marcela tomó cursos de guitarra clásica con Manuel López Ramos, mientras su hermana Jesusa estudiaba actuación. Las tres hermanas, Jesusa, Marcela y Gabriela, son activistas feministas, y Jesusa resultó indispensable en la campaña de Andrés Manuel López Obrador. Su voz resultó totalmente indispensable en los mítines y las grandes marchas obradoristas, y AMLO debería prenderle una veladora día y noche.

    Solidarias a morir, es obvio que el apoyo que dio Jesusa a AMLO proviene también del apoyo que se dan las hermanas Gabriela, Marcela, Jesusa, esenciales en la cultura no sólo de México, sino de América Latina, ya que han desacatado tanto ante el público latino como en el de Estados Unidos y Europa.

    –Marcela, ¿por qué te dio por la música?

    –Empecé por casualidad. En mi familia, todos tocaban el piano, mi mamá, mis hermanos, y el piano siempre estaba tomado por los mayores; entonces, agarré la guitarra porque no me quedaba otro remedio y me puse a tocar por puro placer, pero a diferencia de otros, ningún maestro me enseñó a leer notas, y aprendí solita, aunque después busqué a un maestro.

    Cuando me di cuenta, ya tenía cinco años tocando guitarra, durante cinco o seis horas diarias. Nunca planeé dedicarme a la música; mi devoción se fue dando sola, y en un abrir y cerrar de ojos, ya era concertista.

    –¿Tu guitarra ya tenía audiencia?

    –Di varios conciertos y me aburrí horrible, porque el repertorio era espantoso, todo mundo tocaba lo mismo, y me harté. Tocaban a Albéniz y cosas horribles. Lo que más me gustaba era la música antigua, como Bach y todos los compositores anteriores a él, pero como que me faltaba algo.

    “En 1975, mi prima me invitó a París, porque me entró como una crisis de no saber qué hacer en la vida; ahí conocí al compositor cubano más famoso, Leo Brouwer, y él me propuso: ‘Voy a dar un curso de composición’. Lo oí en la sala Pleyel, quedé impresionada y me di cuenta de que existía la música moderna. Entonces, me fui a Arles a su curso de composición y ahí descubrí mi creatividad. Regresé de volada a México a estudiar composición. Lo hice solita con Leo Brouwer que se instalaba en casa de mi mamá durante meses; me daba clases, analizábamos las obras de Silvestre Revueltas.”

    –¿Empezaste a componer?

    –Mis primeras obras fueron seis piezas para guitarra. En ese momento, Jesusa estaba con Julio Castillo, que daba las clases de teatro en mi casa, y yo me metía a escucharlo, porque era un hombre brillantísimo. Él me invitó a hacer teatro, porque Jesusa le dijo: Mi hermana acaba de llegar de París y es compositora. Yo todavía no lo era, estaba empezando, y Julio me pidió hacer la música para una obra de teatro en la que Jesusa hacía la escenografía. Yo temblaba de miedo, porque apenas empezaba, pero me lancé. Mi maestra de composición, Antonieta Lozano, me alentó: Claro que puedes, e hice un cuarteto de cuerdas para teatro y me fue superbien. A partir de entonces, me empezaron a llamar para hacer música de teatro, y trabajé con muchos directores. En realidad, el teatro fue mi escuela y mis maestros fueron Julio Castillo y Germán Castillo, y Susana Alexander. Con Jesusa hice Cómo va la noche, Macbeth, y un cuarteto de cuerdas para Ludwik Margulles, que era terrible, pero muy buen director.

    De La sunamita a Séneca

    –Muy regañón. Lo conocí porque era polaco.

    –Conmigo se portó divino, pero trataba a todo mundo con la punta del pie. Pensé: A ver cuándo me toca a mí, pero por suerte no pasó. Mi escuela de composición, aparte de Leo Brouwer, fue el teatro, porque tenía que escribir sobre la marcha, grabar la música y estrenarla. A mis compañeros que estudiaban composición les costaba mucho que alguien interpretara sus obras en esa época. Había pocos compositores y yo tenía la ventaja de que inmediatamente salían mis obras por la presión del teatro.

    “Estuve haciendo mis pininos desde antes de casarme con Carlos Pereda, en 1979. En 1985, compuse música para teatro y en 1988, fuimos a vivir dos años a Alemania con mis hijos de cinco y seis años; ahí escribí una ópera. Compuse para la obra La sunamita, de Inés Arredondo, pero a ella nunca la conocí. Guillermo Sheridan le dijo a Inés: ‘Están escribiendo una ópera de tu novela’, y contestó: ‘Odio la ópera, pero qué bien que me estén cantando’. Sheridan tuvo la idea de que yo hiciera la música de La sunamita. Cuando llegué a Alemania, no había celulares ni correo electrónico, había muchas cosas que quería cambiar al libreto, se lo comenté a Carlos, mi esposo, y él me hizo el libreto. Ahí escribí mi primera obra para chelo solo.

    “Para mí ha sido muy importante esa obra, porque en toda mi música tengo los rasgos de piezas para chelo. También compuse una ópera con Claus Hubert, quien tenía un taller de composición en Friburgo, la cual estrené al regresar a México. Recuerdo que en esa época acompañé con mi guitarra a Chavela Vargas en El Hábito, de Jesusa Rodríguez y Liliana Felipe. Fue mi primera gran obra estrenada en teatro.

    “Hice cuatro óperas. Las cartas de Frida la escribí para mi hija Catalina, actriz y cantante; he escrito mucho para ella. Antes compuse Séneca o todo nos es ajeno, que trata del último día de la vida de Séneca; luego escribí otra ópera para niños, El día que María perdió la voz. Entre ópera y ópera, también escribí mucha obra sinfónica; tengo varios conciertos para instrumentos.”

    –Componer una sinfonía debe ser dificilísimo, porque cada instrumento necesita su partitura.

    –Pues sí, porque escribes para toda la orquesta y luego hay que vaciar cada instrumento. He escrito más de 60 obras. Antes teníamos copistas, entregabas la partitura completa con las maderas, los metales, las percusiones, las cuerdas y el copista vaciaba cada instrumento para que cada uno tuviera sólo su parte, era caro y lento. Ahora hay un programa en la computadora, Sibelius, compongo con él y los instrumentos salen automáticamente, es una maravilla. La tecnología ha avanzado muchísimo, nos ahorra tiempo y dinero. He escrito 10 conciertos para instrumento y orquesta, tengo varios de guitarra y orquesta, dos de flauta y orquesta, dos de piano y orquesta, y uno de chelo y orquesta; terminé uno de clarinete y orquesta, y otro de violín y orquesta

    –Tu música la tocan en todos lados.

    –Para estrenar hay que tocar puertas; siempre estoy atrás del director de la orquesta de Bellas Artes, de la Ofunam, de la Filarmónica de la Ciudad de México. Ahora somos muchísimos compositores, cuando empecé éramos cuatro o cinco: Alicia Urreta, Mario Lavista, Julio Estrada, Javier Álvarez, Federico Ibarra, Joaquín Gutiérrez Heras, y ahora hay 300 compositores jóvenes buenísimos, y han surgido muchas buenas compositoras.

    Cuando empecé, había pocos instrumentistas, aparecieron los nuevos sonidos más rasposos, diferentes; nació la manera de tocar los arcos atrás del puente y chiflar. Cuando empecé, apenas se conocían ruidos más extravagantes. Ahora hay unas técnicas increíbles con instrumentistas que viajan a Holanda y regresan como Horacio Franco, que allá estudió. Él era excepcional, porque ya tocaba como dios. Se fue cuatro o cinco años, y regresó mejor. El nivel instrumental aquí ha cambiado de manera impresionante en los 30 años recientes.

  • La ONU denuncia detenciones masivas de mujeres afganas por incumplir normas de vestimenta

    La ONU denuncia detenciones masivas de mujeres afganas por incumplir normas de vestimenta

    Expertos de Naciones Unidas denunciaron hoy haber recibido informes sobre detenciones arbitrarias de decenas de mujeres y niñas en Afganistán desde principios de enero por supuestamente violar la correcta colocación del velo y el código de vestimenta impuesto por los talibanes.

    En un comunicado, los expertos indicaron que las mujeres fueron arrestadas e introducidas en vehículos policiales por la fuerza en lugares públicos como centros comerciales, escuelas y mercados callejeros de la capital, Kabul, y de las provincias de Bamiyan, Baghlan, Balkh, Daykundi y Kunduz.

    «Esta actual ola de privación de libertad restringe aún más las ya severamente limitadas libertades de expresión y circulación de mujeres y niñas en el país y viola sus derechos humanos», subrayaron los expertos, entre ellos el relator de la ONU para Afganistán, Richard Bennett, y su homóloga sobre la violencia contra mujeres y niñas, Reem Alsalem.

    Según los informes recibidos, las detenidas fueron recluidas en espacios hacinados en las comisarías y solo recibían una comida al día, siendo algunas objeto de violencia física, amenazas e intimidación.

    Los especialistas señalaron que, si bien algunas fueron liberadas después de unas horas, otras habían estado detenidas durante días o semanas; debido a la falta de transparencia y acceso a la justicia, no se sabe con exactitud cuántas siguen aún detenidas.

    Ante esta situación, instaron a las autoridades de facto a liberar «de forma inmediata» a las mujeres y niñas que aún puedan estar recluidas, así como a cesar toda privación arbitraria de libertad contra ellas basada en el estricto código de vestimenta impuesto.

    También criticaron que la liberación de las mujeres y niñas dependía de que los miembros varones de la familia y los ancianos de la comunidad dieran garantías, a menudo por escrito, de que en el futuro cumplirían el código de vestimenta prescrito.

    «Además de castigar a las mujeres por su vestimenta, asignar responsabilidad por lo que visten a los hombres viola la independencia femenina, perpetúa un sistema institucionalizado de discriminación y control y disminuye aún más su lugar en la sociedad», dijeron los expertos.

  • Mujeres se perfilan como ganadoras en las principales categorías de los Grammy

    Mujeres se perfilan como ganadoras en las principales categorías de los Grammy

    Músicos y críticos han acusado a los votantes de los premios Grammy por ignorar el trabajo de las mujeres, pero en la edición de este año es altamente probable que sean ellas las que se lleven los mayores premios de la noche.

    En la gala del domingo, siete de los ocho postulados al álbum y disco del año son mujeres o personas de género fluido, entre las cuales están Taylor Swift, SZA y Olivia Rodrigo.

    Las artistas del pop pasaron de dominar las alfombras rojas a dominar completamente los Grammys, afirmó Kristin Lieb, quien investiga la relación entre la mercadotecnia del entretenimiento, la música y el género.

    Es un cambio significativo, dijo a Afp. El enfoque es más sobre su talento y carisma que en torno a sus cuerpos y atuendos.

    Swift, SZA y Rodrigo compiten por el gramófono al álbum y disco del año junto a Miley Cyrus, el grupo indie Boygenius y Lana Del Rey.

    Janelle Monae completa la categoría de mejor álbum, mientras Billie Eilish y la estrella en ascenso Victoria Monet son las otras candidatas para disco del año.

    La única representación masculina disputando los dos codiciados premios es Jon Batiste, el astro del jazz que arrasó en la premiación hace dos años.

    Es un cambio drástico desde el punto de vista estadístico.

    En 2018, el entonces presidente de la Academia de la Grabación, Neil Portnow (a quien una artista acusó el año pasado de violación), señaló que las mujeres que buscaran reconocimiento en la industria tenían que dar un paso adelante. Creo que serían bienvenidas, agregó Portnow.

    Pero los números difieren. Entre 2012 y 2022, 86 por ciento de los candidatos en las principales categorías de los Grammy fueron hombres, de acuerdo con el grupo de expertos de Annenberg Inclusion Initiative.

    Ya en la ceremonia de 2023, aunque los hombres continuaron dominando las categorías que premian el álbum y el disco del año, la mitad de los candidatos a mejor artista revelación, categoría que reconoce a los talentos emergentes, eran mujeres, al igual que un tercio de los aspirantes a la canción del año.

    Sin embaro, el año pasado soplaron vientos de cambio, con marcas históricas para las mujeres de color en las carteleras Billboard, de acuerdo con el más reciente estudio de Annenberg.

    Las mujeres tenían muy buena música, sostuvo el actual presidente de la Academia, Harvey Mason Jr, en noviembre tras las postulaciones para la 66 edición de la premiación. Eso, obviamente, conmovió a nuestros votantes.

    Muchas de las nominadas tienen años de carrera y forman parte de un diverso espectro de géneros y estilos, en un mundo que tradicionalmente agrupa a la mayoría de las artistas femeninas bajo el paraguas del pop.

    Si una mujer vende lo suficiente, medio que perderá su género original y pasará a ser una estrella del pop sin importar su contexto, declaró Lieb.

    En general, la forma en que el pop se interpreta es como un sinónimo de algo artificial y fugaz.

    En contraste, agregó Lieb, un artista masculino será construido como un artista genuino, auténtico y talentoso.

    Ese encuadre sirve, además, para disminuir el talento y el éxito de las mujeres que están enfocadas en el pop, categoría que es percibida con frecuencia como poco seria.

    Lieb se muestra optimista ante el cambio que se está produciendo, tanto en la industria como en la crítica y el mundo académico. La música pop puede ser arte y merecer un debate serio. Puede ser digna de reflexión, opinó.

    Aunque el cambio en la correlación de géneros es bienvenido, la académica Christine Wisch espera que la industria se incline más a un punto en el que podamos realmente observar el arte por sí mismo, y menos basado en ciertas identidades.

    Wisch, musicóloga de formación clásica, da clases en la Universidad de Indiana.

  • Mujeres universitarias migrantes enfrentan adversidades sin dejar de ser cuidadoras

    Mujeres universitarias migrantes enfrentan adversidades sin dejar de ser cuidadoras

    En la actualidad contar con estudios universitarios no siempre representa una garantía para que las mujeres se desarrollen plenamente en ámbito profesional y personal, pues muchas de ellas deben migrar para ampliar su campo de estudio en instituciones que ofrezcan el área de conocimiento que buscan o porque la dinámica de su empleo lo exige en otro sitio.

    A esto se suma que su actividad como cuidadoras de familia, tarea que realizan infinidad de mujeres a la par del ejercicio de su profesión, se intensifica porque tienen que estar al pendiente del hogar que dejan en su lugar de origen.

    Por ello, la migración femenina en Latinoamérica es un fenómeno de frontera ligado a la división social y económica que expone una explotación de género específico de la fuerza del trabajo femenino, esto de acuerdo con el primer egresado del Posgrado en Estudios de Género de la UNAMDavid Arturo Sánchez Garduño.

    También el psicólogo Sánchez Garduño, mediante un estudio cualitativo-exploratorio, en el cual recopiló la experiencia de 21 mujeres migrantes de Centroamérica, Sudamérica y Cuba, constató la intensidad del trabajo y cuidados familiares en el contexto de flujos migratorios.

    “Esta migración proviene de países de destino, ya sea a fin de continuar su enseñanza de posgrado, malas condiciones para desempeñarse en lo laboral, así como buscar una buena remuneración acorde con su grado de preparación”.

    —  David Arturo Sánchez Garduño.

    Asimismo, externó que dicho flujo migratorio se entiende como un desplazamiento voluntario, bajo razones de crecimiento personal, académico y profesional, pero con frecuencia las mujeres se encuentran numerosas dificultades que impiden su desarrollo.

    Entre esas numerosas dificultades, Sánchez Garduño encontró con sus investigaciones, que se deben a que migrantes siguen desempeñando una labor intensiva de cuidado desde las naciones de destino.

    “Son madres que además de ser las principales responsables del cuidado de sus familias en México, también garantizan un aporte económico a su padre, madre, hermanas, nietas, en otras latitudes”.

    —  David Arturo Sánchez Garduño.

    Por último, sostuvo que, “la carga de trabajo de cuidados opera de modo diferencial entre hombres y mujeres a lo largo del curso de la vida y a través de diversos marcadores sociales como género, lugar de origen y nivel educativo”.