Blog

  • Estudio revela que mayoría de embarazos en México de niñas de 10 a 14 años es por violación

    La mayoría de los embarazos que se presentan en niñas de 10 a 14 años en México es por casos de violación, reveló la organización internacional Ipas en su estudio “Violencia Sexual y embarazo infantil en México: un problema de salud pública y derechos humanos”.

    De acuerdo con la investigación, en el Estado de México, donde en 2017 se registraron 763 embarazos en niñas de entre 10 y 14 años, el 41% de las mamás declararon que el hombre las había forzado a tener relaciones, y que tenía entre 18 y 54 años de edad.

    “Cuando hablamos de embarazo infantil no debemos olvidar que se trata de niñas que están siendo obligadas a tener relaciones sexuales mediante el uso de la fuerza, física, moral, del chantaje, de amenazas con las que las obligan a tener relaciones para no violentar a sus mamás o a sus hermanos”, dijo la coordinadora de política y abogacía de Ipas México, Fernanda Díaz de León.

    De acuerdo con la organización, las principales causas para explicar esto son la falta de acceso a la justicia y la normalización de las agresiones contra mujeres, lo que ha provocado un aumento exponencial en la violencia sexual hacia las mujeres, pero no se investiga.

    “El cruce de datos explica que la razón de no consignar la edad del responsable es porque el embarazo fue consecuencia de una agresión o no se quiere dar evidencia de la persona que pudo ser culpable. Estas niñas aparecen en las actas de registro civil como madres solteras, como las únicas responsables del niño o la niña”, explicó Díaz de León.

    Por último, la organización Ipas también reveló que el Estado de México, Jalisco y Chiapas son los estados que lideran los índices de embarazos infantiles.

    Toda la información e imágenes son de Reporte índigo.
    Link original: https://www.reporteindigo.com

  • Esto es lo que muchas mujeres hubieran deseado que hicieran los demás cuando se sintieron acosadas

    Recibimos multitud de respuestas y, aunque por motivos de reiteración no hemos incluido todas, precisamente esta repetición es digna de mención.

    Las mujeres que nos han respondido se quejan principalmente de la normalización y naturalización que determinados tipos de acoso (en el transporte público, en el instituto, en la discoteca) tienen en nuestra sociedad. Esta normalización de acciones que son acoso provocan que nadie suela tomar la iniciativa o haga algo para frenar la situación. La mayoría de nuestras lectoras han descrito que esta inacción de las personas a su alrededor siempre ha provocado que se sientan terriblemente solas. Lo que les hubiera gustado a todas y cada una de las mujeres que respondieron a nuestro cuestionario fue que alguien interviniese en su favor en una situación de acoso. Numerosas respuestas también muestran cómo es mucho más probable que otras mujeres intervengan por razones de empatía antes que cualquier hombre.

    Otra de las quejas que más se ha repetido por parte de nuestras lectoras es que, cuando ellas han tomado finalmente acción frente a un acosador, este se haya victimizado y buscado apoyos a su alrededor y que, al final, sean ellas quienes sean juzgadas por «armar escándalos» en público o tachadas de exageradas al narrar sus experiencias. Y, por último, otra de las quejas más repetidas es la forma en que la sociedad, a posteriori, le quita hierro a este tipo de comportamientos abusivos con las mujeres calificándolos de «broma», de «tontería» o de «cosas que pasan».

    Estas son algunas de las respuestas.

    1.

    «Hubiera deseado ayuda durante el acoso. Y después apoyo. Que no se tratase como algo normal que debo ‘dejar pasar’. En el caso del instituto, que no lo hubieran tratado como cosas de niños. Bromitas y nada más. Para mí esos tocamientos no eran ninguna broma».

    Ana.

    2.

    «Acercarse y hacer acto de presencia para que quien me estaba molestando viera, o al menos pensara, que no estaba sola».

    Afri.

    3.

    «Me gustaría que el acoso se tomase con la seriedad que merece. Yo me siento intimidada e incómoda. Más de una vez he tenido que discutir (con hombres) el hecho de que me haga sentir de esa forma que se me griten cosas por la calle. Ya no sé si es cuestión de tomárselo con seriedad o tener cierta empatía, la cuestión es que en muchos casos te sientes sola y ya no solo en tu círculo sino en la calle, cuando ven que estas siendo acosada y la gente solo mira. Me gustaría que se tomase una actitud más activa a través de la cual te puedas sentir en cierto modo protegida».

    M.

    4.

    «Me hubiera gustado que alguien hiciese ver a la persona que me estaba acosando que ese tipo de comportamiento no está bien, no hay que normalizarlo. Que se condenara públicamente eso, porque nadie tiene por qué aguantar el acoso».

    Lorena.

    5.

    «Normalmente, la gente desconocida no hace nada. Y mucho menos si es un caso que no llama mucho la atención, lo ignoran o no le dan importancia porque es algo que se asume como normal.

    Pero sí que es verdad que las chicas nos respaldamos más con estas cosas. Por ejemplo, con el típico pesado de la discoteca, si vemos que no se está quieto o retiramos a la chica de ahí o nos cambiamos de sitio.

    Yo una vez estaba comprando en el supermercado y un señor mayor se puso a perseguirme. La cajera vino y se puso a colocar cosas donde yo estaba. Al principio no me di cuenta de que lo había hecho por eso, pero luego hablando con ella me explicó que lo hace con más chicas y por eso me echó un vistazo para que no me hiciera nada. Pocas veces los chicos hacen ese tipo de cosas, si son amigos míos sí suelen hacerlo, pero si no les da un poco igual, y bueno, supongo a veces ellos no captan esas cosas o no tienen empatía la misma empatía, pero deberían empezar a hacerlo: les puede pasar a alguien que ellos conocen o incluso a ellos mismos».

    Celia.

    6.

    «Actuar. Siempre actuar. Decir algo. Parar a ese o esos que me gritan o me intentan tocar. Nadie nunca hace nada. Ni amigos, ni parejas. Y cuando lo cuentas minimizan la situación, no dan importancia o te tratan de exagerada o loca».

    Ratita.

    7.

    «Que no ignoren la situación, que no es un hombre cortejando, es un hombre (o varios) intimidando. No hace falta mucho, solo acercarse y alejar a la persona de los acosadores y preguntar como está y si necesita algo».

    Anna.

    8.

    «Reaccionar. Que no hubieran hecho como si no pasara nada o como si fuera una broma».

    Eva.

    9.

    «Me hubiese gustado que no le riesen su acción ya que así aprendería que no hace gracia a nadie. Y que, además, se hubiesen disculpado por el comportamiento de su amigo. Me parece algo tan básico que suena ridículo pero al mismo tiempo es tan difícil de que lo comprendan».

    Sara.

    10.

    «Reprochar BIEN ALTO el hecho o actitud delante todo el mundo».

    Koukla.

    11.

    «Me hubiera gustado que me creyesen sin ‘peros’ y sin cuestionarme el porqué me podría haber pasado eso. También que no pensasen que podía habérmelo buscado; eso duele».

    Len.

    12.

    «Ayudarme a que el acosador me dejara tranquila para no sentirme sola y con miedo».

    Laura Lecuna.

    13.

    «Que no me juzgaran con la mirada. Alguna vez, incluso en pleno 2018, me rebelo contra un tío que me acosa o me agrede y a la que miran mal es a mí por montar escándalo».

    Carla.

    14.

    «Me hubiese gustado que actuaran para ayudarme. No tengo porque sentirme incómoda cuando voy sola por la calle o en transporte público, pero en ese momento no solo me sentí incómoda sino que también me sentía sola, porque a pesar de que había más personas alrededor que se daban cuenta de la situación nadie hizo nada y cuando plante cara a mi acosador me dejaron por loca, ya que había gritado lo que ese señor hacía y no me había mantenido callada».

    María.

    15.

    «Ayudarme al ver que yo me quedaba en blanco y con cara de miedo en vez de ignorar por completo la situación».

    Vir.

    16.

    «Estando de fiesta, unos chicos que acababa de conocer querían algo conmigo, a lo que me negué. Me acorralaron entre los tres junto a un muro y uno de ellos me tocó un pecho. Estábamos rodeados de gente. Le dije a mi grupo lo que había pasado. Me gustaría que no se lo hubieran tomado a broma sino como un asunto serio, pero todo el mundo se rió en lugar de reprochárselo o echarles la bronca. Alguien debería haberles hecho mostrame respeto o disculparse, ya que a mí no me hicieron caso».

    Aquario.

    17.

    «Que mis amigas no hubiesen disfrazado de coqueteo y fichas lo que yo sentía como acoso. Y no me hubiesen dejado sola con ese chico».

    BiCosmica.

    18.

    «Me habría gustado que la gente, en vez de hacerse la sorda, hubiera intervenido la segunda vez que me negué a darle el teléfono».

    Megara.

    19.

    «Plantar cara cuando dije a mi agresor que no por quinta vez delante de todo el mundo, o sacarme de allí con excusa de ir al baño, o llamar a la policía. No hay que hacerse el valiente, solo buscar soluciones».

    Trastinka.

    20.

    «Creerme. Eso lo primero. Porque me sentí muy sola cuando no lo hicieron, cuando yo era la mala y el pobre chico solo estaba enamoradito de mí.

    Si la situación ocurre en público y estás viendo que la otra persona lo está pasando mal: 1. Preguntar ‘¿estás bien? ¿Necesitas algo?’ 2. Decir algo a la persona que la está acosando: para, déjala en paz (sobre todo si gozas del privilegio de ser un hombre, porque te van a echar más cuenta, se van a ver más intimidados)».

    Pregnenolona.

    21.

    «Un día al salir del trabajo a las ocho de la tarde empezó a seguirme un tipo diciéndome que me iba a violar y llamarme ‘puta’. Me crucé con mucha gente, nadie hizo nada a pesar de que yo tenía 18 años y se notaba. Llegué a casa y cerré el portal lo más deprisa que pude. El tío se quedó en la calle. Yo subí a oscuras por las escaleras y entré sin encender ninguna luz en casa por miedo a que supiera dónde vivía exactamente. Llamé a mis padres para contarles lo sucedido. Estaba acojonada. Mi padre llegó a casa en cinco minutos con la intención de plantarle cara al cabrón que me seguía. Ojalá todos reaccionaran así y no tener que ir con miedo por la calle ni andar escondiéndonos».

    Lili.

    22.

    «Que le hubieran recriminado qué narices estaba haciendo y que me hubieran preguntado a mí que tal estaba, si necesitaba algo o si quería denunciar. Y que se hubieran ofrecido a ayudarme para que lo denunciara si yo quería».

    Celia.

    23.

    «Cuando tenía once años iba caminando con mi mamá, llevaba uniforme de escuela y un viejo que venía detrás mío me agarró una nalga y aceleró el paso. Lo único que yo llevaba en la mano era una sombrilla. Se la reventé en la cabeza y le dije ‘viejo hijueputa’. El tipo se volvió agresivamente hacia mí como para pegarme. Yo ya le iba a dar otro sombrillazo cuando un vendedor de frutas que tenía su puesto en la acera lo increpó. Le dijo algo así como ‘¿le vas a pegar a una niña? Si yo vi lo que hiciste’. El tipo lo negó, pero cuando la gente empezó a rodearlo se fue rápidamente.

    Cuento el caso porque ese es el tipo de actitud que me gustaría ver ante ataques sexuales: que las víctimas se defiendan y que quienes están a su alrededor las apoyen».

    Emma.

    24.

    «Acercarse a mí y alejarme de mi acosador».

    HormingAtómica.

    25.

    «Me hubiera gustado que otros a mi alrededor hubieran apoyado mi rechazo y sacado la cara por mi. A veces te sientes sola en este tipo de situaciones y piensas que igual estás exagerando o malentendiendo algo, pero no es así. Si te lo preguntas es que llevas razón».

    Tuilla.

    26.

    «Avergonzar al tipo. Ponerse a mi lado. Tomar partido por mí».

    Raquel.

    27.

    «Que alguien le hubiera dicho al acosador que ese comportamiento está mal, preferiblemente alguno de sus amigos o alguien a quien él considere su igual».

    holgamaria.

    28.

    «Ya ni pido que le digan nada al acosador, solo con venir a preguntar si estoy bien o hacer ver que me conocen para alejarme del acosador disimuladamente me conformo».

    Ariadna.

    29.

    «Ojalá me hubiesen escuchado. Me hubiese gustado que no pensasen que los acosadores eran solamente unos locos. Nunca se le ha dado mayor transcendencia a las situaciones de acoso que he sufrido porque ‘no fueron a más’».

    Laura.

    30.

    «Me hubiese gustado que juzgasen al agresor en vez de a mí».

    pirpal.

    31.

    «Solamente que se acercara alguien a preguntarme si estaba bien o si podía ayudarme en algo me hubiera bastado. Saber que hay alguien al lado si las cosas se ponen más feas y que entienden que es un mal momento para nosotras cambia mucho la situación, al mismo tiempo que nos fortalece frente al acosador».

    Paula.

    32.

    «Cuando iba a segundo de la ESO un compañero de instituto comenzó a mandarme mensajes por WhatsApp sin yo haberle dado mi número. Era un compañero con el que nunca había hablado y al principio le seguía el rollo, pero con el paso del tiempo se puso muy pesado (no paraba de mandarme mensajes, de decirme de quedar, de preguntarme si quería tener novio o si tenía…) y yo le dije que me dejaste en paz, pero no lo hizo. Yo me sentía acosada, era tener un mensaje suyo cada 15 minutos. Se lo conté a quienes creía que eran mis amigas, pero ellas se reían y le quitaban importancia. Me hubiese gustado que mis amigas me apoyasen porque yo me sentía muy incómoda en esa situación y ellas solo alimentaban ese malestar tachando los actos de este chico de ‘románticos’. El chico siguió escribiéndome durante dos años hasta que conseguí cortar toda relación. Ninguna amiga que conocía la situación me apoyó».

    Anne.

    33.

    «Escucharme, reaccionar y no decir que exagero cuando me siento asqueada, odiando mi propio cuerpo, odiando ser mujer».

    Cam.

    34.

    «Mi ex novio me estuvo acosando durante un año, en persona y en redes sociales. Lo que más eché de menos fue encontrar a alguien que no me cuestionase y, simplemente sin hacer preguntas, intentase ayudarme. Sé que a veces es muy dificil ayudar sin saber los motivos, pero preguntar para cuestionar si de verdad está pasándote lo que tú misma estás viviendo o si estás exagerando solo te hace dudar si de verdad las cosas son así».

    Elisa.

    35.

    «Me hubiera gustado recibir apoyo en ese momento, personas que cuestionaran la actitud de esa persona. O si no se cuestiona porque no se conoce la situación completa, algún tipo de apoyo después: simplemente el preguntar sobre la situación vivida da pie a expresarlo, a tomar conciencia del problema y de las posibles soluciones».

    Iris.

    36.

    «Meterse y ayudarme. No quedarse indiferentes».

    Roro.

    37.

    «En situaciones de acoso en espacios públicos, como un autobús por ejemplo, me hubiera gustado sentirme apoyada, que la gente recriminase ese tipo de comportamiento y no solo la persona que lo sufre. El silencio te hace cómplice».

    Ana.

    38.

    «Que le plantasen cara, le llamasen la atención y eso hiciera que se sintiera fatal con lo que estaban haciendo. Y a ver si, con suerte, sirviese para que no lo volviese a hacer jamás con ninguna otra mujer».

    Irene.

    39.

    «Intervenir de alguna forma, ya fuera diciéndole que me dejara en paz a quien me acosaba, hablándome y excluyéndolo hasta que se fuera, o llevandome a otro sitio para apartarme de él».

    Sar.

    40.

    «Me hubiera gustado que en vez de mirar y hacer como si nada, hicieran algo, aunque solo fuera decirle que me dejara en paz. Me hubiera gustado que no me hubieran llamado exagerada después de ver lo que estaba pasando. Me hubiera gustado que no me defendieran solo mujeres porque se sentían identificadas conmigo, sino que me hubieran ayudado también hombres porque entienden que es una situación intolerable.

    Creo que no es nada fácil ni sencillo de conseguir pero también creo que somos muchas y somos fuertes, no estamos solas, no lo vamos a estar y si los señoros no son capaces de ver que es lo que pasa, la sororidad va a ser nuestra mejor arma».

    Karmele.

    Toda la información e imágenes son de buzzfeed.
    Link original:  https://www.buzzfeed.com

  • Código Violeta: llaveros de la CDMX para prevenir la violencia contra las mujeres

    Código Violeta: llaveros de la CDMX para prevenir la violencia contra las mujeres

    Los dispositivos, de acuerdo con Noticieros Televisa, tienen forma rectangular y serán recargables vía USB. Cada uno tiene un costo aproximado de 10 mil pesos. Sin embargo, serán gratuitos para las mujeres capitalinas a quienes se les repartirá: la PGJ-CDMX tiene identificadas a 128 mujeres en situación de riesgo, que serán las primeras en recibir el llavero geolocalizador y recibir capacitación para su uso.

    Sin embargo, en Twitter, el C5 informó que se distribuirán 1,000 dispositivos.

    La subprocuradora de Atención a Víctimas del Delito y Servicios a la Comunidad, Nelly Montealegre, señaló que aún no hay fecha específica para que inicie su operación:

    “Si no garantizamos que funcione como debe de ser podemos ponerlas incluso en una situación de mayor riesgo, entonces la gran responsabilidad es hacer una entrega de algo que funciona óptimamente“, dijo.

    Montealegre también aclaró que los llaveros no serán mostrados antes de su entrega a las mujeres que los portarán para no colocarlas en una situación de riesgo frente a sus agresores. En el programa, además, participan la SSC, DIF, SEDESA, SIBISO, SECGOB y C5.

    La iniciativa ha sido comparada con los silbatos de Mancera, que fueron criticados por colocar la responsabilidad en las mujeres que los portan y no en sus agresores y porque no se repartieron suficientes para cubrir a la población de mujeres susceptible de sufrir acoso y abuso sexual en el Metro de la Ciudad de México. ¿Estará la repartición de llaveros acompañada de estrategias enfocadas en prevenir la violencia contra las mujeres desde su origen?

    Toda la información e imágenes son de PLUMAS ATÓMICAS.
    Link original: https://plumasatomicas.com 

  • La primera mujer que se convierte en mejor sumiller de Francia

    La francesa Pascaline Lepeltier, con 38 años, ha sido nombrada como “Personalidad del año” 2019 por la Revue du Vin de France (RVF). “Es fantástico que esta prestigiosa revista te otorgue este reconocimiento, a mí que solo soy una modesta camarera”, dijo a France Presse.

    Lepeltier, que vive en Nueva York, es una apasionada de los vinos ecológicos y biodinámicos. “He aceptado el premio porque me considero un símbolo en la necesidad de pensar en lo que bebemos y comemos. Tenemos que mentalizarnos sobre la importancia de transformar la agricultura y dejar de estropear el suelo y la naturaleza”.

    Lepeltier es una apasionada de los vinos ecológicos y biodinámicos

    Graduada en Filosofía, comenzó en este sector desde abajo hasta convertirse en una profesional, y espera que su galardón sirva para mostrar a los jóvenes que se puede “tener un trabajo fascinante en el mundo del vino que te permita vivir de tus sueños”. Lepeltier ha logrado un doblete histórico a finales de 2018: es la primera mujer laureada de la clase de sommelier de la competencia de los mejores trabajadores de Francia (Meilleures Ouvriers de France) y también ganó el título de mejor sumiller de Francia.

    Nacida y criada en Angers, cuna de los vinos del Loira, practica su arte en el restaurante gastronómico neoyoriquino Racine -en el barrio de Tribeca— donde capitanea una bodega de 2.500 referencias “de las cuales el 80% se cultiva de manera biodinámica”. “En un sector agrícola en crecimiento y con un impacto en la salud, debemos comprometernos a ser extremadamente atentos a la selección de lo que ofrecemos para la degustación”, dice la joven, muy concienciada ante el problema de “la comida basura y la mala bebida”. Denuncia los vinos con “muchos aditivos” y presume de presentar a sus clientes “vinos alta calidad hechos con técnicas naturales, porque el cuerpo los absorbe mejor”. “Los vinos es el único producto agroalimentario sin obligación legal de indicar sus ingredientes”, señala.

    Su pasión por este tipo de vinos surgió en 2005, después de una cata en Château d’Yquem y desde entonces decidió “hacer una carrera en el vino”. “Soy de una generación que desea recuperar el gusto surgido de una agricultura viva”, dice, y destaca que está encantada de que cada vez más fincas vitícolas se enfoquen en el cultivo ecológico y biodinámico.

    Toda la información e imágenes son de LA VANGUARDIA.
    Link original: https://www.lavanguardia.com

  • ‘Nudo mixteco’: Una película sobre la sexualidad de las mujeres indígenas

    ‘Nudo mixteco’: Una película sobre la sexualidad de las mujeres indígenas

    La presencia mediática de Yalitza Aparicio, protagonista de Roma de Alfonso Cuarón, puso en el mapa a su lugar de origen, Tlaxiaco, Oaxaca. Sin embargo, este municipio ya había enviado a la pantalla nacional a la talentosa actriz y cineasta Ángeles Cruz, quien actualmente prepara su primer largometraje, Nudo mixteco, una película sobre la sexualidad de las mujeres indígenasde las comunidades cercanas.

    “Soy de una comunidad que se llama Villa Guadalupe Victoria en San Miguel el Grande, Tlaxiaco, Oaxaca”, dice en entrevista Ángeles Cruz (La tiricia) en las oficinas de Madrecine, casa que producirá Nudo mixteco. Con esta cinta, Cruz pretende contar las historias de las mujeres del lugar en el que creció y del que tuvo que irse por falta de oportunidades académicas.

    “Nos vemos forzadas a salir por diferentes causas: por buscar estudios o trabajo, mejores condiciones de vida”, explica la actriz. A su regreso a las comunidades, encuentran la vida cambiada y sienten que dejan de pertenecer. “Me interesaba mucho tocar el tema de la sexualidad de las mujeres en nuestras comunidades y cómo lo vivimos ahora en la época contemporánea”.

    Ángeles Cruz no quiere quedarse en el cliché de ignorar qué sucede al interior de pueblos como ese, sino que quiere explorar “qué está pasando con nosotras, mujeres indígenas en este mundo de muchos cambios, de las realidades de las ciudades y de las realidades de nuestras comunidades”.

    La posibilidad de mirar desde adentro historias como las que quiere llevar Ángeles Cruz a la pantalla es una de las fortalezas de este proyecto, de acuerdo con Lucía Carreras, productora de Nudo mixteco. “Una de las cosas que me parece increíble es que nuestra directora es de adentro de lo que está hablando. Eso vuelve al discurso más contemporáneo y menos estampa”, dice la cineasta, que se involucró con esta película después de trabajar con Ángeles Cruz en Tamara y la catarina (2016), por la que Cruz fue nominada al Ariel como Mejor Actriz en 2018.

    Aunque su película tocará temas sensibles y fundamentales para la comprensión del México contemporáneo, Ángeles Cruz no filma con la intención de predicar ni hacer proselitismo. “No me interesa hacer un panfleto, me interesa hacer una película y desde ahí me interesa contar las historias”, dice. “Quiero contar eso que sé y que vivo como parte de la comunidad: tener que salir para trabajar, regresar, estar, no estar, preguntarse qué es el éxito, cómo te imaginas el éxito fuera de tu comunidad y cómo te topas con la realidad cuando regresas”.

    Si bien todavía no conocemos la trama, Ángeles Cruz deja ver que se tratará de una historia cercana a su corazón. “La mirada de Nudo mixteco cuenta quién soy yo, quién es mi madre, quién fue mi abuela, quiénes fueron mis tatarabuelas, y ese conjunto me engloba”, cuenta. “Ahí está Nudo mixteco, engloba lo que soy, lo que seré y lo que fui”.

    Madrecine: Películas para la diversidad
    Nudo mixteco contará con apoyo del Estímulo Fiscal a Proyectos de Inversión en la Producción y Distribución Cinematográfica Nacional (EFICINE) y del Fondo para la Producción Cinematográfica de Calidad (FOPROCINE). “Nos aventamos a bajar fondos y si no los conseguíamos, haríamos una película completamente guerrillera pero siempre respetando los temas que nos interesan, que Nudo mixteco los aborda todos”, cuenta Lucía Carreras.

    Toda la información e imágenes son de México.
    Link original: https://www.mexico.com

  • 4 caricaturas de los 90 que fueron feministas y no te diste cuenta

    4 caricaturas de los 90 que fueron feministas y no te diste cuenta

    Si creciste en los años noventa parece natural que sientas nostalgia y cariño por las series animadas de esa época.

    Ahora que eres adulto y las vuelves a mirar puede que sientas aún más aprecio por ellas.

    Y es que, revisitando algunas caricaturas del pasado, podrás descubrir que muchas de ellas tienen brillantes momentos feministas.

    Es hermoso porque no todos los niños de los noventa tuvimos la fortuna de crecer en un hogar o una sociedad que creyera en la equidad de género.

    Es por eso que estas caricaturas se vuelven relevantes, porque sin saberlo pudieron haber influido en nosotros para bien.
    Tips to better develop the exercises | fitness guide how many sets of abs per week exercises to improve your running technique. part ii | running, fitness, sneakers and lifestyle blog | runnics
    Estas cuatro caricaturas con momentos feministas te demostrarán que las series de esa época no fueron una mala influencia.

    1. Recreo
    Tenemos que hablar de lo avanzada que era la señorita Grotke, maestra de los niños de cuarto grado en Recreo, para su época.

    Ella simplemente era genial porque no tenía empacho en señalar cómo la escritura de la historia universal ignoró a las mujeres.

    “Toma con cuidado estos libros de historia, ya que se centran principalmente en hombres blancos occidentales”, dijo en una de sus clases.

    También lo fue cuando le explicó a sus alumnos que puedes elegir cómo cuidar tu cuerpo, sin que eso se ajuste a los estándares de belleza occidentales, y mostró que no se depilaba las piernas.

    Y qué me dices del día en que recordó que Amelia Earhart fue un icono feminista.

    “En 1932, Amelia Earhart voló a través del atlántico convirtiéndose en un modelo abierto de feminismo”.

    2. Johnny Bravo
    Aunque nos cueste creerlo y aunque el personaje sea tonto. Johnny Bravo nos dio mucho qué pensar sobre feminismo. Desde la infancia lo vimos fracasar en el amor con su machismo explícito. Entonces, nunca fue un modelo a seguir para nadie.

    El punto culminante fue el episodio en el que Johnny se convierte en Jenny, una mujer, y experimenta cómo las mujeres son acosadas al caminar en la calle y cómo los comentarios sexistas nunca cesan. Luego aparecen chicas defendiéndose de los hombres y aparece esta frase:

    “¿De esto se trata ser mujer? Estos idiotas creen que porque somos hermosas tienen permiso de ser insoportables».

    3. Las chicas Súperpoderosas
    Mucho antes de que Marvel y DC decidieran por fin llevar a la pantalla grande historias de mujeres superheroínas, aparecieron Bombón, Burbuja y Bellota en la televisión para demostrarnos que las niñas podíamos patear traseros.

    También tenían diálogos inteligentes como este:

    Burbuja: ¡Wow! ¡Mira todas esas pesas! Apuesto que nuestro nuevo vecino es fuerte y muy varonil.

    Bombón: ¡Burbuja! Las mujeres también levantan pesas. Apuesto a que ella es probablemente una fisicoculturista muy inteligente.

    https://youtu.be/0fBegtTDCQU

    4. Hey Arnold
    El feminismo en esta serie tiene nombre y apellido: Helga Pataki. Y es que, a pesar de estar enamorada de Arnold, Helga nunca dejó que su “amor” opacara sus otras metas.

    Para muestra, un episodio en el que Helga sueña con casarse con Arnold, pero eso no es todo. En su luna de miel imaginaria, Helga lee el periódico y lo que aparece ahí no le gusta nada, así que decide postularse a la presidencia de su país.

    Arnold se muestra muy feliz con la decisión de Helga, la apoya y le dice que se sentiría muy honrado de ser su esposo cuando ella sea presidenta.

    Una vez que Helga asume el cargo de presidenta de Estados Unidos, unos villanos secuestran a Arnold y ella tiene que salvarlo.

    Toda la información e imágenes son de México.
    Link original:  https://www.mexico.com

     

  • Las fotos de las mujeres que el reino saudita autorizó, con restricciones, a ver la final de la Supercopa italiana en el estadio

    Las fotos de las mujeres que el reino saudita autorizó, con restricciones, a ver la final de la Supercopa italiana en el estadio

    El entusiasmo por el anuncio de una final italiana en territorio saudita fue pronto oscurecido con la revelación de que solo una parte de las plazas serían accesibles para las mujeres, las de la categoría «familias», mientras que el resto estaban reservadas para los hombres.

    Pese a las restricciones, algunas estimaciones arriesgaron que unas 15.000 mujeres entraron al Estadio del Rey Abdulá (con capacidad para 62.000 espectadores), acompañadas por hombres o por niños.

    Con las caras pintadas y con banderas y bufandas de los dos equipos participantes (Juventus y Milan), disfrutaron del fútbol y el gol de Cristiano Ronaldo, con el que la Juventus conquistó el título, hechos que pueden haber servido para derribar barreras en el reino ultraconservador.

    «Una noche maravillosa, una fiesta para el deporte en un estadio lleno. Espero que sea el inicio de una revolución social en este país». El presidente de la Liga italiana Gaetano Micciche no escatimó elogios hacia la Supercopa italiana organizada este miércoles en Arabia Saudita.

    Así, el ejecutivo intentó acallar las numerosas críticas que circularon en los días previos. «Que la Supercopa de Italia se juegue en un país islámico donde las mujeres no pueden ir al estadio si no están acompañadas por hombres es triste: este partido no lo miraré», afirmó el ultradrechista Matteo Salvini, ministro del Interior y hombre fuerte del gobierno.

    Para Gaetano Micciche, la presencia de mujeres en un estadio saudita quedará para la historia de este país, que autorizó por primera vez a las mujeres asistir a una competición internacional.

    Las mujeres han podido acudir a algunos partidos organizados en Arabia Saudí desde una decisión tomada en enero de 2018, pero siempre en sectores bien precisos del estadio.

    Toda la información e imágenes son de INFOBAE.
    Link original:  https://www.infobae.com

  • Rusia entregará a Elisa Carillo el premio ‘Alma de la Danza’

    Rusia entregará a Elisa Carillo el premio ‘Alma de la Danza’

    La bailarina mexicana Elisa Carrillo recibirá en Rusia el premio “Alma de la Danza”, el galardón más importante que otorga esa nación a las personalidades más destacadas en ese arte.

    La “prima ballerina” del Ballet Estatal de Berlín o Staatsballett Berlin será reconocida por su labor de “promoción del patrimonio clásico en el mundo”, precisó Valeria Uralskaya, editora en jefe de la renombrada revista «Ballet», que otorga el galardón junto al Ministerio de Cultura de la Federación Rusa.

    El Consejo de Redacción de la revista y el Consejo Creativo del premio, que están integrados por destacados profesionales del ámbito de la danza en Rusia, informaron del reconocimiento en una misiva enviada a Carrillo Cabrera, quien reside en la capital alemana.

    Carrillo Cabrera es la primera mexicana distinguida con el “Alma de la danza”, creado en 1994 por el Ministerio de Cultura rusa y los editores de la revista «Ballet» que rara vez se concede a ciudadanos de otras nacionalidades, se detalló en un comunicado.

    El martes 30 de abril, un día después de que se celebre el Día Internacional de la Danza, será cuando la primera bailarina recibirá el galardón en el Teatro Musical Académico de Moscú Stanislavski y Nemirovich-Danchenko, además de que habrá un concierto y una gala de ballet que protagonizará la propia Carrillo.

    Ella es Embajadora de la Cultura de México, nombramiento que le fue otorgado en 2010 por la Cámara de Diputados y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta).

    Con Maestría en ballet, en 2007 se integra al Staatsballett Berlin y cuatro años después alcanza el lugar de “primera bailarina”. Es también integrante del Consejo Nacional de Danza de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

    En 2013 recibió el Premio a la Mejor Pareja en el Festival Internacional Dance Open en San Petersburgo, que es considerado “el Óscar del Ballet”, mientras que la Cámara de Senadores mexicana la distinguió por “su labor a favor del arte y la cultura de México”.

    Ese mismo año estrena en el país “Infinita Frida”, obra de Yuri Smekalov que está basada en la vida de la pintora mexicana Frida Kahlo y que llevó con éxito a San Petersburgo en 2015.

    También en 2013 crea la Fundación Elisa Carrillo Cabrera A.C., asociación dedicada a difundir, promover y desarrollar en México las artes, específicamente la danza, así como la formación de jóvenes bailarines.

    A través de su fundación, Elisa Carrillo gestionó y organizó el Diplomado en Pedagogía de la Danza Clásica para lo cual trajo a México a siete expertos de la Academia Vagánova de Ballet Ruso y de la Academia Estatal de Coreografía de Moscú, conocida comúnmente como Escuela de Ballet del Teatro Bolshói, quienes compartieron su saber y experiencia con 32 maestros de ballet.

    Nacida en el año de 1984 en Texcoco, Estado de México, en esa misma vertiente esa entidad creó en su honor las Becas Elisa Carrillo Cabrera para apoyar y promover a talentos mexiquenses del ballet. En 2018 la revista Forbes se refirió a ella como “una de las cien mujeres más poderosas de México”.

    Toda la información e imágenes son de Excelsior.
    Link original:  https://www.excelsior.com.mx

  • Observatorio Nacional para la Igualdad de Género

    Como parte de una iniciativa de colaboración firmada por cinco instituciones comprometidas en la construcción de espacios de conocimiento libres de sexismo, segregación, violencia y discriminación por condición de género, en 2018 se crea el Observatorio Nacional para la Igualdad de Género en las Instituciones de Educación Superior (ONIGIES).

    El Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG), perteneciente a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Instituto Nacional de las Mujeres (Inadem), la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), así como la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), fueron los encargados de llevar este convenio a una aplicación justa de equidad de género en las instituciones de educación superior.

    A seis meses de fundar este observatorio, la directora del Centro de Investigaciones y Estudios de Género, Ana Buquet Corleto, presentó el primer informe derivado de la participación de cuarenta instituciones en el país, donde aún se demostró un bajo avance en el tema y muchas metas por alcanzar.

    Interacción multiinstitucional
    En su representación en México, ONU Mujeres fungió como entidad asesora en este convenio de colaboración para la creación del ONIGIES, el cual funciona como una plataforma web interactiva de acceso público.

    Dicho sitio se encarga de medir los avances en institucionalización y transversalización de la perspectiva de género en las cuarenta instituciones de educación superior de México entre universidades, tecnológicos, institutos, centros y colegios.

    “Este observatorio tiene a su vez datos estadísticos en sus tres poblaciones, la académica, estudiantil y administrativa, de cómo se distribuyen las áreas de conocimiento”, explicó Ana Buquet.

    Universidades con perspectiva de género
    Como parte de sus objetivos, el ONIGIES elaboró un sistema de medición de avances institucionales hacia la igualdad de género en estos centros de educación superior que estima el grado de consolidación de los procesos de incorporación de la perspectiva de género.

    De acuerdo con la directiva, el sistema fue diseñado con base en la definición de ocho ejes de avance que las instituciones de educación superior necesitan impulsar para la construcción interior de relaciones libres de discriminación por motivos de género.

    “Los ocho ejes en que nos basamos son legislación, igualdad de oportunidades, corresponsabilidad, estadísticas, lenguaje, sensibilización, estudios de género y no violencia. Todo esto nos permite ver el avance de las instituciones en cada uno de estos rubros”.

    Así, el ONIGIES tomó una escala de avance del cero al cinco, donde el primero representa un avance nulo y el cinco un avance consolidado; sin embargo, las instituciones de educación superior participantes obtuvieron un promedio general de 1.5, lo que supone un bajo avance en la incorporación de la perspectiva de género.

    Tales resultados afirman en las instituciones la necesidad de impulsar medidas para un avance integral y simultáneo hacia la igualdad de género, pues la especialista Ana Buquet consideró que aún hay trabajo por delante.

    Metas alcanzables
    “Estos resultados hablan de que hay equilibrio entre hombres y mujeres a nivel general pero hay un desequilibrio en la participación de las mujeres en los espacios de toma de decisiones”.

    Del total de las instituciones de educación superior participantes, ninguna alcanzó el tres de la escala de medición, lo que refleja la complejidad y magnitud del desafío que estos centros enfrentan.

    Los anteriores datos del observatorio representan un primer paso para la identificación de áreas en las cuales se debe y puede avanzar en la igualdad de género desde la educación superior, por lo que es de gran interés contar con recomendaciones específicas en cada uno de los ejes que indiquen una hoja de ruta.

    Todos los institutos participantes reportaron avances en diferentes escalas, gracias al inicio de un proceso de institucionalización y transversalización de la perspectiva de género.

    De acuerdo con Ana Buquet, el reto de ahora en adelante es el fortalecimiento de dichos progresos, pues este primer informe es un aliciente que acelera el proceso y motiva acciones que no estaban anteriormente contempladas, o que hasta ahora habían sido aplazadas.

    “Más allá de la responsabilidad social de las instituciones de educación superior por promover políticas de igualdad e inclusión, por respetar los derechos humanos, evitar la discriminación, promover la justicia e igualdad de género, también tiene beneficios en la contribución a la excelencia académica y científica. Definitivamente la igualdad de género mejora los ambientes institucionales”.

    Toda la información e imágenes son de CONACYT PRENSA.
    Link original: http://www.conacytprensa.mx

  • 2018, un año marcado por las resistencias feministas y de mujeres

    2018, un año marcado por las resistencias feministas y de mujeres

    Recién comenzó un nuevo año, muchos y diversos son los temas que los movimientos feministas desean ver en las agendas nacionales e internacionales. El derecho a elegir sobre nuestros cuerpos,  a una vida digna y libre de violencia, la eliminación de la brecha salarial, la erradicación de los ataques contra activistas, defensoras y periodistas, son algunos de los más apremiantes. En México las exigencias de los movimientos #FeminicidioEmergenciaNacional y #NiUnaMenos siguen siendo una necesidad de primer orden.

    A 70 años de la Declaración Universal de Derechos Humanos de la ONU, Amnistía Internacional publicó el informe Derechos Hoy en el que se analizan los momentos decisivos y los movimientos que impulsaron cambios durante 2018. La publicación que a nivel global las mujeres encabezaron  muchas luchas en materia de derechos humanos, muchas de ellas denuncias contra las políticas misóginas, xenófobas y homófobas que buscan cercenar la libertad y la dignidad de la personas en gran parte del mundo.

    “2018 pasó a la historia como el año en el que las mujeres tomaron las calles para exigir justicia, igualdad y derechos”.

    En 2015, a raíz de la indignación provocada por el incremento de asesinatos violentos de mujeres, en Argentina surgió el movimiento latinoamericano Ni Una Menos,que se ha convertido en un hito de la lucha contra la violencia feminicida y el acceso a la justicia. Millones de mujeres en México, Perú, Uruguay, Chile, India, y Sudáfrica tomaron las calles para denunciar la violencia a la que se enfrentan dentro y fuera de los hogares. El 25 de noviembre de 2018, Día Internacional de la Eliminación de Violencia Contra Mujer, Ni una menos fue una de las consignas más vitoreadas en múltiples países del mundo.

    El movimiento #MeToo surgió como denuncia pública de las agresiones sexuales, abuso, explotación y violencia que impera en la industria del cine de Hollywood, no obstante, en poco tiempo se convirtió en una campaña que adquirió gran relevancia y que logró evidenciar las prácticas de abuso y discriminación en distintos ámbitos y latitudes de Asia, Europa y más recientemente América Latina. El hasgtag #MeToo ganó los primeros lugares en las tendencias de Twitter y durante semanas figuró en las primeras planas a nivel global. El #YoTambién se convirtió en fuente de solidaridad y apoyo entre mujeres alrededor del mundo y se hizo evidente con el impacto de la convocatoria por la Huelga Feminista en 2018 y la multitudinaria manifestación del 8-M del mismo año, a la cual se adhirieron mujeres de más de 70 países.

    Las mujeres han estado en las trincheras de lucha de todo el mundo, sus voces han inundado las calles y el internet a lo largo y ancho del planeta.

    El 40% de las mujeres en edad reproductiva vive en países en los que el aborto sigue siendo un delito. El Salvador es una de las seis naciones de América Latina y el Caribe donde el aborto está prohibido bajo cualquier circunstancia, incluso cuando el embarazo es producto de una violación. En Argentina el Senado votó por un estrecho margen en contra del proyecto de ley que legalizaba el aborto libre en las primeras 14 semanas de embarazo. En EE. UU. y Polonia la reticencia sobre este tema es rampante. La escalada de políticas que atentan contra los derechos de las mujeres ha exigido que el movimiento feminista se ponga al frente de la discusión. La Marea Verde inundó las redes sociales y las calles de Argentina, Polonia, Irlanda, España, México, con un objetivo común: el respeto de nuestros derechos sexuales y reproductivos.

    Asimismo, las mujeres de Arabia Saudí desafiaron la prohibición para conducir autos y el uso obligatorio de hiyab. En América Latina, mujeres abanderaron las luchas por la defensa del territorio y la tierra, en particular los que pertenecen a los pueblos indígenas y afrodescendientes de Paraguay, Chile, Colombia, Honduras y Ecuador.

    No sólo se necesita reconocer el auge del activismo sino también la otra cara de la moneda, las razones por las cuales la lucha se ha convertido en parte esencial de la vida de las nuevas generaciones, los golpes a los derechos humanos, la represión y el sometimiento están a la orden del día, a pesar de ello, ahora y más que nunca, está claro que la resistencia y el poder del feminismo seguirá impregnando cada uno de los espacios este 2019.

    Toda la información e imágenes son de LUCHADORAS.
    Link original:  https://luchadoras.mx